Camino - MoonSun (G!P)

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Era el inicio del verano y si algo querían hacer las cuatro chicas era salir de casa y partir rumbo a la playa. Esto lo habían planeado algunos meses atrás, luego de algunos días de preparación y compras, por fin saldrían a disfrutar del sol y el mar.

El claxon de la camioneta de sus amigas les hizo saber que debían darse prisa y salir

— Byul, llevas todo lo que te pedí que guardaras anoche ? — habló una rubia mientras cargaba sus maletas hasta la entrada

— claro que si, condones, lubricante, crema para el dolor muscular, tus jugu-

— eso no idiota! Habló del bloqueador y las gafas — un rojo brillante ya adornaba su cara

— oh si, eso también — aclaró inocente

Una vez salieron se adentraron a la camioneta de sus mejores amigas y sin trabas se marcharon.

Solar estaba un poco inquieta, eran simples palabras pero esa bromita o lo que fuera de parte de su novia la habían puesto pensar, cosa que poco a poco se fue transformando en una fantasía de lo que harían en la noche cuando solo estuvieran ellas dos en la habitación.

Un suspiro casi sonando como un jadeo se escapó de entre sus labios mientras seguía pensando en lo mucho que disfrutaba follar con Byul. Se sentía culpable por pensar así ahora pero, 'que importa?' pensó, igual nadie lo sabría o eso era lo que creía.

La chica más alta la miraba, sabía lo que pasaba por su cabeza ahora, Solar era la peor tratando de disimular sus deseos, reconocía a la perfección esos gestos, mordía su labio y apretaba los puños contra el asiento mientras sus piernas se frotaban entre ellas, la pelinegra casi se burlaba por ser tan indiscreta pero prefería no decir nada, incluso, admitía para sí misma que le calentaba un poco tener la certeza de que su novia pensaba carnalmente con ella ahora, descaradamente frente a las otras chicas que estaban demasiado ocupadas cantando sus canciones favoritas como para prestarles atención

La humedad en su entrepierna fue inevitable, esto la hizo removerse en el asiento, en su nueva posición notó por el reflejo de la ventana la penetrante mirada de Byul la cual se desvío como si nada pasara, aún así logro divisar de reojo la entrepierna de la menor levemente abultada bajo sus jeans. Mordió su labio mientras sus dedos se movían ansiosos sobre su muslo para no atacar el ajeno

Ambas estaban deseosas de la otra, pero no es como si pudieran coger ahí con sus amigas viéndolas por el espejo retrovisor, eran amigas de confianza, todas son pervertidas pero siempre existen límites y hacerlo frente a ellas rebasaba ese límite, son pervertidas, no enfermas pensaron. Simplemente era una locura .

La rubia sentía como cada extensión de su cuerpo se calentaba, mordía insistente su labio haciendo que se hinche levemente, su mente solo podía imaginar el duro y apetitoso miembro que se encontraba a su costado, quería tomarlo, hacerlo crecer lo más posible y obligar a la dueña a resistir el orgasmo. Su boca se hacía agua, anhelando aquella descarga espesa sobre sus labios, y la excitación de su novia en sus manos tirando de su cabello.

La inquietud también aumento en el cuerpo de la más alta, se notaba en la forma en que sus piernas llegaban a temblar y su postura se tensaba. Que podía hacer ahora?, No lo sabía, trato de desviar su mente a cualquier otro tema pero siempre llegaba a lo mismo, sus pensamientos lujuriosos la saboteaban. Pensaba que no era su culpa, no habían tenido relaciones desde hace varias semanas debido a los exámenes finales y estaba frustrada. A un lado estaba su novia, un pequeño short dejaba lucir sus hermosas y blanquecinas piernas, la cuales se había dado cuenta que llevaba un rato mirando sin permiso. Deseaba tocarla, morderla y besarla, hacerla gemir su nombre suavemente cerca de su oído.

One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora