Cuando llegó Lin Wenbo, Gong Lixin ya había regresado a la habitación proporcionada por la casa Gong y estaba lavando la ropa sucia que había usado la noche anterior. No había otra opción, ya que era el apocalipsis, la familia Gong ya no tenía una niñera que lo cuidara y solo tenía cuatro juegos de ropa en total. Después de no limpiar por un tiempo, no habría más ropa para cambiarse.
"Hermano mayor Lin, ¿vas a salir?" Al ver a Lin Wenbo cargando la bolsa, Gong Lixin se lavó la espuma de las manos y preguntó con curiosidad.
"No, estas cosas son para ti. Ven y echa un vistazo". En los ojos claros de Gong Lixin, no había codicia, deseos ni impurezas. La bruma en el corazón de Lin Wenbo se levantó inconscientemente y un toque de sonrisa apareció en su expresión fría.
"¿Qué es?" Gong Lixin se secó las manos y se acercó a su lado, mirando la bolsa de viaje abierta. Cuando vio la ropa pulcramente colocada, sus cejas se fruncieron.Solo estaba pensando en cómo su ropa era muy pequeña y dónde adquirir algunos otros conjuntos. Después de permanecer en esta época moderna durante más de un año, durante mucho tiempo estaba acostumbrado a usar ropa informal en casa, usar atuendos formales afuera y dormir en pijama. Sin embargo, hoy en día usaba un traje deportivo incluso mientras dormía, lo cual era extremadamente incómodo. Por desgracia, no tenía la costumbre de dormir desnudo, por lo que tenía que ser paciente.
No podía culpar a He Jin por tomar muy pocas cosas al principio. Bastaba con traer uno o dos juegos de artículos de primera necesidad como ropa, pero llevar más comida, armas y medicinas. En ese momento, era natural traer cosas para mantener la vida y arreglárselas con el resto.
Al ver la expresión de sorpresa del niño, la sonrisa de Lin Wenbo se hizo más profunda. Tocándose la cabeza, dijo: "Dime si notas que falta algo, te lo traeré más tarde".
"Okey." Gong Lixin asintió y sacó una prenda de vestir que se acercó a su cuerpo.
Lin Wenbo era alto y, naturalmente, su ropa no era adecuada para la pequeña Gong Lixin. Sin embargo, Lin Wenbo había considerado esto de antemano y en su mayoría traía camisetas de algodón para usar. Incluso si fuera demasiado largo, no se vería demasiado fuera de lugar y su movimiento no se restringiría. Según Gong Xiangyi, el clima después del inicio del apocalipsis cambiaría mucho. No existía la temporada de verano, ya que siempre era verano. Ya no había más cuatro estaciones de las que hablar, por lo que estas camisetas de manga corta se podían usar durante todo el año.
Cuando Gong Lixin miró la ropa una por una, Lin Wenbo hizo una inspección casual de su habitación. Al final, abrió un pequeño armario vertical que se colocó en un rincón y su rostro se oscureció de inmediato.
No había nada en el armario excepto una bolsa de montañismo. Lin Wenbo frunció el ceño y fue al baño para comprobarlo. Encontró que solo había un pequeño trozo de jabón redondo en el lavabo del baño y se lo dio al público por la base. La ropa, el baño, el champú y el lavado fueron compartidos.
Pensando en el deslumbrante champú, gel de ducha, espuma de afeitar, jabón, etc., que Gong Xiangyi colocó en el baño, el pecho de Lin Wenbo parecía aplastado por una gran piedra, lo que lo hacía sentir extremadamente avergonzado al mismo tiempo. Mirando al niño frente a él lleno de alegría ignorante, sus ojos se calentaron un poco y se apresuró a retroceder, mirando al otro.
"Hermano mayor Lin, ¿qué te pasa? ¿Por qué de repente te sientes infeliz?" El sensible Gong Lixin notó inmediatamente las emociones anormales de Lin Wenbo y extendió la mano para palmear sus hombros mientras preguntaba preocupado.
"No, el hermano mayor Lin está muy bien." Lin Wenbo colocó su mano sobre el dorso de la suave mano del niño con exuberantes yemas de los dedos, forzando una sonrisa para consolar al otro.
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Gong Lixing »» [𝔟𝔩]
PrzygodoweSeñor del fin del mundo [BL] El joven maestro del palacio subterráneo que fue criado como un caldero después de matar a su maestro y morir él mismo, renació en el cuerpo de un joven débil en los tiempos modernos. Después de disfrutar de días prósper...