Fuck you, Finn | Fillie, Larry

0𝟷: Birthday

N/A Autora.

Era primero de febrero, Millie se había despertado por un susurro de Anne que le pedía bajar a ayudarle con la sorpresa que le tenía a su hermano, si, Harry aún vivía en su casa. La pequeña adormilada bajó encontrándose con un casi bufete de desayuno, intentó agarrar una fresa que había en un plato lleno pero recibió rápidamente un manotazo de su madre.

-Ni lo pienses, ayúdame a subir esto a su habitación- susurró ella en regaño, Harry era el consentido de mamá.

Millie rodó los ojos, tomó dos platos y subió no sin antes comer algo sin que Anne se diera cuenta, riendo bajito llegó hasta la habitación de Harry y dejó los platos en su escritorio junto a la ventana sigilosamente.
Regresó a la cocina viendo a Anne tomar varios platos como un pulpo y subiendo cuidadosamente.

-Fantástico, ¿Dejó algo para comer al menos?- resopló la castaña viendo la nevera vacía y la cocina tal como habían dejado la noche anterior, como si no hubiera rastro de él desayuno que había hecho para su hermano mayor.

No malinterpreten, Millie amaba a su hermano, no podía negarlo y era un poco raro ya que veía a muchos chicos de su clase llevarse pésimo con sus hermanos mayores o menores, pero ellos eran diferentes. Harry protegía a Millie como si ella fuese hecha de cristal, la pequeña no tan pequeña se llevaba bien con sus amigos ya que le llevaban entre 1 a 3 años maximo. Entre uno de los amigos de su hermano se encontraba Niall, Niall ¿Como podría ella describirlo?, era un chico tan amigable y carismático, blanco como la nieve y su dentadura parecía brillar cuando él sonreía, sus ojitos color azul como el cielo, era simplemente el chico más lindo que ella hubiera visto.

Sacudió su cabeza al darse cuenta que se había perdido en sus pensamientos y subió a su habitación, era lunes así que a menos de que Harry despierte para llevarla al colegio en pleno cumpleaños 19, debía apresurarse para alcanzar a Sophia y que sus padres las llevaran a ambas.
Ella no se maquillaba, tenía una belleza natural que sentía no resaltaba con kilos de maquillaje como las animadoras del colegio hacían, también vestía más cómoda y aunque sentía que no era demasiado original, las camisas grandes y los pantalones la hacían sentirse bien... y Niall elogiaba lo linda que era siempre tal como era.

Salió de casa no sin antes dejar una pequeña nota junto con el regalo que le compró a Harry en su habitación.

•  •  •

Cuando las clases terminaron Millie fue directamente a su casa, decidió caminar ya que sentía le hacía bien. Cuando llegó Anne estaba a punto de irse con Johannah, madre del novio de Harry, no volvería hasta la mañana siguiente ya que Harry organizó una fiesta esa noche y Anne por supuesto le permitió con muchas condiciones y cerrando los cuartos con llave escondiendo también adentro cosas que para ella son de valor.
Se despidió de los chicos y subió a su auto.

-¿Puedes ponerte vestido una vez en tu vida?- preguntó Harry haciendo un puchero ya dentro de casa.

-Sabes que no- dijo arrogante la castaña caminando a la sala.

-Por mi...- contestó él alargando el "i", ella sonrío y el mayor supo que la tenía controlada.

-A veces creo que no eres un hermano normal- dijo ella riendo caminando a la cocina, Harry la siguió- Es decir, alguien más no me dejaría usar vestido cuando muchos universitarios y chicos de mi edad vendrán a casa a emborracharse, ¿Sabes?.

-Yo te estaré cuidando, ¿Sabes?- contestó el imitando la voz de su hermana mientras ella sonreía- cuando estés lista vas a mi cuarto para maquillarte.- terminó el mayor riendo y corriendo por las escaleras dejando a Millie sin habla.

Más tarde, cuando la castaña empezó a revolver su armario pudo notar que había un vestido algo bonito al final de las prendas pero no estaba segura así que consultó con Harry.

-¿Crees que esto está bien?- dijo ella pegándolo a su cuerpo.

-Ah! imbecil, me estoy cambiando- gritó el ojiverde tapándose con la toalla.

-Aun se te ven tus cuatro pesones- burló ella ganándose un 'ja, ja muy graciosa' de parte del chico- pero aun no me respondiste.

-Creo que te quedara muy lindo Mills, anda que en menos de una hora empezará a llegar la gente.- dijo él corriendo a la chica de su habitación.

Millie se puso el vestido, tomó sus vans y se exaltó al ver a su hermano entrar gritando.

-¿Que te pasa?- preguntó ella.

-¿Estas loca?, vestido no va con tenis- bufó el otro.

-Cedí a ponerme un estupido vestido, pero las vans se quedan.- respondió ella mirándose al espejo. El chico cedió no tan convencido y la arrastró a su habitación para arreglarle el rostro (a palabras de Harry).

Después de que ambos estuvieran listos bajaron a acomodar lo que faltaba mientras todos llegaban. Los primeros fueron Niall y Liam lo cual le pareció fantástico a Millie, saludó a ambos chicos y abrazó fuerte a Liam a quien quería tanto como a Harry. Luego comenzaron a llegar más chicos incluidos chicos del mismo colegio que Millie pero que claramente no conocía, era más reservada que cualquier otro.

Niall notó en algún momento lo incómoda que se veía la pequeña y se sentó junto a ella sonriendo, hablando mientras la demás gente llegaba.
Por otro lado, Sophia iba entrando a casa de su mejor amiga, la buscó con la mirada pero al notar que estaba con cierto rubio la dejó un rato y fue a hablar con Harry y Louis quien ya había llegado junto a su 'molesto' hermano, a la barra de la cocina.

• • •

Pasado un rato Millie pudo notar la presencia de Sophia así que se despidió de Niall y él fue a buscar a Shawn, su mejor amigo.

-¿Te estabas divirtiendo?- preguntó Sophia moviendo sus cejas de arriba a abajo ganándose una mirada celosa de Harry junto a ese gesto de la nariz que hacía cuando algo le molestaba.

-Es Niall, Sophi, es mi amigo- dijo guiñándole un ojo discretamente mientras Sophia se aguantaba la carcajada.

Caminaron hasta la sala donde no podían ni sentarse de tanta gente que había y se apoyaron en la pared a un lado de la puerta.
Vieron aquella silueta desagradable y gruñeron.

-Hola preciosas- saludó Finn coqueto.

-¿Que quieres, idiota?- contestó Millie.

-No lo sé, lo que quieras darme- contestó él mordiéndose el labio.

-Eres un repugnante asqueroso- dijo esta vez Sophia.

Finn empezó a acercarse a la castaña y ella en respuesta tomó su entrepierna y apretó fuerte ganándose un quejido de parte de Finn.

-Aléjate, cara de rana y cierra tu boca de una buena vez.- dijo la pequeña mirando amenazante.

El azabache ya sin respiración tomó un mechón de cabello de la chica y lo jalo despacio (Ya que aunque lo insinuara, jamás lastimaría a la castaña) para que lo soltara, ella accedió y se fue del lugar con Sophia detrás de ella dejando a Finn solo. Wyatt llegó detrás de su amigo riendo.

-Ya casi te la ganas, campeón- dijo burlón el risitos palmeando su hombro mientras el otro solo sonreía viendo a Millie alejarse hacia la cocina en su pequeño vestido volado color carmesí.