Cautivos

Desaparecidos

Capítulo corto, los estudios me ha tomado el tiempo. Pero espero actualizar en menos de una semana.

¡No leemos pronto, disfruten mariposillas! ❤

Capítulo 6

(Samantha)

Sed. Demasiado sed, el mal sabor en la boca después de una resaca es terrible. Apreté los ojos y pestañé varias veces, debido al dolor de cabeza más el sol que chocaba contra mis párpados, hasta el punto de llevarme a la cara mis delicadas sábanas con olor a jazmín...

Tragué grueso al darme de que esta eran suaves, pero no tenían el característico olor de mis pertenencias. Tenían la mezcla de un aroma maderado, mezclado con algo más que no logré identificar. Aunque me quedé en ese estado de curiosidad por unos minutos,  logré salir del trance y salí de esas sábanas para lograr entender donde me encontraba o si habia alguna seña de la persona con la que estuve aquí. Porque de ellos no tuve dudas cuando me puse de pié y sentí ciertas partes de mi cuerpo pegajosas y aunque un tanto adoloridas plenamente satisfechas también. Sin embargo mi cabeza es un desastre y no recuerdo demasiado. Nada que me sirva, más que para calentar cuando estéticamente no hay nada que comer.

Comienzo a rebuscar entre toda la habitación que es un verdadero desastre madre mía parece que un torbellino pasó por acá hace sólo unas horas.

Tormenta Samantha, acaba de azotar una habitación, justamente entró en vigor a las...

¡Aish cállate!

Y aunque dije eso no pude evitar sonrojarme gracias a los recuerdos que azotaron mi cabeza tras el comentario de mi puritana -nótese el sarcasmo- conciencia.

-¡Al fin! -chillé al encontrar mi vestido y bolso sobre uno de los sofá.

Mientras me colocaba el pedazo de tela que Carla eligió, me doy cuenta de que jamás esa maldita loca elegirá mi ropa, por ella y la loca noche que al parecer tuve ayer hubiera quedado desnuda en la calle. Pues al parecer mi amante era una cavernícola, ¡Santo Dios! El vestido tenía unas aberturas de más a los lados.

Nota mental: si en algún momento reconozco al cavernícola ardiente, agradecerle por el estilo original. ¡seré la envidia de la población femenina!

El dolor de cabeza Piraña incesantemente, misma razón por la que tomé una botella de agua ardiente -¿enserio seguimos tomando?-  que había en la habitación y me calé un trago, era la única forma de marear la resaca. Aún así no fuera la más saludable.

Salí como loca de la habitación y más rapido del hotel para tomará un taxi.

No era persona de avergonzarse, al menos no en lo poco que recuerdo, pero quise morirme por la humillación que sentí cuando una madre con su hijo pasó a mi lado y ella me miró como si fuera una aberracion a la vez que tapó sus ojos de su crío con las manos.

Mientras iba al penthouse, me fui lejos en mi cabecita, al rincón de la indignación porque con quien sea que había tenido sexo la noche anterior me había  cogido para usarlo y posteriormente desecharme. Y joder no me había ocurrido antes, Samantha Suárez, siempre fue quien se escurrió de los posibles compromisos.

Pero con todo y esos pensamientos me sonrojé como la Virgen de la colegialas al recordar fragmentos de la noche anterior.

Ambos entramos a la habitación hechos un mar de risa, en el especial, mientras sentí la piel de mi cuello agitarse suavemente bajo las vibraciones de su carcajadas y los toques de sus manos por todas partes.

¡Joder eso fue demasiado íntimo hacia parecer que era más que sexo! 

La última vez que reíste Con tanta plenitud fue con...

Esa mierda no importa es pasado y allí se debe quedar.

**

Después miles de cambios de ropa e intentar verme presentable, al fin volví a tomar para ir a la empresa. Ya estaba en mi oficina y agradecía el hecho de que nadie se atrevió a aparecerse aquí a hablar mierda de mi conducta ni que nada, mi cabeza esta indispuesta para escuchar de cantaleta de nadie.

-¡Sammy! -chilló esa horrorosa voz.

¡Claro había cantado victoria demasiado rápido!

Miré la taza de café, tomé un sorbo y...¡Dios, es delicioso! No era fan de esta bebida caliente, pero hoy lo necesitaba para mantenerme a flote, aunque debo admitir de la calidad de este café es sensacional...

-Maldita loca de prestarle atención eso, para intentar ignorarme -¡Ups!-  Te aconsejo que te tomes diez, porque usted mija, me va a explicar ya donde se metió anoche.

Juro por Dios que nadie necesitaba a una madre, nooo, no cuando se tenía una rubia de nombre Carla, pegada como solapas a camisa.

-No tengo nada que explicarte.  Soy adulta y no te debo nada, Carla -satiricé.

Se cruzó de brazos y alzó sus lindas cejas ahora Castaño bastante claro por como las tintaba para sembrar con el cabello.

-¿Disculpa? -ya se había olvidado de chillar, ¡Gracias Dios!- cuando te metiste sabrá Jesús dónde, ¿quién carajos se mato el lomo por ti? Odio echarte cosas en casa Samantha, pero eres una malagradecida. Antes solías ser una zorra egocéntrica y admiraba esa faceta de puta ama. -Se inclinó sobre mi escritorio- Pero ahora te haz dedicado a ser una perra con todo el mundo, no todos merecemos tu desprecio. No todos te hemos dañado.

Con ese sermón, abandonó la habitación sin tan siquiera dejarme objetara, y creo que fue mejor así. Nadie sabía toda la historia y nadie tenía derecho a juzgar mis cambios.

Cuando creí que podría recostarme para no sumergirme en una laguna de recuerdo, mi oficina fue nuevamente interrumpida.

-Carla no estoy para tus berrinches ¿Entiendes? -Ni quiera me volteé  a verla.

Estaba molesta, había quitado sólo escarcha pero aún así había tocado el eicgber.

Esperé un chillido, un insulto, pataletas no sé, porque lo que escuché. Aún no no estaba preparada.

Un inspector estaba frente a mí, y me dió una noticia escalofriante: mi hermana su esposo y mi sobrino llevaban desaparecidos veinticuatro horas.

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!Espero que les este gustando la historia!

Personajes desaparecidos, esto si que ya se va a poner buenoo.

Preguntillas acá:

Samantha, ¿qué les parece el personaje?👉

¿Qué opinan sobre el "Sermón de Carla" para Sam?👉

¿Desde que País os leéis? (OK Marukenzi, saca a la españolita de es cuerpo) 👉

Estaré leyendo sus preguntas o respuestas. Quiero socializar más con ustedes.

Pueden encontrarme en Instagram como: @escritos_marukenzi