𝗖𝗛 27

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Justo cuando He Jin y Gong Lixin terminaban de comer su rebanada de pastel, Wu Ming y los demás irrumpieron en el restaurante con algunas bolsas de comida. Exclamaron sorprendidos al ver los cuerpos que estaban esparcidos descuidadamente por el suelo, desapareciendo inmediatamente su ansiedad.

"¡Qué buen olor!" Cuando tenía hambre, la nariz de Lu Yun era más sensible que la de un perro. Inmediatamente olió el dulce aroma del pastel en medio del olor a sangre.

"¡Guau! ¡Aquí hay pastel, tarta de huevo, leche, café, alitas de pollo y hamburguesas! ¡Tanta comida deliciosa!" Los ojos de Lu Yun se iluminaron y su boca se inundó de baba al ver toda la comida escondida en los gabinetes de limpieza y el gabinete de calentamiento. Por lo general, no miraba artículos de comida rápida tan baratos, pero eran extremadamente atractivos en este momento.


"¡Deja de quedarte boquiabierto, apúrate y empaca!" He Jin gritó mientras sacaba una bandeja destinada a contener pasteles del mostrador y colocaba todos los pasteles que Gong Lixin tenía en la bandeja.

Wu Ming, Lu Yun y Wang Tao no necesitaban que se lo dijeran dos veces. Sacaron todas las bolsas para llevar de detrás del mostrador y tiraron toda la comida de la tienda a las bolsas. Wu Ming se llevó los atractivos cuchillos de la cocina. [1]

Cuando las cinco personas regresaron afuera con pasteles fragantes en sus manos, Gu Nan y Ma Jun ya habían regresado al edificio sin terminar. Habían abierto algunas bolsas de galletas para comer. No eran apetecibles pero no se atrevieron a correr el riesgo de buscar algo mejor. Habían tomado algo de comida ligera y algunas botellas de agua mineral antes de regresar rápidamente. [2]

Cuando vieron a los otros cinco regresar con las bolsas llenas hasta el borde, su envidia no pudo ocultarse.

Gong Lixin y su grupo se sentaron en su propio rincón, todo su grupo apenas pudo contenerse para no abrir las bolsas de papel que contenían la comida. El rico olor a alitas de pollo asado y pasteles dulces llenó el salón principal del primer piso. El vagabundo, Gu Nan y Ma Jun tragaron saliva. [3]

"¡Aquí, querías comer alitas de pollo picantes!" He Jin le entregó la bolsa de alitas de pollo bien envueltas a Gong Lixin.

"¡Gracias hermano mayor!" Los redondos ojos de gato de Gong Lixin se curvaron en medias lunas mientras sonreía. Inmediatamente tomó la bolsa de papel, la abrió y sacó un ala de pollo para comer. Gong Lixin no podría importarle menos los modales en este momento. Tenía demasiada hambre. Mientras comía, alcanzó a Lu Yun y Wang Tao.

"¡Come despacio! Toma, toma un poco de leche. Aún estás creciendo y necesitas calcio". [4] He Jin pensó que a pesar de que el niño era pequeño, todavía tendría que pasar por todo tipo de dificultades en un futuro cercano. Metió la pajita en el cartón de leche y no dijo nada porque todavía estaba exhausto.

"Hn, tú también comes, Gran Hermano He". Gong Lixin tomó el cartón de leche y sorbió ruidosamente, mostrando una expresión feliz mientras miraba a He Jin con agradecimiento.

Al ver al niño comer con tanta alegría y felicidad, He Jin también sonrió levemente. El dolor alrededor de su corazón se alivió. Cogió una hamburguesa y empezó a comer también. [5]

Sorprendido, Wu Ming miró a los dos con los ojos muy abiertos. Nunca había visto a He Jin cuidar tanto de una persona. Sin embargo, con toda la comida frente a él, rápidamente se olvidó de las anomalías en el comportamiento de He Jin.

El vagabundo que durante mucho tiempo había tenido hambre en su propio rincón salivaba mientras veía a los demás comer comida deliciosa. Dudó por un momento antes de inclinarse lentamente hacia las cinco personas.

Gong Lixing »» [𝔟𝔩]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora