Capítulo 04 [Idea].

272 22 10
                                    

||Gisei|| Capítulo 04 [Idea].

Slenderman se cruzó de brazos y esperando a que todos se calmaran comenzó a mover las piernas con nerviosismo mientras notaba como los residentes del lugar gritaban y chillaban buscando que hacer con la humana que había sido traída por el sádico asesino, Jeff the Killer.

— ¡Es que no se puede! —chillo una joven enfurecida—. ¡Es del mundo humano!—agrego golpeando la mesa con enojo.

—De todos modos, está aquí —agrego un muchacho de cabellos castaños y lentes anaranjados—. Así que... podemos divertirnos un poco —una sonrisa se hizo notar a través del objeto que ocultaba su boca por completo.

La chica que antes había hablado miro al muchacho y gruñendo le dio una patada para descargar esa ira que se estaba adueñando de todo su cuerpo.

—Hombres, ¡solo piensan en esas cosas! —Chillo enfurecida rodando los ojos—. Slender, di algo —miro al hombre sin rostro y espero repuesta manteniendo el ceño fruncido.

—Nadie hará nada con ella —gruño Jeff antes de que Slenderman tomara la palabra—. Yo la he encontrado primero —dijo apuntándose así mismo.

—Que mierdas—dijo una chica enmascarada, Jane, mientras se levantaba de su silla—. No es un juguete, Jeff —agrego enojada.

—Claro que lo es —Jeff empuño sus manos.

—Vete al diablo, maniaco —Jane saco una afilada cuchilla lista para atacar al pelinegro.

—Calma —Eyeless Jack miro a todos los que se encontraban sentados y levantándose de su silla volvió a hablar—. No sé porque tanto drama —dijo—, podemos hablar con ella, pedirle un riñón y dejarla en su casa —dijo con tranquilidad, a lo que algunos rieron y otros se llevaron las manos a la cabeza tras su estúpido comentario.

—Dije que nadie le hará nada —volvió a criticar Jeff.

La gente que se encontraba en la habitación dio un suspiro y calmándose espero a que el hombre sin rostro retomara la palabra que antes le habían quitado por la intromisión de Nina, una jovencita partidaria de Jeff.

—No puede volver como si nada hubiese pasado —dijo Slenderman aun con los brazos cruzados—. Según ella, huyo de casa —agrego—, y eso es por algo... debemos averiguar su pasado.

Jeff soltó una risa y mirando a Slenderman con seriedad volvió a hablar.

—A mí eso me importa una mierda —indicó—. Ya dije que ella me pertenece.

—Dios, Jeff —Jane se llevó las manos a la cabeza—. Este no es un lugar para simples humanos —aclaro—. Si va a estar aquí, debe haber una buena razón —replico.

—Jane tiene razón —el hombre sin rostro se levantó de su lugar—. Descubriremos quien es a toda costa —dijo—. No podemos arriesgarnos a tener un humano común y corriente por estos lugares —volvió a tomar asiento—. Podría filtrar información, y no podemos dejar que semejante cosa nos afecte.

El muchacho de cabellos marrones y lentes anaranjados se levantó de golpe, y llevándose las manos al pecho soltó una risa y hablo.

—Si eso sucede, me encargare de todo, Slenderman —sonrió—. Soy un Proxy, después de todo —dijo alegre.

Un extraño frasco fue extraído de uno de los muebles de la sala de experimentos, la mayoría había tomado la decisión de averiguar sobre el pasado de la chica. Ninguno quería que los humanos supieran mucho sobre ellos, puesto que si algo así sucedía, el lugar en el que residían seguramente sería invadido y ellos desaparecerían a causa de sus asesinatos y otros actos peligrosos.

El frasco de líquido amarillo fue puesto en las manos del Proxy que con anterioridad había hablado, y este, ocultándole en uno de sus bolsillos, miro a Jeff y espero a que este dijera en que habitación se encontraba la chica, pero tal y como esperaba, no hizo más que cruzarse de brazos y marcharse demostrando una despreocupación total.

—Búscala en todas las habitaciones, Toby —dijo Slenderman cerrando el mueble con llave para que nadie sacara algún frasco con sustancias experimentales.

El muchacho asintió y marchándose de la sala de experimentos dio rumbo hacia el pasillo cubierto de habitaciones.

 Primero inicio con la habitación de Jeff, la cual, por desgracia, no contenía a la muchacha en su interior, por lo que refunfuñando decidió hacer lo que Slenderman le había indicado, entrar a cada habitación del hogar hasta encontrar a esa escurridiza humana de apariencia sumamente desconocida para él.

Mientras iba de habitación en habitación, dio cuenta como uno de los residentes le seguía el paso, y dando media vuelta miro a esa persona con seriedad.

— ¿No sabes dónde está? —pregunto en tono burlesco.

—Estaba en la habitación desocupada —dijo el chico apoyándose en la pared—. No es mi culpa de que haya escapado —agregó enojado.

— ¿Escapo? —Toby cambio el tono burlesco a uno de preocupación—. Estaremos en problemas —se llevó las manos a la cabeza con miedo.

—Termina de buscar antes de hablar —bufo Jeff—. Aún quedan cuartos —dicho esto marcho en dirección a su habitación como si nada le importara., algo que no convenció a Ticci Toby, puesto que el pelinegro era el más preocupado en la reunión.

Toby camino por el pasillo hasta dar con la puerta de la pequeña Sally, y abriéndola con cuidado vio que la niña estaba jugando con una joven de cabellera corta y castaña, a la cual no había visto antes.

Sally miro a Toby con sus verdosos ojos, y sonriendo le invito a jugar, a lo que el muchacho se negó y le hizo saber que su visita era por otra cosa.

—Si no juegas conmigo te arrepentirás —dijo la niña inflando sus mejillas, por lo que Toby, dando un suspiro, tomo asiento al lado de ambas chicas y puso una de las muñecas entre sus manos—. Ves, nos vamos a divertir—Sally sonrió mirando al castaño.

¿Cómo se suponía que drogaría a la chica ubicada a su lado con Sally de por medio? Los minutos trascurrieron y el muchacho de cabellos castaños no hallaba momento de darle el líquido amarillento almacenado en el frasco a esa muchacha que ni se había atrevido a hablarle, hasta que, Sally, levantándose, les dijo que la sesión del Té comenzaría

—Una para Grace, para Toby y para mí —dijo la niña posando unas delicadas tasitas de color rosa sobre la mesa de juegos—. Señor Toby, ¿desea té? —pregunto Sally sonriendo.

—Si —respondió Toby sosteniendo la taza entre sus dedos aun pensando cómo hacer su movida.

— ¿Y usted señorita Grace? —pregunto la niña vertiendo Té real en la taza del muchacho.

—También —Grace sonrió mientras acercaba la taza.

Sally vertió el té sobre la taza de la chica y luego,  sirviéndose así misma, noto como Toby se acercaba a Grace poco a poco de manera sospechosa.

— ¡Oye! —Chillo la niña— ¿Qué haces? —pregunto frunciendo el ceño con disgusto.

—N-nada —Toby volvió a su lugar y rápidamente, aprovechando que Grace miraba a Sally, y Sally se cruzaba de brazos con los ojos cerrados, vertió el líquido sobre la taza de la muchacha.

—Entonces bébe —dijo la niña con seriedad ahora abriendo sus ojos y golpeando la mesita.

Toby dio un suspiro y bebiendo su Té espero a que Grace cayera en el sueño para que Slender hiciera su parte, navegar por sus memorias oscuras y temerarias.

 -.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Bueno, no ha habido mucha acción, pero pronto la habrá. Esto recién comienza, y no se fíen de las acciones de nuestros protagonistas, los seres cambian en un abrir y cerrar de ojos cuando menos lo esperas.

En este capítulo nos ha dado flojera editarlo, ya sea en ortografía o en diálogos que pensábamos quitar y añadir.

Hasta la próxima, Sam.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 24, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Gisei ||Jeff the Killer||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora