Negocio ~ Ecko ~

Capitulo 72

NARRA ISABELLA

Ignacio se fue a las carreras, no me gusta que valla por más que diga que no corre, lo conozco como la palma de mi mano y se que no se resiste a eso, y menos hoy que estuvo todo el día de mal humor, las motos y el micrófono son su desconexión de este mundo.

- te dijeron el sexo del bebé - hablo Pauli sacándome de mis pensamientos -

- No, aún no se deja ver ya tengo 4 meses y nada - hablé negándoles la verdad -

- sería muy lindo que tuvieras una nena, la pibita más cheta del grupo - hablo Juli y yo reí -

- Ojala así sea Ju - respondí -

Fuimos en el auto de Nacho hasta la panadería y compramos para merendar, mates no tomaba seguido ya que me agarraba acidez, tomaba bebidas frías.
Iba llegando a casa y unos amigos de Ignacio estaban fuera de casa con la moto de el.

- Ignacio dónde está? Porque traen ustedes su moto? - pregunté desesperada -

- ehh.. Nacho se cayó de la moto, los chicos lo llevaron al hospital - respondió uno un poco nervioso -

- Como se cayó? No entiendo, mira cómo está la moto, respóndeme - hablé molesta, la moto no tenía golpes de una simple caída -

- Estaba jugando una carrera, al ganarla obviamente se pasó de la línea de meta, cuando quiso dar la vuelta para donde estábamos nosotros perdió el control y como iba rápido el golpe fue bastante duro - hablo y las ganas de cagarlos a trompadas a los 3 pelotudos de amigos que tenemos no me faltaban -

Subí al auto nuevamente, Pauli me acompañaba y Juli iba en su auto, hice que Paula llamara a mi mamá para decirle que se quede con Lukas hasta que yo le avisé.
Pise el acelerador y Pauli me miraba con preocupación

- Isa vamos muy rápido, baja un cambio - hablo sería -

No le hice caso, casi chocamos pero aún así quería verlo, saber cómo está, abrazarlo y a la vez pegarle por ser tan boludo.
Llegamos al hospital, bajamos del auto y entre a urgencias como una loca mirando para todos lados, vi a Berna sentado con su teléfono en mano, anteriormente me cansé de llamarlo y mandarle mensaje y no respondió uno.

- se pensaron que no me iba a enterar, como está - hablé molesta -

- Isa, que hacen acá - hablo mirándonos a las 3 -

- Como está Ignacio - volví a preguntar -

- Bien, Braian entró para ayudarlo a salir, está muy lastimado - hablo apenado -

Cuando estaba por hablar escuché el nombre Ignacio, era la voz de una mujer, gire para ver y ahí estaba, El y su encanto, el cual ninguna puede resistir... Notaba en la forma que la doctora lo miraba, era joven, bonita y la verdad que quien se resistiria a Ignacio? Nadie
Que le podía dar yo en mi estado, estando embarazada, va a buscar en otro lado lo que en casa no le dan, y la verdad que en su pasado lo hizo varias veces.
Hizo contacto con mi mirada, lo miraba molesta y estaba de brazos cruzados, gire sobre mis talones y salí del hospital.

- para isa donde vas - pregunto Berna -

- a casa, a ver a mi hijo, no sé dónde voy pero no me quiero quedar acá, no viste como lo miraba la doctora - hablé celosa y el reía -

- como lo va a mirar isa, lo ve como paciente y profesional - hablo y yo reí -

- No seas pelotudo, nosotras sabemos de ese tipo de miradas, ya sean de ellas hacia ustedes, o de ustedes hacías ellas, no me jodas me quiero ir - hablé tratando de subir al auto -

- Isabella - la voz de Ignacio a mis espaldas hizo que me detenga, gire para verlo y no pude evitar que una lágrima se me derrame - calmate, vamos a hablar

- quiero ir a casa, te vas conmigo o no - respondí -

- vamos - dijo y Braian lo ayudo a subirse al auto -

- Gracias por cuidarlo - dije antes de subirme, ellos sonrieron y yo subí para luego salir del estacionamiento -

El camino a casa fue silencioso, veía de reojo sus heridas y me daban muchas ganas de llorar, pero el orgullo era más grande en ese momento

- Lukas sigue con tu mamá - pregunto rompiendo el silencio -

- Si, le voy a preguntar si se puede quedar con ella está noche - respondí y el asintió -

Llegamos a casa y lo ayude a bajar del auto, al principio no quiso, pero no lo podía hacer solo

- Dale Nacho apóyate en mi, no me vas a lastimar, no ves que no podés caminar - hablé un poco molesta por su actitud -

Llegamos al sillón e hice que se siente en el, mire su mano y no tenía el anillo de casamiento, mis ojos se pusieron llorosos y fui a la cocina, lloraba, no paraba de llorar, porque se lo saco? Eso me traía recuerdos de la vez que nos casamos por un negocio, siempre se lo sacaba para irse a ver con Micaela o con cualquiera.

Volví al living, tome la receta y salí a la farmacia sin decir una sola palabra, a los 20 minutos ya estaba de nuevo.

- no es lo que pensás - hablo mirándome - me lo saqué porque necesitaban desinfectar la mano y porque me hicieron placas para descartar algún hueso roto - hablo y yo no lo miraba -

Me arrodille e hice que el ponga sus pies en la mesa ratonera del living para así poder limpiarle nuevamente y colocarle la crema que le recetaron.
Cada vez que limpiaba el se quejaba, alguna veces trataba de no hacerlo pero era imposible, esto se veía mal, mis lagrimas comenzaron a salir al ver esto y por mi cabeza pasaban muchas cosas.

- ey porque lloras - pregunto cuando se dio cuenta -

- Nacho que hubiera pasado si esto era más grave, si te pasaba algo peor, que íbamos a hacer Lukas, el bebé que aún no nace, yo y todas las personas que te quieren, decime qué hubiéramos hecho - hablé llorando -

- perdón, pero fueron solo raspones - hablo sin importancia -

- Solo raspones - hablé golpeando su pecho y lo hice quejarse de dolor y me miro molesto - estoy embarazada pedazo de pelotudo, tenemos otro hijo, me vienen a decir que te caíste de la moto, la porquería esa estaba rota, demasiado rota, por mi cabeza pasaron muchas cosas, 2 veces casi choco camino al hospital, pase nervios y angustia en todo el camino y vos me venís a decir que son solo raspones, sos un boludo, valora esto, valora a tu familia - no paraba de llorar -

- Tenés razón, perdón - dijo y me abrazó, lo abrace fuerte e hice que se vuelva a quejar - ustedes lo son todo, nunca los voy a abandonar - hablo mirándome directo a los ojos - esa princesa va a tener todo el amor del mundo, ella y Lukas van a tener el mundo a sus pies si quieren, yo les voy a dar todo a ustedes, nada les va a faltar - hablo serio -

- Lo que más nos importa es que no nos faltes vos, eso es suficiente para nosotros - hablé triste -

- siempre me van a tener, los amo - dijo para luego besarme -

Me levanté a cocinar algo liviano, Lukas se quedaba con mi mamá y creo que era lo mejor, se me iba a complicar cuidar a Ignacio, Lukas, la casa y todo lo demás.

Cenamos y con mucha dificultad ayude a Ignacio a subir a la habitación, le dije que sería mejor que duerma solo, por las dudas si le llegó a tocar sin querer las heridas, yo iba a dormir en la cama de Lukas. Puse la alarma para que me recuerde el horario en el que le tocaba las pastillas, me acosté y quedé rendida..