Dos personas que se complementan, dos seres que se vuelven uno mismo, amigos, cómplices, amantes del alma. Cuando al estar juntos se siente correcto, cuando la paz interior los envuelve y simplemente crean un mundo para ellos sin perder la realidad...
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POV NANON
El despertador sonaba fuertemente y el cuerpo a mi lado se intentaba esconder del sonido aferrándose mas a mi, sonreí leve para estirar mi mano apagando el aparato para notar la mirada del pequeño ser que ya había dejado de moverse.
—Buenos días –Le dije suave para ver su sonrisa y acariciar su cabello notando que volvía a cerrar sus ojos.–Debemos levantarnos, o vendrá Off a buscarnos –Le comente divertido para dejar un pequeño beso en su cabeza así escucharlo quejarse tapando su rostro.
—Ire al baño primero, ordena la cama –Me dijo para verlo levantarse rápidamente e irse al baño pero pronto volvió dejando un beso en mi mejilla.– Buenos días –Susurro con una sonrisa para luego irse nuevamente.
Revolví mi cabello al sentir esa sensación de calidez en mi pecho que solo el contrario lograba provocar.
Luego de unos minutos había arreglado la cama y me había cambiado de ropa mientras esperaba a Chimon quien decidió cambiarse también en el baño, justo cuando tocaron el timbre de la puerta para levantarme de la cama e ir abrir.
—Chimon... –Hablo la persona delante de mi cuando abrí la puerta para sonreír al ver a Marc con desconcierto en su mirada.– ¿Como es que tu... Estás aquí? –Pregunto luego de corroborar que no se había equivocado de habitación, iba hablar pero fui interrumpido por el dueño de la habitación.
—Nanon, ¿quien era? –Pregunto Chimon acercándose mientras se ponía la camisa pero no era ese el problema sino el como las gotas de agua que caían de su cabello bajaban por su cuello reluciendo la pequeña marca que le había dejado sin querer esa noche.- Oh... Marc -Hablo sorprendido al ver al contrario parado mirándolo y deteniéndose en el cuello del mas pequeño.
—Solo venia avisarles que estamos pronto a desayunar, solo faltan ustedes –Comento Marc notando un poco lo incómodo que parecía sentirse.– Eso es todo. Me retiro –Termino de decir para verlo irse rápidamente así mirar al chico a mi lado y cerrar la puerta.
—Tengo que hablar con el, puede malinterpretar las cosas –Dijo Chimon para ver que secaba su cabello así negar acercándome a el.
—Con una marca en tu cuello y yo aquí, no creo que haya malinterpretado nada –Le dije para tomar la toalla y ayudarlo con su cabello para verlo fruncir el ceño seguido alejarse hacia el baño mirándose en el espejo.
—¡Nanon! –Grito para mirarle mostrándome lo que yo ya había visto.– Y no solo eso, tengo herido el labio por tu culpa. ¿como voy a salir asi? –Se quejo a lo que reí leve para tomar el bolso que compartíamos y sacar una crema.
