#14

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Valentin.

Lena cantaba mientras los dibujitos de la tele hacían lo mismo. Mi cuerpo resacoso estaba quieto aún después de la ducha de agua helada que me di viendo los colores pero sin identificar que clase de dibujos estaban en la pantalla.

Me sacudi el pelo mojado frustrado al darme cuenta que no solo era Zoe la que recorría mi cabeza en todo momento; Romina era la nueva adquisición de mis pensamientos. Suspire y tomé mi celular con la ilusión que ella si quisiera hablar conmigo.

ROMI

Me quede con un sabor amargo en la boca...
20:30

¿Podemos hablar?
20:30

Bloquee el celular todavía con la resaca viva en mi sistema. Suspire y mire la tanga sobre la mesa sonriendo por los recuerdos de la noche anterior, fue buena siendo sincero. Pero ¿La tengo que devolver? ¿Como era su nombre? ¿Jimena? ¿Jimena que?

Lo único que recuerdo era el cuerpo hermoso y suave que sabia iba a ser difícil de borrarme de la cabeza. Los tatuajes siempre fueron algo clave en las mujeres que me gustaron alguna vez; los de Zoe eran mi debilidad, esa manga en su brazo llena de colores la identificaba tan bien, y tan bien que le quedaba con cualquier ropa incluso desnuda. Pero también debo destacar que los tatuajes de mi conquista nocturna de ayer no fueron de los peores, le quedaban bastante bien en todo su cuerpo. Suspire rascándome la nuca perdido en mis pensamientos.

-Papi...- Dijo Lena apoyándose en mis rodillas, la alze y se paró en mis piernas agarrandome la cara con sus minis manitos.

-Que pasa amor?.- Le dije y ella me miro con sus ojos turquesas y me sonrió.- Te extrañé...

-Yo tamien.- Dijo y me dio un beso en la nariz para que muriera de ternura.- Al parque?

-Queres ir al parque?.- Le dije y ella asintio contenta. Suspire sabiendo que mi día planeado de fiaca se cancelaba.- Te tenes que cambiar si...

-No..

-Lena hace frio afuera.- Dije sin querer pelear con ella y con su caracter podrido.- No podemos ir de crocs; papá también se va a poner zapatillas...

Estire mi mano y ella convencida la tomo, subimos las escaleras y me puse a buscar la ropa adecuada a nuestra salida de parque.

(....)

Miraba atento a cada paso que mi hija daba en la base alta del tobogán rojo que ella amaba deslizarse, se sentó y con sus ojos turquesas me vio para asegurarse de que al final del juego mis brazos la iba a agarrar.

-Dale amor..- Dije sonriendo dándole esa seguridad, ella se soltó y se deslizó por su tobogán favorito. Reimos los dos cuando ya en mis brazos estaba.- ¿Otra vez?

-Shi..- Dijo y la baje despacio al piso para que subiera con mi ayuda nuevamente y repetir el proceso.

ROMINA

-Y desde ahí no quise saber nada con hámster.- Termino de contar la anécdota Sebas de su difunto hámster. Yo trataba de recuperar el aire de la risa que me causó.

-Es imposible que no distingan si estaba vivo o muerto Sebastián.- Dije riéndome. Él también al igual que yo trababa de ponerse serio.

-Estaba muerto Romi... para mi lo estaba.- Dijo y volvimos a reír.- Hace unas semanas vi ese video que explicaba que según los hámsters hibernan y no están muertos..

-No te dejo que me cuides ni una planta a vos.- Reí y él solo negó tomando de su vaso un sorbo de cerveza.

Lo mire; la verdad que era muy lindo, su sonrisa acompañada de esos ojos celestes lo eran todo, le sonreí al momento que noto que lo miraba fijo.

Ella, el amor de mi vida (Valentín Oliva- Wos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora