Expulsada.

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Lucy se encontraba en la mesa, y pensando en la reunión que tuvo con Nadia, la joven maestra suspiro hondo, su conversación con aquella chica, no resultó como esperaba, quería que ella se abriese respecto a sus problemas, pero en ese momento la estudiante de pelo rubio, no quería hablar sobre sus problemas, lo bueno que consiguió dar una llave a Nadia, para poder hablar cuando quisiese con ella.

Lucy terminó de hacer algunas cosas, que debía realizar antes de irse a su casa, cuando recibió una llamada desde su celular. La joven profesora, observó el número, era su hermana, así que contestó.

—Buenas tarde hermana, ¿para que me llamabas? —Nadia le pregunto a Shopia.

—Hermana, necesito que vayas a comprar víveres, es que, ya se ha acabado todo, y bueno… no quiero salir de la casa, y como tu estas más cerca del supermercado, creo que deberías ir a comprar.

—Bien, si no queda otra—Suspiro la joven maestra, y agrego con algo de molestia—Pero para la próxima, ve tu a comprar.

Sophia agradeció a su hermana, y también le pidió que compraste un nuevo lápiz táctil, ya que el último, había sufrido un accidente, y se partió por la mitad.

—Bien, te comprare otro lápiz táctil, pero después tu me pagas la plata gastada—Le contesto Lucy a su hermana.

—Tranquila, yo te lo pagaré—Le contesto de forma alegre su hermana.

Ambas hermana colgaron, su celular al mismo tiempo, y después de un segundo suspiro por parte de Lucy, la profesora, terminó de arreglar todo, y se marchó del colegio para ir al supermercado.

Nadia después de tomar un trasporte, llegó a su casa, sacó sus llaves para abrir la puerta, pero cuando introdujo su llave en la cerradura, no pudo girarla, lo intentó varias veces, pero no podía hacerlo, entonces ya con desesperación tocó  la puerta de su casa, llamando a su madre, pero en vez de la mamá de la joven Nadia, apareció su tía.

La tía de Nadia, se podía catalogar como una mujer que le gustaba presumir de lo que no tenía, la forma que observaba a las personas, era como si fuese alguien de un estatus económico y social superior, su piel es una mezcla de una variedad de métodos embellecedores que se había aplicado durante toda su vida, o sea era demasiado blanco y estirado, a pesar de la variedad liposucciones que se había realizado, tenía una figura robusta, a pesar de que estaba endeudada hasta el cuello, siempre compraba ropa de marcas caras, su nariz era larga y encorvada como la de una bruja, y siempre andaba con el sello fundido, como si estuviese en una constante búsqueda de estiércol.

—tía, ¿Qué hace aquí? —Nadia estaba sorprendía por la aparición de la mujer.

—Bueno, tu madre decido mudarse con uno de sus amantes, y me dejó su casa, con todo lo que esta adentro—Sonrió la mujer y agrego—Estoy pensando en decorar la casa, remodelarla, ya que tal vez la quiera vender o arrendar a alguien, necesito comprar mas ropa.

—Pero… mi madre, no me aviso que se iba a mudar—La joven Nadia, bajó su vista hacia el suelo.

La tía, se río del infortunio de su sobrina, y le comento que tal vez la joven Nadia, era el estorbo de la familia, así que era mejor dejarla atrás.

—Pero… me puedo quedar, esta casa es donde me crie, y tengo mis cosas en esta casa—Nadia le comento a su tía, tratando de encontrar algún consenso con su tía.

—No te puedes quedar, ya que tu pieza, es perfecta para almacenar las cosas viejas, mientras se arregla este cuchitril—Le contesto su tía y agrego tirándole un bolso a la muchacha, la cual casi cayó por el impacto que había recibido—Aquí esta todas tus ropas y objetos que no necesito, lárgate d e una vez o llamaré a la policía.

La alumna favorita.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora