SEIS

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COMENTARIOS=ACTUALIZACIONES ♥️
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Después de todo con ayuda de la señora Min y HoSeok me encaminé a mi habitación para darme una ducha relajante y recostarme a descansar. Salí del cuarto de baño para después ponerme algo calientito y recostarme en mi cama. Estaba por cerrar mis ojos, pero unos toques en la puerta me hicieron salir de sí.

— ¿Puedo pasar? -se abrió poco la puerta de mi habitación y se dejo ver mi padre. Rápidamente me levanté sentándome en mi cama. Asentí y sonreí al verlo.- ¿Cómo estas? Me contaron que casi te desmayas, ¿Por qué?

— No lo se papá. -subí y baje mis hombros en signo de no saber. Sí sabía, pero no quería decirle en sí, sabía que si le decía me iba a prohibir seguir ahorrando para mi bicicleta, y con lo mucho que me costó convencerlo para tener su permiso.- Simplemente no me levante bien, sin darme cuenta ya casi caía al suelo. -sonreí un poco.-

— Ten mas cuidado, por favor. -acarició mi cabeza y yo asentí.- Si te vuelves a sentir mal no dudes en llamarme, cuando supe de esto vine lo más rápido posible. 

— Esta bien, papá. No te preocupes, ya estoy mejor. 

— Que bueno mi niña. -me abrazó rápidamente y dejo un beso en mi mejilla.- Descansa, cariño. -sonrió por último para después salir de mi habitación.-

Sin duda alguna tenía al mejor papá del mundo. 

Sonreí y me deje caer en mi cama de nuevo para ahora sí, cerrar mis ojos y comenzar a dormir. 

UNA SEMANA DESPUÉS

— S-señora Min... -dije sorprendida al ver la bicicleta en frente mío. La vi aún sorprendida, ella mientras tanto solo sonrió.- L-lo siento... P-pero no puedo aceptar esto, e-es... -tragué duro y negué.- 

— ¿Cómo que no? -frunció su ceño al oír mi respuesta.- ¿Querías tu bicicleta, no? -asentí y ella sonrió.- Es tuya. 

— P-pero señora Min... -toqué mis manos y estaban sudando frio.- Q-que pena. -agaché mi cabeza.-

— SunLee. -me llamó y yo la miré y me sonrió de por medio.- No tienes que sentir pena, es un regalo de mí para ti y no me gusta que me desprecien, así que por favor, acepta mi regalo linda. -sonrió de nuevo y se acercó a mí.- Se cuento deseas una bicicleta, así que quise ayudar con esto.

— Muchas gracias, señora Min. -hice varias reverencias hacia ella.- En  verdad muchas gracias. -sonreí y toqué con mis dedos la bicicleta, casi solo la rozaba. No quería dañarla.- Es en verdad bonita, me gusta. 

— Súbete, toda tuya. -dijo y yo no esperé a que protestara más y me subí a ella con mucho cuidado.-

Estaba más que agradecida con la señora Min por esto, en verdad que sí. Tan concentrada estaba en mi bicicleta que no nos dimos cuenta a que hora YoonGi salió al patio trasero.

— ¿Y eso? -dijo al posicionarse de lado de su madre. Me miro mal y se cruzó de brazos.- 

— Es la bicicleta nueva de SunLee, hijo. -sonrió la señora Min.-

— ¿Tú la compraste? -dijo YoonGi y ella asintió sonriendo.-

— Entonces yo también quiero un coche. -dijo de la nada y yo rápidamente deje de hacer lo que estaba haciendo y me le quede viendo. ¿Un coche? Pero si éste tonto no pide cualquier cosa.-

— ¿Un coche? -volvió a repetir la señora Min y él asintió.- Sabes que no, YoonGi. Aún no eres apto para uno. 

— ¿Cómo que no? Ya estoy grande. -dijo muy exaltado.-

No, por favor no... Que no peleen. 

— Según tú sí, pero aún ni tienes la mayoría de edad. -la señora Min lo vio y se cruzó de brazos.-

— ¡¿Y?! HoSeok tampoco es mayor de edad y tiene un coche. -frunció sus ceño.-

— ¿Y a mí eso qué? HoSeok a demostrado ser maduro, tú no. -la señora Min se volteó hacía otro lado cruzándose de brazos, YoonGi iba a protestar pero la señora Min se adelanto en decir.- Y no me respondas, que así menos te compraremos un coche. -dijo por último para irse de allí y entrar a la mansión.-

YoonGi de su parte solo maldijo en bajo y apretó sus puños. Yo lo vi y hice una diminuta sonrisa. 

— ¡¿Y tú de que te ríes, tonta?! -preguntó sumamente molesto.-

— Pues di ti, ¿De quién más? -sonreí victoriosa y me fui de ahí con mi bicicleta, dejándolo a él con su tonta soledad.- 










































— Bienvenido señor Min. -dijeron todos al unísono, contando también a mi padre quien hacía una reverencia hacia el señor que acababa de entrar por aquella puerta.-

Sólo hizo una pequeña reverencia y empezó a caminar, dejando su maletín en el sofá, detrás de él venía gente del personal con sus maletas. No podía ocultar que aquel hombre intimidaba. 

— ¡Papá! -volteé a ver de donde salía YoonGi y corría hacia el señor Min, esté fue abrazado y una pequeña sonrisa se le formo al señor Min.-

— YoonGi, pero que grande estás. -toco su hombro y YoonGi solo asintió.- ¿Y tu madre? -preguntó y a los segundos la señora Min apareció para aquel encuentro. El señor Min sonrió y se acercó a su esposa para abrazarla y darle un beso.-

La pregunta ahora es, ¿Cuántos meses estuvo fuera el señor Min sin ver a su familia? Yo digo que bastante.

Mientras que la pequeña familia Min se dedicaba cariños yo apreciaba aquella escena escondida en aquel rincón. Quería reír por lo ridículo que se veía el tonto, ¿Quién iba a pensar que ése bravucón tenía sentimientos? Pero esta bien, no lo voy a negar que se ven tan bien, que por un momento sentí envidia de él. El tenía todo y con todo me refiero a familia... Tenía a su madre y a su padre que a pesar de los tremendos berrinches que hacía, estaban para él. 

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¡Feliz cumpleaños al YoongoBo!

Hoy tocaba actualización de YoonGi 🥰♥️

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© CORAZÓN CAPRICHOSO || YGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora