Capítulo 5: Lunes te odio

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Ahora sí. Ya contado todo esto, retomaré a lo que decía. Ah, y por si se lo preguntan, al llegar a casa le conté todo a mamá (pero la verdad) y me dijo que se sentía muy indignada con Amanda. Por parte de Lau, cuando me fui, su madre dijo "Yo sé que dijiste esa mentira para encubrir a tu amiga. Esa niña es una ladrona."

Pero no importa. Ya pasaron 12 años desde ese día. Ya es lunes, 6:30 am, y tengo que ir al instituto. Estamos a fines de septiembre: empezando el segundo mes de clase. Todo este mes estuve con el grupo de siempre. A continuación se las voy a describir:

Laura Johnson: Bueno, ya conocen a Lau. No cambió mucho desde que éramos niñas. Ahora con 16 años, sigue siendo igual de traviesa, rebelde y problemática.

Ashley Bradley: Ash es morocha de ojos celestes. Es amiga de Lau desde antes que yo. Al parecer eran mejores amigas hasta que aparecí. Igualmente me llevo muy bien con ella.

Alice Morgan: Pelirroja (un tono parecido al mio), ojos verdes. Ali apareció en 1° de primaria. Ella era la nueva y todos la molestaban porque usaba anteojos, pero luego empezó a juntarse con nosotras, y hasta el día de hoy seguimos siendo amigas.

Y por último (pero no menos importante):

Natalie Clark: Nat tiene pelo morocho, aunque le gusta teñírselo seguido. Sus ojos eran marrones café. Por alguna razón, ella era MUY pacífica y hablaba seguido de los sentimientos, la energía positiva, el chi o como sea que se llama y esas cosas. Era mi segunda favorita, después de Lau, obvio.

Ese era mi grupo, incluyéndome obviamente, pero creo que no hace falta que me describa, ustedes me conocen.

A Lau y yo nos gustaba llamarnos entre nosotras "Troublemakers". ¿Por qué? Bueno, todo empezó en la clase de inglés. Estábamos leyendo una historia "corta" y apareció esa palabra. Ninguna sabía lo que significaba, así que le preguntamos a la profesora. No sé si lo dije, pero una de las cosas que más nos caracterizan a Laura y a mí era hacer bromas y travesuras, pesadas y ligeras, a nuestros amigos y enemigos (obviamente, nuestros amigos se las tomaban bien generalmente y no teníamos "enemigos" en sí, solo cuando de vez en cuando nos peleábamos con alguien). Volviendo al tema, la profesora nos respondió "Su significado es como 'creador de problemas', algo así como ustedes dos". A Lau y a mí nos divirtió tanto esta respuesta, que decidimos usar la palabra troublemakers para identificarnos, algo así como un sobrenombre.

Como sea. Me puse el uniforme (sí, tenemos que usar uniforme), feo como siempre. El uniforme de hoy consistía en una chomba azul con una pollera gris, zapatos negros, medias azules y una coleta alta. Yo siempre digo que tener uniforme tiene sus pros y sus contras. Por ejemplo, los pros son que no tienes que andar pensando qué te vas a poner, no te preocupas por si ya está muy usado y parece repetitivo. Y por otro lado está la única contra que le encontré: es feo. No importa cómo me lo ponga, siempre me queda mal, camisa adentro o afuera, short, pollera o pantalón, los incómodos zapatos, todo era horrible, y me quedaba más feo todavía.

Terminé de vestirme y fui al baño. Me lavé la cara, me cepillé el cabello y los dientes. Cuando terminé bajé a desayunar. Sí, ya sé que soy rara. Creo que soy la única persona que se lava los dientes antes de desayunar.

Bajé y sobre la mesa estaba mi desayuno favorito de los lunes. Mi mamá sabe que odio los lunes como cualquiera, entonces me prepara una chocolatada y tostadas con manteca y azúcar, o con manteca y dulce de leche.

Terminé de comer, saludé a mamá, a papá y ya en la calle llamé a Lau para avisarle que se apurara, que si nos atrasábamos más llegaríamos tarde.

Ninguna tiene permiso de conducir, nuestros padres trabajan del otro lado de la ciudad y no hay ningún bus que nos dejé cerca, por lo que vamos caminando. Ah, casi me olvidaba, Larry estaba de vacaciones, así que no nos puede llevar como de costumbre. Se estarán preguntando, ¿por qué no le dicen a alguna de sus amigas que las recoja? Lau y yo también lo pensamos, pero imaginen las manzanas algo así:

En una primera columna están las casas de Nat, de Ash y de Ali. Unas columnas más a la derecha, la escuela. Aún más columnas a la derecha la cuadra donde vivimos Lau y yo, Y muchas columnas más allá, el trabajo de los Johnson y el de mis padres.

Por lo tanto, a nadie le queda de paso llevarnos.

***

Luego de caminar las cuadras que nos separaban del instituto con Lau, ocurrió lo que predije: llegamos tarde.

-Señoritas, llegan tarde.-Era el sr. Phillips, profesor de geografía.

-Lo sentimos sr. Phillips. No volverá a ocurrir sr. Phillips.-dijimos Lau y yo al unísono.

-Lo mismo dijeron las últimas cinco veces que llegaron tarde.-segunda persona en mi lista de matar.

-Perdón, sr. Phillips, pero es que...

-¿Qué pasó esta vez?-me interrumpió-¿Acaso tu perro volvió a caer en un pozo, srita. Johnson? (¿No les conté que Lau tiene un perro? Okey, se los digo ahora. Se llama Fido y lo tiene desde hace dos o tres años. Que nombre tan común, pero a ella y sus padres les encantó.) ¿O usted no pudo encontrar los libros otra vez, srita. Olsen? No, ya sé, ambas se quedaron encerradas en sus casas de nuevo.-juro matar a este hombre luego de la sra. Johnson.

-La verdad es que ninguna de esas, sr. Phillips. Esta vez, me quedé dormida. Ninguna de sus suposiciones fue acertada, lo siento.-dijo Lau. Y con eso salimos corriendo al salón.

Por suerte, todas las clases que tenía las compartía con alguna de mis amigas. La primera y segunda hora del lunes era literatura con Lau, tercera y segunda matemática con Ali, luego el almuerzo y después de eso dos horas de historia con Nat.

Entramos al salón con Lau y todos nos miraron por unos instantes para luego seguir con lo que estaban haciendo.

-Llegan tarde, señoritas.

-Lo sabemos y lo sentimos, profesora.-dije. Nos sentamos y empezamos con la tarea. Terminamos rápido, éramos muy eficientes, así que nos pusimos a hablar en voz baja.

-Recuérdame por qué sigo siendo tu amiga.-le reproché a Laura.

-Porque te amo, nos conocemos desde los cuatro años, fui la primera amiga que te hiciste en San Francisco y gracias a mí te libras de los problemas en los que nos meto.-terminó de decir esto y me puso la cara de perrito.

-Tienes razón. Sigues aguantando todavía. Y sabes que no aguanto la carita de perro, quítala ya.-sonreí y le di un empujoncito amistoso, el cual ella me devolvió.

Terminó literatura y me dirigía a matemática con Ali. Hasta ahora todo bien. Pasamos las dos horas durmiendo con Ali y salimos a comer. Tenía mucha hambre.

Nos sentamos en nuestra mesa de siempre, con Lau, Ash, Ali y Nat. Yo comía pizza igual que Nat, mientras que las demás comían spaghetti. De pronto, Ash dijo que se iba al baño, se paró y se fue.

-Oigan, ¿sabían que van a entrar tres estudiantes nuevos?-preguntó Ali.

-No lo sabía.-dije sorprendida.

-Yo sí.-dijo Nat.-Dos entran de intercambio, pero el otro no sé. Empiezan mañana.

-¿Y ya sabemos quiénes se van?-pregunté.

-Alisson Hawkins y Tom Stevens.

-No los conozco así que no me importa.-En realidad, Alisson estaba en mi clase de geografía pero nunca crucé más de dos palabras con ella, y con Tom tuve que hacer un proyecto de biología una vez, pero no más que eso así que no me cambiaba mucho que se fueran de la escuela por el resto del año escolar.

Cuando Ash volvió, terminamos de comer y sonó el timbre. Tocaba historia con Nat. Yo ya había pasado por mi casillero a dejar mis cosas de matemática y agarrar las de historia, así que fui directo al salón y me senté esperando a Nat.

Terminó la clase y me fui disparada a mi casillero. Ya quería llegar a casa. Lo abrí y me encontré con un papel. Una nota. De Ash.

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N/a: Chan! Qué pasará? Que le habrá dicho Ash? Averígualo en el próximo capítulo! Sisisi, ya se que lo leyeron en tono de propaganda de televisión jajajaja Espero que les haya gustado, aunque haya estado un poco corto! Un saludo.

-Joy

Troublemakers [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora