𝐒𝐈𝐍 𝐏𝐋𝐀𝐓𝐀 𝐍𝐎 𝐇𝐀𝐘 𝐏𝐀𝐑𝐀𝐈𝐒𝐎

𝐈𝐍𝐓𝐑𝐎𝐃𝐔𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍; 温迪

¨Ustedes los ricos piensan que con mover un dedo pueden tener a cualquier persona a sus pies, pero no, yo no me desnudaré por plata, porque tengo dignidad. Ya me quitaron a mi hermana, ahora quieren quitarme la virginidad y la dignidad como si eso fuera su decisión, ¡Antes un pepazo en la jeta antes de que toquen con uno de sus dedos manchados de la sangre de mi familia!¨

¿Cómo haces un funeral sin un cuerpo?

Tweek siempre se lo preguntó, cuando a sus tiernos seis años, vistió de negro por primera vez.

Presenciaba un ataúd vacío, que bajaba a un profundo hoyo, que luego fue rellenado por cemento, y tapado con tierra para disimular el pequeño cerramiento.

Suponía que ahí debía estar el cuerpo de su hermana, pero no había nada.

Se abrazaba a sus padres, sollozando por la perdida, pero, Tweek no entendía, no podía llorar si no veía a su hermana ahí, en esa caja, siendo encerrada para no salir nunca. Sus padres jamás le explicaron cómo era posible, solo decían, que enterraban su alma, pero tampoco tenía sentido, sabía que nunca más iba a ver a Wendy, pero, ¿Dónde estaba?

Pasaron los años, Tweek recién había cumplido los quince, sus padres le organizaron una pequeña fiesta, pero nada que pudiera salir de su presupuesto, después de todo, su madre era costurera, y su papá era dueño de una pequeña cafetería, aunque sonara como algo que dejara buenas ganancias, apenas entre ambos lograban sacar para pagar la colegiatura de su único hijo, y por lo cual Tweek no podría estar más agradecido, pero, pidió un solo regalo, y le fue negado; Salir a la calle

El accidente de Wendy, le costó su libertad, y sobre todo el poder decidir por su vida. Sus padres no se arriesgarían a perder otro hijo.
Desde la ventana de su habitación le tocaba presenciar como todos los niños jugaban fuera, nunca conoció el peligro del que tanto era advertido, ¿Qué cosa inexistente podría hacerle tanto daño como para que los portones de su casa estuvieran con un gigante candado toda su vida?

Estaba harto, quería divertirse, se sentía como si fuera un criminal, encerrado en su propia casa como si fuera una cárcel.

Y por si fuera poco, jamás tuvo agallas para escaparse. No tenía ese sentido de aventura para abrir una ventana y escaparse a la calle, porque contaba con que sus padres entraban cada hora para revisar que estuviese en su cama abrigado y atrapado entre las cobijas.

¿Fuera de eso? La libertad fue una necesidad, pero el lo veía como un capricho.

Creció como un niño risueño y amoroso, siempre pidiendo a sus padres por un abrazo, eran una familia muy unida, y aunque, a veces el dinero apenas alcanzara para comer, Tweek era feliz.

Pero, aunque seis años pasaran volando, la verdad la intriga de Tweek jamás dormía.

Siempre preguntaba por Wendy, ella era más grande que el cuándo ¨murió¨ tenía diecinueve, y le faltaban pocos días para llegar a los veinte según su madre. Tiene recuerdos muy vagos; un cabello negro largo y brillante, unos ojos de color miel, y la piel como de porcelana, blanca y suave. Por las fotos, recuerda su belleza, y por unas cuantas cintas de video, se acuerda de su voz.

Y aunque no fuera una santa, la extrañaba. Todos se la pasan recordándole que fue un prepago, una mujer de la mala vida, que fue desagradecida con los señores Tweak, quienes la adoptaron cuando sus padres murieron en una balacera, que junto con unas amigas desgraciadas le hicieron la vida de cuadritos a una niña del barrio, y que, gracias al ejemplo de Wendy, todas sus ellas se volvieron prostitutas o amantes de algún narco, y que por eso se murió, alguno de los narcos la tomo contra ella y decidió acabar con ella a punta de balazos.

Tweek tenía un corazón delicado, le era imposible no llorar cuando denigraban a su hermana frente a su cara, como si planearan ponerlo en contra de ella, estaba seguro que antes de morir, se arrepintió de todo, y le pidió perdón a Dios para que pudiera entrar al paraíso, pero, cuando llegó a los quince, esa devoción terminó por perderse, quizá todo lo que hizo tenía una razón de ser, quizá necesitaba más dinero, y al no poder encontrar un trabajo, le toco irse por la mala vida. Imaginaba maravillas de su hermana, pero jamás, podría pensar mal de ella.

Wendy tiene que estar viva, tiene que estar por algún lado, su tumba vacía le da esperanzas, y va a buscarla, aunque termine por costarle la vida, pero no se permitirá morir con la duda de que le hicieron.

(+)
Holaa, borrón y cuenta nueva alajaojdlsdj. 🤑
Para empezar, es obvio, que este fic me lo imagine mientras miraba la saga de sin senos no hay paraíso, volví a ver la segunda parte porque es la que más me gusta, no sé. Así que va a estar muy parecido, pero cambie muchas cosas.

Planeo meter a muchos más personajes, y la neta si va a parecer que hice esta historia mientras me daba unos toques, pero tratare de llevarlo todo bn.
Comenzando de que esto se desarrolla en Colombia, Bogotá y Pereira, si como la novela.

Sigo tratando de escribir mejor, pero aún no me sale, así que esta es la mejor práctica. ☺️

Bueno, y por último, los capítulos van a ser un poquito corticos pero supongo que me va a tocar hacer muchísimos, so, aquí andamos pa lo que sea.

Gracias, quien sea que este leyendo esto, te amo[?