Sincerely, yours » h.s

Capítulo 43

N/a: laaaast one :( el próximo epílogo. Quiero comentarles que lloré un poco escribiendo este capítulo, pero porque tuve canciones sad de fondo. Les dejaré algunas para que lo lean  con el mismo ambiente triste y lloren como yo, ah (?)

All my love - Hush Kids

Still - Niall Horan

A little bit yours - JP Saxe (con esta lloré muchísimo)

Happiest year - Jaymes Young

***

Londres, dos de julio, 2020.

Desde que entré a estudiar enfermería, siempre escuchaba por parte de mis docentes que en el ámbito clínico debíamos actuar con rapidez ante cualquier situación, tanto así que apenas teníamos el tiempo de pensar con claridad sobre lo que estábamos haciendo. Jamás me olvidaré de una de mis clases de urgencias en donde escuché por primera vez la frase "el tiempo es músculo", que básicamente hace referencia a cuando un paciente está sufriendo un infarto, cada segundo cuenta para salvar su corazón y mientras más se tarda en hacer alguna intervención, el músculo cardiaco va perdiendo su funcionalidad poco a poco.

En esas situaciones la mente de uno empieza a actuar casi por instinto, y la magia del cerebro es que recurre a la memoria en donde uno recuerda el paso por paso de qué hacer, haciendo que se actúe en piloto automático. A fin de cuentas, en tiempos desesperados se requieren medidas desesperadas.

En este caso no se trataba de salvar la vida de un paciente, se trataba de salvar la poca cordura que me quedaba.

Un día después de haberle pedido el tiempo a Harry, en un acto de impulsividad me contacté con Abril y terminé aceptando lo de 'Médicos sin Fronteras' en Ecuador, siendo la fecha de mi partida en tan solo dos días. No necesité consultarlo con nadie, ni tampoco encontré necesario seguir dándole vueltas al asunto. Sabía que lo necesitaba, que necesitaba escapar de toda la mierda que la vida me había dado últimamente, y qué mejor que ir al otro lado del planeta para poder al fin tomarme un respiro.

No me había enojado con él por el supuesto engaño. Estaba siendo sincera cuando dije que confiaba en él, que sabía que era incapaz de hacer semejante acto. Tenía más que claro que él me amaba, tanto como yo a él. Sin embargo, lo que terminó rebalsando el vaso, fue el hecho de que no me haya contado. Tampoco encontraba necesario que me comentara cada cosa que hacía en su día a día, pero ya habíamos pasado por la misma situación en donde no me contaba cosas importantes y parecía jamás terminar, sin importar cuántas veces le insistía o le demostraba lo que afectaba en nuestra relación mantener información de ese tipo en secreto.

Y también era cierto que no quería vivir dos meses enteros preocupada de que quizás qué otras cosas iban a pasar sin enterarme. Primero fue cuando no me contó lo de la gira y ahora todo este embrollo con Britney... simplemente no sabía qué pensar. No tenía ni la más remota idea de qué estaba pasando por su cabeza para que no me tenga la confianza de contarme información tan importante como aquellas. Y a pesar de que él me aseguraba que confiaba en mí, sus acciones me demostraban absolutamente lo contrario.

Jamás creí que iba a ser yo la que iba a necesitar un descanso del mismísimo Harry Styles. Me había cegado completamente a su encanto, enamorándome de lo que verdaderamente era tras la pantalla y fotografías que acostumbraba a ver, con sus reales defectos y virtudes. No me aburriré de repetir lo afortunada que fui de haber conocido dicha faceta suya y lo afortunada que fui de que él se haya enamorado de mí, viviendo la fantasía de cualquier fanática en el mundo.