CINCO

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COMENTARIOS=ACTUALIZACIONES ♥️
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POV. SUNLEE

Me encontraba en la cocina sirviéndome un baso de leche. HaNeul y SangWoo tan solo de acabar el trabajo se fueron, no querían causar tanta incomodidad con YoonGi y sus amigos en casa, y es que, teniéndolo a él en el mismo techo que SangWoo eran solo discusiones en ambos.

Cerré mis ojos de felicidad al terminarme la leche, y me relamí mis labios y quite ese bigote de leche que se había hecho arriba de mis labios.

— Mmh... -dije y con cuidado lave el baso para dejarla en el escurridor.-

Me di la vuelta para irme dispuesta a mi habitación, pero aquella silueta de YoonGi me espantó. Di un pequeño brinco y con frustración cerré mis ojos, ¡Casi me desmayo del susto! Lo vi mal al momento de él dejar de estar recargado en la puerta y pasar como si nada.

— ¿Ni un ruidito, nada? Aish... -me di la vuelta para verlo.-

— Mi casa, mi problema. -dijo y agarró el mismo baso que hace un momento yo había usado y lavado.- Y tus amigos los pobretones ya no están aquí, ¿Verdad? -entrecerré mis ojos y lo vi fijamente cruzándose de brazos.-

— No tendremos la misma economía que tus padre, pero eso no nos hace pobre. -dije y él empezó a reír de mi comentario.- Aunque relativamente tu eres un mantenido porque solo estas viviendo del dinero de tus padres, ellos no, así que el pobre aquí viene siendo tú y más que tú. -y al segundo de decir aquello me volteó a ver, yo solo lo barrí con la mirada y me di la vuelta.-

No soportaré una crítica más de parte de él hacia mis amigos. Quizá no seré rica, ni tampoco estaré a su clase, pero lo que si dejo de ver es que tengo más neuronas que él. Esta noche dormí más que enojada por culpa de YoonGi.

UN MES DESPUÉS

Un mes ya había pasado desde lo último con YoonGi, y aunque él se encargó de hacerme la vida imposible todo este transcurso, yo no se lo permití, siempre trataba de ignorarlo y ya. A veces pienso que su pan de cada día es molestarme.

Hoy me encontraba mal, muy mal para ser sincera. Desde que me propuse la meta de ahorrar para conseguirme mi bicicleta empecé a dejar de comer en el receso por tan de ahorrar el dinero que me daba mi padre. Sentía que con solo gastar lo del pasaje ya gastaba mucho y eran pesos menos a mi cochinito, así que también decidí trabajar para la mansión Min. 

Sí, así y no me volví loca. Trabajo para la mansión Min, por lo cual también para YoonGi. Pero no le veo el lado negativo, simplemente lo veo como un apoyo extra para conseguir más pronto mi bicicleta. En la mansión la verdad hago lo mínimo -peticiones de la señora Min- pero me gusta ayudar cuando sé que se debe, como por ejemplo ahora; YoonGi necesita un vaso de agua. Él en realidad es el único que me exige algo. 

— ¡Mi vaso de agua SunLee, me estoy ahogando! -escuché decir desde la sala. Solo suspiré y como pude agarre el vaso de agua que necesitaba Min.- 

La casa hoy estaba llena, o sea, habían vendo los amigos de YoonGi, incluyendo a HoSeok, claro.

— ¡SunLee! -dijo ya desesperado.-

— Ya voy. -dije para salir de la cocina y ver en la sala al resto de los chicos sentados en los sofás y cada uno en su celular.-

Caminaba hacia dirección de YoonGi, pero sin querer tropecé con el borde del tapete y terminé por derramar el agua en nada más y nada menos en YoonGi. Abrí mis ojos de la impresión y rápidamente me levanté como pude, mis piernas en estos momentos solo temblaban, no sabía si era por lo que acaba de pasar o por lo mal que me siento. 

— Y-YoonGi... Y-yo lo... -dije al estar ya parada y en su dirección.- 

— ¡¿Eres una maldita ciega para no ver por donde vas?! -gritó con enojo. ¿Y cómo no? Había mojado sus pantalones.- ¡Sabes que estos pantalones son realmente costosos y que ni tú y tu papá trabajando todo el año los podrían pagar! -no sé si trataba de humillarme en frente de los chicos y dejarme en ridículo a mí, y cómo no, la señora Min no estaba en estos momentos en casa como para defenderme de él, y hoy, exactamente hoy simplemente no me podía defender, me sentía muy agotada para llegar a eso.-

— YoonGi... -dijo HoSeok tratando de calmar el ambiente.-

— No HoSeok, ella ya me debe muchas y hoy es mi momento. -agarro de mi brazo con brusquedad para así acercarme a él.- ¿Ahora no te puedes defender, ah? Primero muy valiente diciéndome lo que querías y muy ahora que no esta mi madre haces como si no rompieras ni un plato.

— YoonGi, me lastimas. -traté de alejarme de él, pero su agarre se reforzó más.-

— No te dejaré ir hasta que me pagues todas las que me debes. 

— YoonGi. -HoSeok se acercó más a nosotros y tratando de quitar el agarre de YoonGi en mí, pero fue inútil, YoonGi estaba cegado por la ira.-

— ¡Min YoonGi! -y por fin escuché esa voz.- ¡Suelta a SunLee en este instante! -advirtió la señora Min. YoonGi sólo pudo maldecir en bajo y soltar de una mi brazo. Yo sin tener mucho estabilidad en mis piernas me dejé caer.-

Si no fueran por los brazos de HoSeok ahorita mismo estuviera estampada en el suelo.

— ¡SunLee! -escuché decir a la señora Min alarmada.- YoonGi, trae un vaso de agua por favor. HoSeok, recuéstala en el sofá. 

HoSeok con mucho cuidado y con ayuda del chico moreno musculoso me recostaron en el sofá. ¿Estaba ya en el cielo? Sólo veo Ángeles aquí. 

— SunLee. -dijo la señora Min, posicionándose a mi lado.- Tranquila, sólo sufriste de un mareo. -mojo con cuidado mi frente con una toallita fría.- 

Tenía ocho pares de ojos mirándome, obvio que iba a estar nerviosa ante esto. YoonGi se posicionó adelante mío, y por primera vez en todo este transcurso me ayudó sin rechistar nada. 

Sí, estaba en el cielo. YoonGi no es de ayudar a la gente, y menos "Una chica como yo".

Sólo mi mirada podía caer en YoonGi y nada más en él. Es que me sorprendía que estuviera ayudando sin ningún insulto de por medio.

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¡¡Regresé!!

Lo que daríamos por que HoSeok y NamJoon nos cargaran 😩🤲🏼

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© CORAZÓN CAPRICHOSO || YGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora