Show Yourself ¡! JohnDo

11. Final

Johnny miraba a su pueblo por el balcón de una habitación, todo se encontraba adornado de diferentes colores pero el que más predominaba era el azul, cosa que lo ponía de muy buen humor.

Habían pasado exactamente dos años desde que se había casado con Doyoung y un año y medio desde que se había vuelto rey, ahora entendía el sentimiento de su padre cuando decía que un buen rey quería siempre lo mejor para su pueblo, Doyoung era ese tipo de rey que no importaba que fuera, haría lo necesario para que la gente estuviera feliz y a salvo.

Estaba tan hundido en sus pensamientos que no notó que el espíritu del viento estaba junto a el hasta que comenzó a despeinarlo como siempre lo hacía.

—Oh, hola —dijo Johnny con diversión. —Hoy es un buen día ¿No?

—¡Johnny! —el espíritu dejó de jugar cuando se escuchó la voz de Kyungsoo.

—¿Que pasa? —Johnny entró de nuevo al castillo y salió al pasillo principal en donde se encontraba toda la familia.

—Ya nació —esta vez fue Taeil quién habló ocasionando que Johnny, como era de esperarse, cayera desmayado al suelo.

—Dios mío, ¿No había alguien mejor para esposo? —se quejó Jongin.

—Tu lo escogiste, recuerda —Mark le dió un par de palmadas en la mejilla a Johnny para que despertara.

Una vez ya consiente, entró a la habitación en dónde se encontró con su esposo y su bonito rostro que pedía a gritos una siesta.

—¿Te sientes bien? —Johnny acarició suavemente la mejilla de su esposo y le dió un beso en la frente, la habitación se oscureció de repente y Doyoung soltó una pequeña risa al ver al espíritu de la tierra asomarse por una ventana.

—Estoy bien —dijo el menor y con la cabeza señaló a una de sus sirvientas de confianza sosteniendo un pequeño bulto en sus manos. —Johnny, es una niña.

—¿Una niña? —la sirvienta le entregó a la bebé a Johnny y este la acunó en sus brazos con demasiado cuidado, se dió un momento para observarla e inevitablemente sus ojos de llenaron de lágrimas. —Una niña, mi niña.

—Nuestra, Johnny.

—Eso —el mayor había caído completamente por ella con tan solo tenerla unos segundos en sus brazos.

Y Doyoung no se quedaba atrás, había llorado sin parar y en cuanto la tuvo en sus brazos supo que sería capaz de mover tierra y mar con tal de darle una vida llena de felicidad y amor a su hija, justo como su madre se la había dado a pesar de las dificultades, prometió no ser como su padre y enseñarle que estaba completamente bien ser diferente a los demás, que lo diferente te hacía especial y no un monstruo.

—Bienvenida a la familia, HaNeul —dijo Johnny en un tono chillón haciendo reír a Doyoung.

—Lamento interrumpir pero yo quiero conocer a mi nieta —Kyungsoo entró a la habitación siendo seguido por los demás miembros de la familia.

—Es mi nieta, Shu —Jongin se colocó frente a Kyungsoo y ambos comenzaron a pelear de nuevo.

Desde que las cosas se habían calmado, Jongin y Doyoung habían podido arreglar sus diferencias y Kyungsoo se había integrado muy bien a la familia, pero desde que supieron del embarazo del menor, ambos peleaban día y noche diciendo que serían los mejores abuelos que pudieran haber existido.

—Es nieta de ambos —dijo Doyoung y nadie discutió más, sabían que no debían de llevarle la contraria al menor de la familia o terminarían siendo congelados de alguna parte como el pobre de Johnny cuando le dijo que se veía un poco gordo.