Capítulo 12: Aclarar la Mente.

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Kuno

Estoy en mi cuarto, Maia me dejó a las ocho de la noche, estoy fumando para calmar la desesperación. Con razón Ted estaba tan preocupado, su hermana está con un viejo que puede ser su padre, o sea el padre de mi novia y por si fuera poco mi primer amor Limarie. Camino de lado a lado en la habitación, mi vida siempre en caos. Ella niega que me conoce, cuando la conozco muy bien, la cosa es que me ordena que no diga nada a Maia y se atreve a decirme que la deje, porque no puede verme con ella. Absurdo que me ordene, cuando no somos nada, me siento en la cama todavía sin creer mi puta suerte. No se de ella desde hace seis años, que nos dejamos porque ella quería un mejor futuro. Siempre tan ambiciosa, no siento nada por ella, odio mentirle a Maia, pero no me corresponde decir su secreto. Que ella viene de mi mundo, no es la persona que aparenta y además está Ted, lo mucho que ama a su hermana. Cuando éramos novios nos dió el permiso, incluso se molestó con ella cuando me dejó. Después la vida mía fue jugar con las mujeres, por eso nunca le quise dar una oportunidad a Less, no creía en el amor. Tengo que hablar con Ted, necesito salir de estas cuatro paredes. Decido llamarlo para saber su ubicación, aunque ya me imagino donde anda. El celular suena tres veces y contesta:

-¡Hello, Serpiente!, dímelo -responde Ted y se escucha música.

-¿Estás en "El Ocho"? Tengo que hablar contigo en privado, sin los demás sólo tú y yo, ¡por favor! -sé que están todos ahí, siempre estamos juntos.

-Bueno, me invento algo y nos vemos en el "Burger King", el que está por tu casa. Te llamo cuando llegue -rápido corta la llamada.

Me voy a bañar para darle tiempo, busco mis cosas y me dirijo hacía el baño. Cuando voy a entrar al baño me encuentro a mi madre vomitando, está abrazando el toilet, que romántica se ve.

-Mami, se te paso la mano con las bebidas tan temprano. Déjame ayudarte -me acerco y agarro su pelo.

Ella expulsa lo último, le acaricio la espalda, hace mucho que no la tocaba y a pesar de todo es mi madre, la amo tanto. No sabía, lo bien que se siente cuidarla y ansiar su cariño.

-¿Ya terminaste? Para ponerte de pie mami -ella asiente con la cabeza.

La sostengo por la cintura, ella se recuesta de mí, tiene que estar bien mal para que se deje ayudar. La ayudo para que se lave la cara y boca. Luego la llevo a su cuarto, la recuesto en la cama y su celular suena, se lo acerco.

-No puedo hoy, te aviso cuando este mejor -contesta sin fuerzas y cuelga.

-Te sientes fatal, no sales hoy es de preocuparse -me burlo y pongo la mano en su frente-. Por cierto tienes fiebre, estás caliente -la arropo con la sábana.

-¡Gracias, Kun! Por cierto no es resaca, parece que pesqué un resfriado -susurra y me obsequió una media sonrisa sincera.

Mi corazón se emociona, ¿desde cuándo mi madre me agradece algo? Ha llovido bastante. Además me sonríe, con su lunar en el lado izquierdo, cerca de la boca la hace ver tan sexy. De pronto mi celular me saca de babilonia, veo la pantalla es Ted.

-Dímelo, estoy en casa tuve un problema con mami. Salgo lo más rápido posible -observo a mami con sus ojos cerrados.

-Me comeré algo mientras llegas, nos vemos Serpiente.

-Ok -colgamos a la vez.

-Mami, te traeré unas pastillas para la fiebre y agua. ¿Necesitas algo más? -la observo tan frágil que no quiero dejarla así.

-No, con eso es suficiente, Kun. Ve y sal, no te limites por mí. Tú sabes bien, "hierva mala nunca muere".

Sé que no es la mejor madre, pero la amo. Aprieto fuerte mis puños, maldita vida, me tengo que ir y mi madre hirviendo en fiebre. Será que está delirando, porque está muy amable conmigo. Me voy hacia la cocina, busco las pastillas y el agua. De vuelta en el cuarto, está como mismo la deje, toco su pierna y abre sus ojos apagados hacia mí. Le tiendo las pastillas junto con el agua, espero que se la tome, le acomodo la almohada y me aseguro que este cómoda. Continuo con mis planes, me baño a las millas, me vestí con lo primero que veo. Mi atuendo típico, pantalón gastado, camisa con cuello en V y no podía faltar mi chaqueta negra en cuero. Le encargué a mi hermano que estuviera pendiente de mami y cualquier cosa grave me diera una llamada. Estoy en el estacionamiento de "Burger King", la noche está fría se ve mucho movimiento y la gente ajetreada en su mundo. Me quito el casco, camino hacía la entrada y sé que me estoy metiendo en un camino lleno de arenas movedizas. Veo a Ted en la mesa comiendo, está en la esquina del lado izquierdo. Él siempre está con su cara seria, sé que se va a molestar odia que se metan en su vida.

Tatuado En Mi AlmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora