— ¿Estás seguro que eso es un gato? ¡Esta demasiado gordo!Hablo Arnold Schwarzenegger, no es por ser grosera pero usted no está en las condiciones de decirme que estoy o no gorda. Perdonen mí vocabulario, o más bien mis pensamientos, pero deberán entender y comprender que está situación es de lo más ridícula, al menos para mí lo es. Mí nombre es demasiado largo para decirlo, a veces soy el amor de su vida, otras su reina pero prefiero que me llamen simplemente "Ama suprema", aunque ella insiste en llamarme Friga, llevo una vida bastante tranquila en mí casa, en este pequeño pueblo de habitantes pintorescos.
Soy muy observadora y me deleito con todo detalle del mundo que me rodea. Soy una gata sencilla. La luz del sol en la mañana entrando a través de las ventanas, el dulce sabor de una taza de leche fría, dormir en la cama de mí dueña e intentar ahogarla en las mañanas, ¡Ah! soy fácil de complacer, en este mundo existen muchas cosas que amo y me gustan, entre ellas mí dueña, Sama.
Mi existencia seria algo monótona si la vida no tuviera esos pequeños detalles, me parece que tomar en serio los grandes problemas es de humanos y yo soy demasiado superior como para compararme con los de su nivel. Con algunas excepciones, por supuesto. El amor y la muerte son cosas bastante curiosas, y desconocidas para mí.
Por eso cuando veo algo que roce cualquiera de esos dos temas, mi atención se concentra y puedo llegar a obsesionarme. También es debido a eso que Tae-sung se ha convertido en mí persona favorita en el tiempo que llevamos de conocernos, es un chico apuesto, tierno y lleno de vida, cosa que contrasta con la usual melancolía de mí dueña.
Así que como buena vecina chismosa que soy me dedicaré de lleno al deber de saber todo lo relacionado al tema, después de todo la vida de Sama es mi telenovela, claro que no soy una gata común, soy una reina que ama hacer cosas interesantes así que a mí lado no te vas a aburrir y si lo haces es porque eres un plebeyo aburrido que no aprecia la majestuosidad de un gato.
Soy una gatita carey, los de mi raza casi siempre son dejados al último, al principio mí dueña decía que parecía un pedazo de materia fecal, pero ahora soy el amor de su vida, soy bastante esponjosa y flexible, además de tener dos hermosos ojos amarillos, con los cuales observó el mundo entero desde distintos puntos, desafortunadamente no puedo compartir mis pensamientos o emociones con los demás, tampoco mis descubrimientos, solo puedo limitarme a decir: "Miau, miau", pero estoy segura que ustedes aquí me podrán entender.
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FRIGA ES UNA GATA QUE DICE MIAU MIAU (Novela Cristiana)
Humor¿Cómo describir a Frigopolis Metrópolis Napolitana Fritel Gatunus Jodonus? Más conocida simplemente como "Friga" una esponjosa gata empezará a interactuar con su nueva familia, en especial con su extraña e imaginativa dueña, viendo cómo inicia una n...