VOY A QUERERTE POR LOS DOS

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[NARRA AROA]
Me despierto y noto que sigo tumbada en su pecho, levanto un poco la cabeza y lo miro, duerme plácidamente, con el pelo alborotado y la respiración totalmente relajada, siento como su pecho sube y baja lentamente, tiene las mejillas sonrojadas y los labios entreabiertos, esta tan guapo
Acaricio despacio su cara y tras observarlo unos segundos más me bajo de encima suyo, sigo completamente desnuda
Me pongo la ropa interior y cuando voy a ponerme la sudadera que llevaba antes, veo en la silla de su escritorio una de sus camisetas, la cojo y agradezco que sea de manga corta, estamos a principios de Junio y hace un calor insoportable, pero obviamente no iba a salir de casa con los brazos al descubierto tal y como los llevo ahora mismo
Me la pongo y salgo de su cuarto sin hacer demasiado ruido para dirigirme al baño dándome cuenta de que todavía estamos solos
Minutos después vuelvo a su habitación y veo que sigue durmiendo, me tumbo despacio esta vez a su lado y me quedo admirando su hermoso rostro realmente feliz y afortunada de estar con él
Giro mi cuerpo dándole la espalda y en ese instante noto como me abraza por la cintura
CARLOS: ¿ya hasta me robas las camisetas? -lo oigo decir en mi oído con la voz ronca y río bajito dándome la vuelta de nuevo-
YO: es que hace mucha calor para ponerme la sudadera jo -hago pucheros-
CARLOS: que si mi vida, si ya sabes que me encanta que te las pongas -sonríe y besa mis labios con dulzura-
Se sienta en la cama y se pone los bóxers  y un pantalón negro corto
CARLOS: ¿estoy guapo? -dice mirándose al espejo que tiene dentro de su armario mientras peina su tupé- madre mía, menudas ojeras llevo -se tapa la cara con las manos girándose hacia mi-
YO: exagerado -rio-
Se acerca y se pega a mi cuerpo abrazándome
CARLOS: casi no he pegado ojo estos días -suspira-
YO: yo tampoco -admito también- lo siento, no me quiero ni imaginar lo mal que lo has pasado
CARLOS: lo he pasado horrible pero se acabó ¿si?
YO: debería haberte creído joder -resoplo frustrada- todos los problemas que tenemos son por mi culpa
CARLOS: ey, no digas eso Aroa -acaricia mi cara-
YO: es verdad Carlos, no sé cómo me aguantas
CARLOS: no te aguanto, te entiendo, eres insegura, muy a mi pesar, pero tienes mil inseguridades que poco a poco desaparecerán ¿vale? tu vida no es fácil y cuando eres feliz crees que esa felicidad no va a durar, porque tu propia mente que hace pensar así, y no te culpo, pero tienes que confiar en mi y ser consciente de que te amo muchísimo y de que jamás te dañaré, te lo pido por favor, sufrir yo mira, ya me da igual, más dolor que pasé con Claudia no me harás, te lo aseguro, pero... tú Aroa, tienes que ser feliz, te lo mereces, enserio, no quiero verte mal, ni por mi ni por cualquier otra persona, ¿me entiendes chiquita? -me mira fijamente-
YO: tú me haces feliz Carlos
CARLOS: me alegro un montón de oír eso, y lo seguiré haciendo mil años más si me lo permites, pero tampoco es sano que tu felicidad dependa de mi, ni de nadie, solo puede depender de una persona, y esa eres tú, tú eres la única que va a estar contigo siempre, ni yo, ni tus padres, ni Diego, tú, puedes amarme a mi, y estoy completamente seguro de que lo haces, pero te tienes que amar primero a ti, por favor
YO: ya lo sé Carlos, pero me es imposible joder
CARLOS: no es imposible Aroa, recuerdo que hace un mes ni siquiera enseñabas tus piernas y mírate, con una camiseta que te tapa solo por los muslos, los brazos, los pechos, la tripa mi niña, he visto todo tu cuerpo, eso es maravilloso
YO: sigo teniendo mil complejos -suspiro-
YO: eso es normal, yo también los tengo, todos tenemos, nadie es perfecto, te lo aseguro, pero hay que aceptarse tal y como uno es para ser un poquito más feliz chiquita, lo importante es estar bien con uno mismo, lo que opine el resto está de más
YO: para ti es fácil, tu no estás gordo
CARLOS: no, de hecho, para mi gusto estoy demasiado delgado y hasta hace poco no me sentía agusto con mi abdomen, con esfuerzo conseguí verme bien poco a poco y gustarme y la altura es otro de mis mayores complejos, soy muy bajito Aroa, mido apenas 1,70 y eso si que no lo voy a poder cambiar jamas, solo me queda asumirlo y quererme así de pequeñito -ríe tierno-
YO: eres tan bueno y fuerte Carlos, lo tienes todo tan claro
CARLOS: fuerte eres tú mi vida, tú día a día es muchísimo peor que el mío y aun y así no te rindes nunca
YO: me autolesiono Carlos, no soporto nada
CARLOS: lo sé, y eso no está bien pero tú soportas mucho, demasiado Aroa, eres una de las personas más valientes que he conocido jamas, y yo te admiro y te amo por eso, me fascinas demasiado, toda tú
YO: no sé qué decir Carlos... -resoplo con un enorme nudo en la garganta-
CARLOS: no hace falta que digas nada
Agarra mi cara con sus dos manos y junta nuestros labios formando así un suave y sincero beso, en el cual, sin necesidad de verbalizarlo, nos aseguramos mutuamente que vamos a estar el uno para el otro con o sin complejos de por medio