₀ᴍⁱᵗᵗˢᵘ₃

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[Y/N] salió de su salón, frustrado por no encontrar ninguna pista sobre quién había dejado el misterioso bento. La intriga lo acompañaría todo el día. Bajó las escaleras con rapidez, pensando en la cita con Raibaru para visitar a Osano, aunque no tenía idea de dónde estaba. Mientras todos en la Academia realizaban la limpieza matutina, él también debía hacerlo, pero su urgencia por ver a Osano era mayor.

Los pasillos de la Academia estaban iluminados por la suave luz del sol que se filtraba a través de las ventanas. Las paredes, decoradas con cuadros de exalumnos ilustres y trofeos de competencias académicas y deportivas, le daban un aire solemne al lugar. Los ecos de sus pasos resonaban en el suelo de mármol pulido, acompañándolo en su recorrido.

Al llegar al ala norte, [Y/N] divisó a Amao, rodeado de un grupo de estudiantes. Su cabello castaño y sus ojos verdes menta destacaban entre la multitud. Probablemente eran los miembros del club de cocina. Amao lo vio pasar y le hizo un gesto de saludo, acompañado de un suave rubor en sus mejillas. [Y/N], devolviendo el saludo con una sonrisa, siguió caminando, dejando atrás el club de cocina. Sin embargo, algo más llamó su atención: un club con un aspecto macabro. Vio un altar con una calavera y un pentagrama dibujado en el suelo. Sintió un escalofrío al pensar que algo así pudiera estar permitido en la Academia.

De repente, un grito resonó desde un salón cercano, atravesando las puertas cerradas.

━¡¿Cómo que no pudo venir?! ━la voz masculina estaba llena de ira━. Le dije claramente que si faltaba un día más, le quitaría el papel.

[Y/N], movido por la curiosidad, se acercó.

━Calm-Cálmese, por favor, Kizano ━respondió una voz femenina, temblorosa pero tratando de mantener el control━. Kitagawa no pudo venir por una emergencia de última hora.

[Y/N], habiendo oído suficiente, decidió marcharse. Se sentía culpable por escuchar conversaciones ajenas, pero la curiosidad es parte de la naturaleza humana. Apenas dio dos pasos cuando las puertas del club se abrieron de golpe. Un joven de cabello largo y púrpura, recogido en un bucle con una rosa en el extremo, apareció. Llevaba el uniforme masculino estándar, una capa roja larga a un lado y un brazalete de liderazgo.

━Sea cual sea esa emergencia, no debía faltar a los ensayos. Tendremos que buscar un suplente, ¡ahora! ━su expresión molesta se desvaneció al ver a [Y/N]━. ¡Tú!

[Y/N] se puso nervioso al ser el centro de atención del líder del club drama. Kizano se acercó y comenzó a caminar en círculos a su alrededor, inspeccionándolo con su mirada. [Y/N] no sabía qué hacer. Debía alejarse cuanto antes, pero se quedó congelado cuando el chico de cabello púrpura lo tocó en la cintura. Su rostro se puso rojo por el atrevimiento tan descarado del otro.

━Tienes unas curvas perfectas... Y tu rostro es afeminado... Mmm ━dijo Kizano, sujetándole suavemente la barbilla con un dedo. Estaban muy cerca el uno del otro. Tras alejarse y dar un chasquido con los dedos, miró a la chica de cabello morado━. Decidido, tú serás mi nueva Julieta. Kokona, dale el guión.

━¿¡Qué!? ━exclamaron [Y/N] y la chica llamada Kokona al unísono.

━Kizano, ¿está usted seguro? ¿Julieta no debería ser interpretada por una mujer?━preguntó Kokona, confundida.

━¿Eso importa? Míralo, tiene el cuerpo y el rostro de una chica. Con un poco de maquillaje y una peluca, nadie lo notará ━dijo Kizano, señalando a [Y/N].

[Y/N] no sabía qué decir. Estaba en shock, pero su naturaleza tímida lo hacía sentir que no tenía voz para reclamar, aunque quería hacerlo.

Mientras [Y/N] intentaba procesar lo que acababa de suceder, se percató de que todos los estudiantes alrededor observaban con interés. La presión de tantas miradas hizo que sus manos comenzaran a temblar. Amao, que había estado observando desde la distancia, se acercó lentamente, notando la incomodidad de [Y/N].

꙰𝑨𝒏𝒂𝒕𝒂 𝑵𝒐 𝑨𝒊 𝑵𝒊 𝑴𝒖𝒄𝒉𝒖̄꙰ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora