❍⃝⃘۪۪۪͡⫽⃟ཱཽུཷ⃝⃟͜░⃟Beso.

519 47 78
                                    

Los días pasaban y la maldita tensión crecía cada vez más, no tengo la paciencia suficiente ni necesaria para seguir con esto, sus malditos finos labios carmesí ya no me pueden traer más impaciente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los días pasaban y la maldita tensión crecía cada vez más, no tengo la paciencia suficiente ni necesaria para seguir con esto, sus malditos finos labios carmesí ya no me pueden traer más impaciente.

Estábamos en el patio del instituto, tú como siempre charlando con Kisame, y yo con Deidara conversando sobre aquello que nos parecía artísticamente correcto, por llamarlo así, mierda, no podía dejar de observarte a lo lejos con tu amigo de cabellos azules.

Simplemente me era imposible, porque ya bien la cercanía entre nosotros con el pasar de los días se hacía cada vez más grande, la distancia se volvía nula y mis impulsos se hacían casi incontrolables.

Tu gruesa voz resonaba en mi cabeza cada vez que mi memoria podía recordar su belleza auditiva, y mis pensamientos sencillamente no me bastaban, necesitaba escuchar tu voz, diciendo lo que sea, simplemente lo necesitaba...

Sasori!"

Me llamaste a lo lejos sin importarte haber interrumpido a Deidara, hubieras visto su rostro cuando calló en seco por tu voz, su cara era un poema que no me canso de recordar.

"Danna, lo llaman".

Me dijo el rubio algo frustrado, soltó un suspiro haciendo un ademán con su mano que podía ir.

Asentí ante la acción de mi compañero y me levanté, observando como te despedías de tu amigo y sonreías ladeadamente esperando que estuviera frente a ti.

Me aproxime con lentitud, observando cuidadosamente donde pisaba, ya que era consciente que podía tropezar con cualquier cosa, pero tampoco exagerando.

Volteé a ver a Deidara, creí que estaba observándome burlándose de mi suma concentración al caminar solo para ir contigo, pero al ver que estaba con un chico peli-negro el cuál no pude ver bien, no pude evitar sonreír levemente... se veía realmente feliz charlando con él, eso me alegró y tranquilizó por ambas partes, pero todo ese optimismo fue arrebatado por una piedra que me hizo caer.

A punto de tocar el suelo, me tomaste por los hombros impidiendo el contacto con el mismo, aún sintiendo el vértigo y la adrenalina por la sorpresa de ello, me quedé observándote mientras me ponías de pie y me preguntabas si estaba bien.

🍥⃝⃕3O Días De OTP +18 - ItaSaso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora