CAPÍTULO XVIII: Joseph Lambert

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ETHAN

Toco la puerta de Kendra antes de abrirla.

-¿Sí? ¿Quién habla?- me hace una seña con su dedo para que espere. La veo fruncir el ceño

-¿Cómo carajo conseguiste mi número?- Ahora yo frunzo el ceño

-Ajá, ya... ¿y? eso no te incumbe

-Ken...-susurro

-Así que me llamas luego de tanto tiempo solo porque te enteraste de que voy a casarme- cierra los ojos con fuerza- No-te-importa.

Mi ceño se frunce aún más

-Adiós, y ni si te ocurra volver a buscarme, ¿oíste?- casi grita para luego colgar la llamada.

-¿Estás bien?-inquiero un poco preocupado

-Sí...no fue nada que valga la pena-suspira

-¿Segura?-digo moviendo los papeles de una mano a la otra

-Mhmmm... ¿Qué tienes ahí?- mira en mi dirección

-¡Ah!...esto-se los entrego- son boletos y reservaciones para ti y para mí- nos señalo 

-¿Boletos? ¿Reservaciones?- enarca una ceja- ¿Tenemos alguna reunión de la cual aún no estoy enterada?

-En realidad...-vamos, Ethan, es momento de poner el plan en acción- No hay ningún viaje de trabajo por el momento.

-¿Entonces?- observa los boletos

-Es un fin de semana para conocernos-Listo, lo dije-exhalo el aire que retenía sin darme cuenta- Escucha, si queremos que todo resulte creíble, es necesario hacer esto.

-Claro, y todo esto lo hacemos para que resulte más creíble...interesante- murmura y me da una pequeña sonrisa

-¿Sí?- pregunto inseguro

-Sí...y... ¿Ethan?- dice antes de que salga de su oficina-Gracias, sé que no la mujer soñada, porque seamos sinceros- hace a un lado su silla para pararse y caminar hasta estar a unos pasos de mí- mi carácter en muchas ocasiones opaca mi belleza.

-Eso no es cierto- respondo de inmediato- Eres hermosa y brillante, tu carácter es parte de tu trabajo. Nadie espera que seas una mansa paloma cuando muchos creen que eres solo una cara bonita, si me dejas resaltar- le guiño un ojo- Eres fuerte e ingeniosa, créeme...nadie aquí, incluso a cien kilómetros a la redonda, tendría el valor para subestimarte- termino con una sonrisa.

Ella me mira fijamente por unos segundos- paso saliva sonoramente.

-Eres lindo cuando te lo propones- sonríe con los labios cerrados, se acerca y me da un beso en la mejilla.

-Obviamente, lo soy, jefa- digo antes de salir por la puerta con mi corazón latiendo alocadamente y una cara de idiota.

KENDRA

Me muerdo los labios para ocultar la expresión de mi rostro cuando Ethan cierra la puerta. Olvido por un momento la llamada de Joseph, mi ex novio/prometido.

Joshep Lambert fue mi relación más larga y también la más tormentosa. Ambos estudiamos en la misma facultad de la universidad, pero iba dos años por delante. Fue en la biblioteca donde nos conocimos... y cómo lamento eso- suspiro

-Bien, Kendra, espabila, tienes mucho trabajo y una boda a la cual asistir- me digo a mi misma antes de volver a hundirme en la montaña de carpetas que esperan mi atención.

Creo que pasa alrededor de cuatro horas cuando oigo mi estómago gruñir. Me levanto de mi asiento y me dirijo a la oficina de Ethan. Entro sin tocar, porque ser la jefa tiene sus privilegios.

-Es la hora de ir a comer, cariño- digo apoyando mis manos en su escritorio- Él me observa por encima de sus anteojos.

-¿Ya es hora?...no me di cuenta- responde para luego cerrar su laptop.

-Hay un restaurante a un parte de cuadras, cocinan delicioso, lo prometo- levanto la palma cerca de mi pecho.

-Si me intoxico, serás viuda antes de tiempo- se saca los anteojos y los guarda en su estuche

-El negro me sienta de maravilla, por si te o preguntas- contesto

-No me queda duda alguna- recorriéndome con la mirada menciona antes de agitar su cabeza- me gusta esa mirada



Hola, espero que estén bien :), protéganse mucho, que el covid no perdona.

Lxs tkm <3

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