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Katsuki Bakugou, un detective y abogado bastante admirado en el departamento de policías. Era constantemente el ganador de los casos más importantes, su nombre estaba en todos los casos de alto nivel.

No participaba en muchos de ellos a comparación de los demás, ya que pocos para él de verdad necesitaban de su atención. Claro está que en cada caso en el que él había participado, la justicia había ganado.

Desde encontrar pistas dónde los simples policías no podían encontrar, hasta pensar en situaciones e historias realmente complicadas, que al fin de cuentas, todas eran véridicas. En uno que otro de sus casos, la realidad superaba el drama de las películas de acción.

Relacionaba pistas con historias que nadie normal podría pensar que tenían algo que ver.

Fue el héroe de muchos niños pequeños. De mujeres que sufrían por la mano dura de su esposo, hasta de los pedazos de mierda que no querían hacerse cargo de sus hijos. Eso era un poco del historial de Katsuki, quíen aún estaba en sus muy felices veinte. Sí, veinte.

Para muchos, la primera impresión del rubio de carácter fuerte fue que había entrado a aquel departamento solo por ser uno de los consentidos de Yagi Toshinori, el jefe de la policía. Pero el rubio, en su primer caso, había demostrado que claramente todos estaban equivocados.

A su corta edad, Katsuki tenía una gran habilidad para descubrir los problemas de la gente. Lenguaje corporal, manera de hablar y expresarse le daban un informe detallado de si la persona esta mintiendo, si estaba feliz o estresada. Tenía una gran habilidad para analizar a las personas, y eso fue lo que Yagi había visto en él a penas estaba en la preparatoria.

Había conocido al jefe de la Policía sin saber realmente quíen era. Los profesores habían encontrado talento en él, y sus amigos habían publicado cosas sobre su persona. Tarde o temprano el chico maravilla llegaría a los oídos de la policía gracias a que se hizo viral uno de los vídeos de Katsuki.

El vídeo en dónde él se presentaba fue grabado a escondidas. Cuando habían acusado a uno de sus compañeros por haber chantajeado y acosado a otra de sus compañeras. Estaban diciendo los hechos, lo que sabían y las pistas que tenían. Katsuki habló la mayor parte del tiempo, estaba defendiendo a muerte a la chica.

Lo que había pasado realmente fue que ambos, el chico y la chica estaban saliendo a escondidas de todos. Un día el chico, bastante irrespetuoso a su parecer, le había pedido una foto...indebida. Y ella no tuvo problemas en enviar aquella foto, sin saber lo que haría más tarde con ella.

El chico se la había enviado a sus amigos, para que le creyensen de que de verdad tenía pareja. Presumiendo de su actual novia, sus amigos más tarde pasaron aquella foto a sus conocidos y así sucesivamente creando una cadena. Hasta que la foto absolutamente íntima de la chica quedó en los celulares de casí toda la escuela.

Aquello fue descubierto por Katsuki quíen no dudo en decir todo con la voz en alta y sin avergonzarse. El chico quedó suspendido, arrebatado de su teléfono celular, y muchas otras cosas. Además de que sus padres fueron citados para hablar con la directora, puesto a que quizás podrían borrar lo que el chico había compartido, pero no podría borrar todas las veces que fue repetido el procedimiento en todos los celulares.

Los padres de la chica demandaron a el muchacho. Tuvieron que pagar por el daño cometido, y Katsuki salió orgulloso de la oficina de su directora. Había ganado la batalla y su compañera hasta le propuso pagarle por haber ayudado tanto a que todo se solucionara. Katsuki se negó, ya que él mismo quiso formar parte del problema.

Mientras ellos aún no sabían, uno de los mejores amigos del rubio había grabado toda la escena. En poco tiempo el vídeo se hizo viral, provocando conmoción en las redes. Lo apodaron cómo "el niño maravilla" desde ese entonces.

《El Misterioso Caso Del Niño De Ojos Verdes》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora