Cap 46: Andrés... (parte 1)

205 20 3
                                    

Joaquín

Estaba en el auto con Emilio, cuando de pronto empezó a sonar mí celular.

Era un número desconocido, así que decidí mejor no contestar, pero volvió a sonar.

Pensé que tal vez sería algo importante, así que contesté.

¿Bueno?

Joaco...

Inmediatamente reconocí esa voz ronca, no puedo negar que se puso mí piel chinita cuando, después de mucho tiempo, la volví a escuchar.

—Emilio: ¿Todo bien amor?

—Si -apenas pude contestar.

Llamada

Joaquín, necesitamos hablar.

Me quedé unos segundos callado

Esta bien -por fin contesté.

Sé que por dónde vives hay un parque, quiero hablar contigo ahí.

¿Como sabes dónde...?

A las 7pm.

*Finalizó la llamada*

Guardé mí celular en mi bolsillo, aún seguía en shock.

Él no era malo, creo... Terminamos porque me fue infiel con una de sus amigas. Cuando me enteré no podía ni creerlo, es más si yo no lo hubiera visto con mis propios ojos tal vez seguiría con él. Pero hace mucho que no lo veía ni lo escuchaba.

Lo único que sabía era que, desde que terminamos, él iba todos los días a un bar. Se emborrachaba hasta caer al suelo, y se acostaba con el primero que se le cruzara.

Eso me decían algunos amigos que seguían en contacto con él, no sabía que tan cierto era, o si seguía llendo.

Lo que si era seguro es que me aterraba la idea de volver a verlo, volver a caer en sus encantos, volver a sentir esas mariposas que me causaban cosquillas en el estómago cuando lo veía.

Mis ojos se clavaron en Emilio, suspiré y negué.

Eso no iba a pasar, Emilio me enseñó el verdadero significado del amor.

Pero tenía que ir, para aclarar las cosas con él.

—Emilio: Joaquín ¿Seguro que todo está bien? -dijo preocupado.

—Sí, solo es un amigo, me llamó para vernos más tarde.

—Emilio: Ah... ¿Lo conozco?

—No, su nombre es Andrés.

—No me suena -dijo mirando hacia arriba- ¿Eso quiere decir que ya tienes planes para la tarde?

—Supongo, ¿tú?

—Creo que iré a ver a María, solo se queda unos días.

—Sí, aprovecha el tiempo.

El carro estacionó frente a mi casa, me despedí de Emilio y le pagué al chófer. Emilio no quería que yo pagase pero insistí y al final terminé ganando.

—Emilio: Nos vemos mañana, amor -dijo bajando el vidrio para darme un último beso.

—Te amo, bai -dije dejando un pequeño beso en sus labios.

Emilio

[Unas horas después]

—Entonces, ¿encontraste algo? -deje uno de los refrescos al lado de la laptop.

Me Cambiaste La Vida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora