Capítulo 6

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Capítulo 6: Coliseo

Kakyoin miró a los demonios restantes con total disgusto, con los brazos cruzados. "Ahora, ¿qué hago con todos ustedes?"

"Uh ..." aventuró Millie, sonriendo nerviosamente. "¿Déjanos ir?"

"No."

"Maldito."

Michael saltó frente a Millie, mostrando los dientes. "¡Tendrás que pasar por mí si quieres llegar a ellos!"

"Iba a pasar por ti de todos modos", se burló Kakyoin, [Hierofante Verde] apareciendo ante él. "Pero si eres voluntario ..."

[Hierophant Green] preparó un Emerald Splash para los demonios cuando Moxxie saltó sobre una de las paredes de cobertura y agarró a Millie de la mano. "¡Sammy! ¡Gabriel! ¡Rotonda!"

"¡Seré un ruuuuuundabout!" El demonio sonriente se rió, fabricando un GAU-19.

Kakyoin no se movió cuando el demonio desató una tormenta de rondas perforantes del tamaño de un pulgar por el pasillo cerrado. Las hebras entrecruzadas de [Hierofante Verde] se encendieron y brillaron cuando interceptaron el aluvión mortal, dejando ilesos al escolar y su esclavo. El rugido ensordecedor del cañón giratorio se cortó abruptamente cuando el tambor de munición se secó, dejando solo el zumbido del motor eléctrico del arma.

[Hierofante Verde] se acercó al homúnculo, una columna de fluido verde espeso corriendo entre sus manos. "En realidad no pensaste que eso iba a funcionar, ¿verdad?"

"¡No!"

Kakyoin parpadeó sorprendido y se dio la vuelta para ver a Gabriel surgiendo del suelo, con un lanzallamas M2 en sus manos. "¡Desvía esto, Pretty Boy!"

El lanzallamas rugió como un dragón, el calor y el calor llenaron el pasillo. Kakyoin gruñó de sorpresa cuando [Hierofante Verde] tiró de él hacia atrás justo a tiempo para escapar de la enorme columna de llamas anaranjadas. Su hijo en cautiverio no tuvo tanta suerte y fue instantáneamente envuelto en napalm pegajoso y ardiente. Kakyoin patinó hasta detenerse entre los demonios, cada uno de los cuales apuntó con un arma.

[Hierofante Verde] estuvo entre ellos en un instante, los zarcillos envolvieron a los diablillos y los arrojaron lejos. El Stand apenas se movió cuando Samael aplastó su GAU-19 sobre su cabeza, rompiéndola. [Hierophant Green] lo envió al suelo con una ráfaga de tentáculos, se dio la vuelta justo a tiempo para recibir un fuerte golpe en la cara de Michael. Kakyoin gruñó y tropezó, un fino chorro de sangre brotó de su boca, sus gafas de sol resonando por el suelo.

"Oh, sí", dijo Michael, examinando sus puños. "Solo los Stands pueden dañarlos".

Él desató una ráfaga de golpes a [Hierophant Green], quien bloqueó algunos antes de deshacerse en una masa de zarcillos sueltos, reformándose detrás de él, formando Emerald Splash entre sus manos. Moxxie y Millie saltaron y derribaron a Michael al suelo justo cuando una ráfaga de esmeraldas destrozaba el aire donde él estaba ni un segundo antes. Gabriel y Samael corrieron hacia el ayudante de su familia, con armas pesadas encendidas.

Moxxie, Millie y Michael se pusieron de pie de un salto, desenfundaron las armas y se unieron para arrojar fuego sobre Kakyoin. [Hierophant Green] bloqueó y redirigió sin esfuerzo las balas, pero el gran volumen aseguró que algunos fragmentos pasaran. Kakyoin se estremeció cuando un trozo de chaqueta de cobre pasó zumbando, cortando un delgado corte en su mejilla. [Hierofante Verde] se echó hacia atrás y recogió a su usuario, levantándolo y llevándolo por el pasillo.

"Eso fue estúpido de mi parte", dijo Kakyoin, sus ojos llenos de cicatrices brillando mientras pasaba su pulgar sobre el corte. "Me volví demasiado confiado. Les permití a los monstruos que me pastorearan como una oveja. Bueno, espero que todos lo hayan disfrutado, porque ahora estoy..."

Helluva JobDonde viven las historias. Descúbrelo ahora