A pesar de que lentamente el lazo se fue recomponiendo de a poco desde que ambos ingresaron a UA, Izuku no podía superar el rechazo que sufrió aquel día, cuando Katsuki los dejó encerrado en la bodega del gimnasio de la secundaria Aldera.
A lo largo del año, Katsuki le había dado órdenes a Izuku. A veces eran dadas sin querer, por descuido, pero las consecuencias de ellas eran desastrosas para el pobre Sub.
El abandono y descuido que sufrió aquella vez hacía que cada orden llevara a su mente a un vórtice de decadencia y autodesprecio. Normalmente, Izuku podía evitar la recaída si el poder dominante usado era poco, pero a veces no lo lograba. Esas veces se lo veía abatido, triste y lloroso por varios días seguidos.
Todos sus compañeros de la Clase 1-A no sabían a qué se debían estos cambios repentinos, siempre parecía estar muy bien el día anterior. Aunque nadie tenía conocimiento de las dinámicas del líbido de los otros, no porque fuera un tema taboo, sino que sólo era una cuestión de educación.
Al comienzo del año casi no se dirigían la palabra, prácticamente no se habían hablado desde el día que el villano de lodo los atacó. Su relación fue mejorando con el tiempo y con la ayuda de algunas personas.
Una de las cosas principales que los había ayudado a controlar sus dinámicas fue un programa que se implementó ese mismo año en UA. Ellos se creyeron afortunados por poder entrar, aunque varios años después de graduarse, se enteraron que dicho programa se había creado a causa de su caso y el de otros estudiantes.
Las primeras cuatro veces no fueron órdenes intencionales, básicamente Katsuki sólo quería que Izuku dejará de murmurar a sus espaldas y lo mandó a callar. El tono de éstas era bajo y el poder dominante no era fuerte pero, después de unos minutos, cuando el de instinto sumiso se percataba que no habría ningún tipo de contacto luego de cada orden, entristecía tanto que casi se largaba a llorar a mares en medio de la clase cada vez que pasaba.
La sexta vez sí fue con intención. Después de su pelea en el campo de entrenamiento beta, Izuku le confió a Katsuki el secreto de su Don adquirido.
El hecho de que, según el pecoso, gracias a haber recibido el One For All por parte de All Might, Katsuki volvía a prestarle atención, a hablarle y relacionarse con él, le dió la confianza para hablarle.
Era el último día de castigo de Izuku, mañana tendría que volver a clases y ya no tendría la oportunidad de estar a solas con Katsuki. Juntó toda la confianza que pudo y titubeante se acercó al otro.
—Kacchan— lo dijo tan bajo que el aludido apenas lo escuchó.
—¡Qué quieres! ¿Por qué no estás limpiando?
—¡Kacchan!—dudó un segundo y soltó su pregunta tan rápido que las palabras se mezclaron tanto que ni él mismo entendió lo que dijo.
—¿¡Eh!?—los nervios de Izuku aumentaban exponencialmente bajo la impaciente mirada rojiza del otro. Quizo que le repita, ya que parece que pudo entender algunas palabras sueltas en esa inentendible pregunta. Los ojos verdes rápidamente comenzaron a cristalizarse por las lágrimas que se acumularon, pero estaba decidido, respiró profundamente un par de veces para volver a juntar confianza y repetir lentamente, mirando al otro directamente a los ojos.
—¿Ahora que tengo un Don si puedo ser digno de ti?
Katsuki quedó mudo, impresionado por la pregunta, nunca se hubiese imaginado que Izuku le preguntaría algo así. Pero, si lo pensaba bien, siempre se comportó como un imbécil con él desde que manifestó su Don y fue mucho peor durante la secundaria, así que, en el fondo, no le sorprendía realmente.
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De rodillas [KatsuDeku - Dom/Sub]
FanfictionCuando las dinámicas del líbido no se satisfacen los desequilibrios aparecen. La culpa y el trauma evitan el desenvolvimiento, pero los lazos rotos siempre se pueden sanar. Pareja: Bakugõ Katsuki x Midoriya Izuku ... Actualmente participando del #bk...