Mi Extraña Reencarnación en un Mundo Extraño.

《Saishō no Hikari》

Abrí mis mis ojos creyendo haber recuperado la conciencia.

- Hmm?

Me encontraba en un gran campo, rodeado de flores que nunca había visto esparcidas por el lugar y una pequeña colina con un árbol común y corriente en el medio de todo.

Viendo esto solo pude pensar algo evidente.

Es un sueño.

No he podido tener un buen sueño desde que recuperé mis memorias.

Pese a que todo lucía bonito, sentía un calor infernal, o eso creo yo porque el sol no tenía una luz muy intensa, mi cuerpo se sentía muy caliente, era como estar esperando en la fila de un camión de helados durante el verano, siempre iba solo y compraba con el dinero que sobraba de algunos recados.

Comencé a dirigirme hacia el árbol para ocultarme bajo su sombra aunque siendo este un sueño dudo que algo vaya a cambiar.

Conforme me acercaba me percaté de otra presencia más, estaba un poco alejada y por mucho que lo intentara no podía reconocer que o quien era, aunque me sentía extrañamente conectado a lo que sea que fuera. Esta presencia hacía exactamente lo mismo que yo, se dirigía al mismo árbol mientras parecía soportar el calor.

Cuando me encontraba a unos cuantos metros del árbol y su sombra, todo el campo cambió a un espacio en blanco. La presencia seguía ahí mientras parecía tan confundida como lo hacía yo.

De repente, todo estaba en negro.

- Ah!

Me levanté repentinamente, me encontraba en la madriguera, estaba respirando pesadamente mientras todo mi cuerpo se sentía pesado y aún se sentía caliente.

Con un poco de dificultad giro mi cabeza para revisar mis alrededores. Miro a la izquierda no hay nada, simplemente la salida de la madriguera a la cual no recuerdo haber llegado. Cuando miró a mi derecha, me encuentro cara a cara con una chica. Orejas y cola similares a las de un zorro, cabello plateado que parecía brillar con la luz, este le llegaba hasta la mitad de la espalda y unos ojos bellos de color amatista con sus pupilas ligeramente rasgadas de forma vertical. Vestía unos harapos que apenas y se les puede considerar ropa. La piel que estaba expuesta tenía unos cuantos moretones y pequeños raspones además de unas hojas brillantes amarradas con dianas en sus antebrazos, muslos y pies que parecen hacer de vendas, parece un árbol de navidad.

Una auténtica belleza si me lo preguntas. El problema es...

- Q-q-quien e-eres?/ Q-q-quien e-eres? - Dijimos al unísono.

Parecía igual de confundida y nerviosa que yo.

Es la primera vez que tengo tan cerca la cara de otra persona así que mi reacción es razonable.

Me quedé callado para dejar que la chica frente a mi hablara.

- . . . /. . .

Cómo no decía una palabra, traté de hablar.

- Eeh.../Eeh...

Los esfuerzos para comunicarse eran simplemente inútiles así que solo sonreí para que no se hiciera muy incómodo.

Ella también hizo una sonrisa incómoda...

Estaba considerando la idea de salir corriendo aún con el estado en el que se encontraba mi cuerpo, cuando mi salvador apareció.

Sentí ligeros golpecitos a mi izquierda, cuando volteo a ver que es, me encuentro con el slime gris. Siendo capaz de relajarme debido a su presencia, volteó nuevamente hacia mi derecha sólo para encontrarme con una ligera nube de humo que se dispersa rápidamente en el aire sin dejar rastro alguno.