×2×

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Advertencia: Capítulo con relaciones sexuales no consensuales explícitas.

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Jungkook no pudo pensar ni decir nada. No entendía qué le estaba pasando, mucho menos el porqué. Se sentía demasiado vulnerable, sus lágrimas comenzaron a amontonarse en sus ojos y su labio inferior comenzó a temblar.

Taehyung sonrió de lado, le dió un par de palmadas suaves en el rostro y se incorporó para abrir con una llave la cajonera, de la que sacó unos guantes de látex y un gran frasco que contenía un líquido transparente.

Jungkook observó quieto como su secuestrador se ponía los guantes. No fue hasta que el elástico sonó al ser colocado que se espabiló.

—¡e-espera! sea lo que sea que estés pensando hacer, por favor detente...

—No me detendré.

Taehyung hizo caso omiso de las palabras nerviosas del chico y abrió la botella, comenzando a vaciar parte de su contenido sobre el vientre de Jungkook. Quien se retorció y soltó un jadeo por la sensación fría y viscosa resbalándose en su piel.

—Este lubricante es especial. En un momento comenzarás a sentir su calor y cualquier zona erógena que embarre con esto será más sensible. Disfrútalo.

Taehyung comenzó a pasear sus manos por todo el vientre y pecho del chico que se retorcía y temblaba bajo sus caricias.

—¡No! por favor ¡Basta! ¡No me toques!

El calor lo inundaba y su piel comenzaba a cosquillear. Cuando Taehyung comenzó a masturbarlo con una mano, embarrando todo su falo de la sustancia Jungkook solo quería escapar. No quería pasar por eso ¡Tenía que pensar algo rápido para detenerlo! Lo que sea. Mientras pueda desatarse.

—ba..ño...—alcanzó a susurrar a duras penas— al menos déjame ir antes ¡necesito ir al baño! Por favor..¡déjame ir! ¡¡¡Quiero ir!!!

—No tengo intenciones de dejarte ir a ningún lado.

Taehyung apoyó una rodilla sobre la cama para acercar sus rostros. Le dedicó una mirada seria al tembloroso chico que se sentía derrotado por su inútil intento.

—Además no me gusta que mientas. —colocó una mano sobre el vientre y masajeó en círculos, presionando con fuerza y sin dejar desatendido su miembro— Cuando estabas inconsciente te llevé a la tina para lavarte a fondo y aproveché para vaciar todo de ti con un enema**— se posicionó en medio de las piernas y dirigió su otra mano llena de lubricante al orificio del chico acariciando superficialmente.
—Así que no te preocupes, estás completamente vacío y limpio por delante y por ¡atrás!

Jungkook quedó estupefacto. Pero no tuvo tiempo de reaccionar pues de inmediato sintió su interior ser invadido profundamente por un dedo. Su secuestrador ni siquiera había terminado de hablar cuando sintió el énfasis de la última palabra en su cuerpo.

—ahng ¡No! duele, due..le— luchó lo más que pudo pero no podía apartarse ni un centímetro. El calor del lubricante nublaba su juicio y las sensaciones lo hacían babear y jadear por el incómodo dolor.

Después de unos minutos el cuerpo del chico fue penetrado por un segundo dedo y Taehyung marcaba el ritmo en su interior,  haciendo que todo su cuerpo se moviera con cada embestida simulada. Mientras se inclinó hacia su pecho y comenzó a lamer y morder los sensibles pezones que se erguían poco a poco.
Jungkook cayó en la resignación, era obvio que no iba a detenerse porque se lo pidiera. Así que solo apretó los dientes esperando que todo terminara pronto. Soltando maldiciones y jadeos por lo bajo, pero dejó de forcejear. 

Dame tu vida [ TaeKook ] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora