[TW: insultos homofóbicos]
Digamos que estábamos un poco solos en la escuela.
Bueno, no.
Estábamos juntos. Y no necesitábamos a nadie más.
Pero no éramos los más populares. Mason lo era.
Antes por lo menos éramos tres: nosotros y Mía. Pero se mudó a la gran ciudad un poco lejos, así que no la vemos tanto como quisiéramos. Igual hablamos mucho con ella.
Se mudó hace casi un año, justo después de saber que los tres teníamos poderes. (Ella tiene telepatía; Mason, empatía; y yo, telequinesis) (Creo) (Los tres sabíamos que nosotros teníamos poderes, pero no sabíamos que los otros dos también).
Siempre la extrañamos y preferimos no hablar de poderes por video llamada, en caso de que alguien escuche (vaya paranoia).
Ninguno de los tres sabe de dónde salieron, o si alguien más tiene o sabe.
Yo estoy casi seguro que es de parte de mi madre, porque seguramente tenía ganas de dejarme más de sus cargas.
Bueno, Mason sí. Los sacó del lado de su madre, ellos le dijeron, y pudo aprender a manejarlos.
Y para Mía es un misterio, como yo.
Mientras pienso, estoy bajando las escaleras para ir al comedor, veo a mi chico dorado sentado en una mesa solo, concentrado en su cuaderno. Y voy corriendo a él.
-Hagamos algo-empecé, él levanto la vista de su cuaderno y sonrió, ya me conoce y sabe lo descabellados que son mis planes improvisados-, no me mires así-fingí un puchero y reí-, no es una idea loca.
-Te escucho-dijo y siguió sonriendo, mostrando sus blancos (y hermosos) dientes.
-Vayamos a visitar a Mía-empecé-, necesitamos hablar más de "esto"-hice una seña con mis manos, refiriéndome a nuestros poderes-, averiguar si son una casualidad, o si hay más, o cómo controlarlos. Cómo Mía y yo los podemos controlar.
-¿Qué?-rio, porque no pensaba que lo dijera en serio-No.
-¿Por qué?-seguí insistiendo-Hace mucho no la vemos, sería bueno visitarla.
-Es que... Algo se siente raro, peligroso-explicó.-, además, ¿y si tenemos algún examen sorpresa?
-Eso ya es una excusa, dime por qué no quieres ir.
-Es que Jane...-justo tocó la campana- Solo no quiero ir aún. Si quieres puedes ir tú.
-No voy a ir sin ti, tonto.
-Entonces esta vez no. Lo siento- Se levantó, y se fue.
Cielos. Ojalá pudiera ayudarlo de otra forma que mirarlo desde lejos pero...
Mierda, tengo matemáticas.
¸.*☆*.¸
Todo el resto del día siguió igual.
No compartimos clases, pero siempre logramos vernos en los descansos o en los pasillos.
Menos hoy. Me estaba evitando. Solo hace eso si quiere evitar hablar de algo.
Le pasaba algo.
Pero, ¿por qué no me lo decía?
Pensándolo, lo primero no puede ser una razón verdadera. "Siente algo raro". Él siempre tiene corazonadas, él es así, pero no suena creíble. Más que nada porque a mí me pasa lo contrario: me siento atraído a allí. Como si algo me llamara, respuestas, aventura, no sé, algo así. Tal vez solo son ganas de escapar.
Pero también me siento atraído aquí. A donde esté Mason. El problema es que ya estoy aquí.
No lo sé, pero el día ya terminó y estoy yendo a la puerta de salida, esperando ver a Mason.
Mientras pienso y camino, veo a Mason, y él me mira, hasta que me chocó con alguien. Cuando levanto la cabeza, veo a Charly (uno de los más populares y bravucones de la escuela), trato de evitarlo pero no lo logro.
-¿Qué te pasa, joto?-pregunta, como si no hubiera sido solo un choque accidental.
-Solo estaba caminando-respondí, harto y tratando de escapar, pero sus amigos me rodearon.
-¿Lo marica se contagia? Aléjate-Me empujó para atrás.
-Espero que no, los gays tienen mejor gusto que eso-contesté, bien alto para que me escuche, mientras todo el resto se organizó para hacer un silencio imposible de imaginar en cualquier otra situación.
Y parece que no estaba de humor para bromas, porque me golpeó, lo que rompió el silencio. No sé qué tan fuerte, pero retrocedí un poco, me toqué la nariz y mis dedos se ensuciaron de sangre.
Ni siquiera era un buen insulto.
Y cuando se me empezó a nublar la vista levemente y sentía que me perdía el equilibrio, escuché una voz.
-¿Cuál es tu problema?-era Mason. Lo amo.
-¿Qué? ¿Tú también, Shellson? ¿Quieres unírtele?
Y fue Mason el que lo golpeó. Y no solo lo golpeó. Lo noqueó.
Sí...Mason es más alto y fuerte que yo. Hace boxeo.
-¿Ustedes también?-Mase miró a los amigos de Charly, que negaron la cabeza y se llevaron a su amigo.
Y yo perdí totalmente el equilibrio, y caí, pero por suerte Mase llegó a tiempo y caí en sus brazos.
Ja. Como siempre.
-¿Estás bien?-Me preguntó, mientras me sentaba en el césped junto a él.
Me froté los ojos y lo vi. Cabello desordenado, ojos preocupados del color de su alma.
Eres hermoso, Mason, eres todo lo que quiero y voy a querer siempre.
Eres una de las razones por las que estoy aquí.
Te amo. Ojalá lo sepas.
-Mejor-respondí, fijándome en sus labios ahora, tan perfectos como el resto de su cara. Siempre me preguntaré cómo se sentirán.
-Más te vale-siguió-, porque vamos a visitar a Mía.
-¿Qué?-sonreí-¿En serio?
-Sí, lo siento por tratarte mal antes. Lo pensé, y si tenemos cuidado y nos mantenemos juntos, creo que vamos a estar bien.
Siempre voy a estar a tu lado. No lo dudes.
Quería abrazarlo. Quería, no sé, besarlo.
Opté por la primera opción.
Y fui a preparar mi mochila.
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Only the brave
Novela Juvenil[⚠️TW⚠️: adicción al alcohol, abandonamiento, homofobia, autolesiones y mención de transfobia (también aclaro en los capítulos que lo mencionan)] Jacob es un chico normal. Escapa de su padre alcohólico para pasar tiempo con su mejor amigo y amor imp...