Nuestro tiempo juntos.

Capitulo 29

1804

- Nicolas se mostraba reacio a que me fuera con Azael... pero bajo el hecho de que yo quería ir con el no pudo hacer mucho, vivíamos en una casa señorial en un pueblo mágico/muggle al sur de Londres, ahí fue donde logramos hacernos de renombre en los dos mundos... aquella casa vio como... como el apego entre Azael y yo nació... y también vio cuando se rompió...

Lilith estaba mirando las alacenas de su casa con desgrado, todo estaba lleno de polvo y muchos de sus alimentos se habían podrido, se les olvido protegerlos, suspira sacando su varita usa fregotego para limpiarlas, Azael hacia los mismo con el resto de la casa.

- Bueno, recordatorio mental, debemos proteger la comida... a este paso estaremos muriéndonos de hambre cada vez que vengamos... - Dice con algo de diversión cuando se gira para mirar a Azael, este estaba apoyado en el marco de la puerta mirándola atentamente, Lilith sintió un ligero escalofrío, lo ignoro, alza una ceja mirándolo divertido – ¿Tengo algo en la cara? – Pregunta tratando de aligerar el ambiente, Azael sonríe de lado –

- Ahora que lo mencionas... ¿Desde cuándo que tienes cuernos? No los recordaba – Dice sonriendo ampliamente, Lilith le lanza un trapo a la cara, este lo atrapa con rapidez riendo –

- Ja ja ja, que gracioso... supongo que iré a comprar algo de comida, ¿vienes? – Pregunta mientras con un accio no verbal traía el dinero muggle, puede notar como Azael miraba por la ventana – ¿Azael? – Dice preocupada por la mirada de enojo que tenía, el azabache sacude la cabeza, cuando la mira sus ojos se dulcifican –

- Yo te alcanzo allá, quiero cambiarme de ropa... - Dice mientras se acerca a ella y la besa en la frente, Lilith asiente mientras sale por la puerta, tenia un mal presentimiento, uno muy grande –

Lilith volvía a casa con una cesta llena de verduras, carnes, queso y pan con eso tendrían por lo menos para unas semanas, mientras caminaba pensaba en el comportamiento de Azael, algo en el era mas siniestro, mas oscuro, no quería pensar que se había corrompido, pero las señales estaban claras, suspira apresurándose, tal vez si hablaba con el y lograba entender que paso, podría ayudarlo, con aquel pensamiento en mente sigue apresurándose.

Cuando estaba por llegar ve como dos hombres salen desde los arbustos, se veían algo borrachos, suspira internamente, aquellos hombres apestaban a problemas y al alcohol.

- Pero mira lo que tenemos aquí... a la curandera del pueblo... - Dice uno de los hombres –

- Así es... y esta mas hermosa que nunca... donde esta ese doctorcito tuyo preciosa? – Dice el otro mirando detrás de ella –

- Les pido amablemente que se aparten del camino por favor – Dice Lilith con calma, no quería herir muggles, pero si aquellos idiotas intentaban algo, los dejaría eunucos – No lo volveré a repetir. – Dice esta vez con seriedad –

- Y que pasara si no queremos? – Dice uno de los hombres de manera asquerosa e insinuante–

- Eres una chiquilla demasiado hermosa y sin marido... eso no puede ser así – Dice el otro de la misma manera, Lilith lucha por no rodar los ojos, no es la primera vez que le decían eso – Te vamos a ayudar...

Cuando va a responder, una sombra negra se posa detrás de los hombres, ella inmediatamente sabe quien es, y por el brillo de sus ojos estaba furioso, Lilith se tensa.

- Enserio? ¿Y qué piensas hacer al respecto? – Dice Azael con la voz llena de ira, Lilith se tensa aun mas, eso no terminaría bien – Dime... ¿que te hace pensar siquiera que permitiré que toques a mi chica? ¿¡Maldito Muggle!? – Dice mientras sonreía con sadismo –