Estaba tan acostumbrado a no ver nada bueno entre todo el desastre que pensaba que yo era, que fue completamente normal no entender cómo era posible tener la suerte de haberme cruzado con alguien que brillaba con tanta luz, y que estaba cubierta de tantas cosas buenas, aunque sé que en el pasado, cuando te conocí y tus partes oscuras -al igual que las mías-, se presentaron de inmediato, no dejaba de querer descubrir -cómo cualquier empedernido con ganas de amar- de donde provenía entonces esa luz. La que a pesar de todo lograba ver en ti.
Cuando lo siguiente que se presenta luego de la primera impresión, es lo que tratamos de que no vean pero que inevitablemente salió, nada es sencillo, y la decisión se vuelve más difícil, es aquí cuando desde acá veo el pasado y digo, ¡realmente tomaste esta decisión! Refiriéndome a ti, y también a mi. Ambos tomamos esta decisión.
Es la prueba y demostración real de lo que el amor es, es el ejemplo más claro de que quien te ama, ama quién eres aunque tengas que mejorar muchas cosas, entonces aprendí a ver y valorar cada muestra de este amor como recompensas, las recompensas de tomar la decisión correcta.
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En las cartas de amor, el amor es para siempre
RomansaEsto no es una carta de amor más, es mi declaración de amor 58.284, pero quizá, la más profunda hasta el día en que te cases conmigo. Es el contrato que te asegura, que mi amor pertenece solo a tus brazos.