Rupert entró a la casa de Tom sin tocar. Mientras silbaba una canción, Rupert entró a la cocina y sus silbidos se apagaron cuando vio a _____ bailar. Se quedó boquiabierto mientras miraba el seductor movimiento que asían sus caderas al moverse y al parecer, _____ no había notado su presencia porque seguía bailando al ritmo de la música que provenía de la radio al mismo tiempo que cocinaba.
Rupert se aclaró la garganta para llamar su atención. _____ al fin paró de bailar y se volteó.
- Oh, hola....- tratando de recordar su nombre, _____ frunció el ceño.- ¿Rupert?
Él sonrió.
- Hola, nena. ¿Bailas para mí?
_____ se sonrojó, pero aun así ignoró su comentario y siguió cocinando como si nada.
- ¿Cómo entraste a la casa? Tom siempre le coloca seguro a la puerta y no te oí entrar.
- Tengo una copia de las llaves de la casa.- Rupert se apoyó en el marco de la puerta y la observó. No pudo evitar fijarse en el atractivo culo, y en lo estupendo que sería poder tocarlo. Si tan solo no fuera el mejor amigo de Tom....- hablando de Tom, ¿Sabes donde está?
- Salió hace un rato, dijo que volvería mas tarde.
- ¿Qué estas cocinando?
- Un pastel para Tom.- sonrió sin dejar de revolver la cuchara de palo en el recipiente.- ¿Quieres probar un poco?
- Claro que si.
- Acércate.
Rupert caminó hacia ella. _____ cogió un poco de la masa con la cuchara para voltearse y llevarla directo a su boca. Como un niño obediente, Rupert entreabrió los labios y saboreó hasta el último rastro de la masa.
- Mmh... chocolate.- dijo él, mientras se relamía los labios.- está exquisito, _____.
- Gracias, espero que a Tom le guste también.
Rupert la miró y fue ahí cuando tomó conciencia de lo cerca que estaban. Fácilmente podría inclinarse y besarla. Un pequeño rastro de chocolate posaba en la comisura de los labios de _____, y la idea de quitárselo con los suyos era tentadora. Mientras la observaba, Rupert notó que sus ojos tomaron un brillo especial y por un momento creyó que era por él, pero luego llego a la razón de todo esto: Tom. _____ estaba enamorada de él. Sólo había que oírla hablar de Tom y notar el brillo en sus ojos. Una ligera oleada de celos invadió a Rupert. Tom si que era un tío con suerte.
- ¿Interrumpo algo?
La voz de Tom lo sobresaltó. Girándose, encontró a Tom en la puerta con los brazos cruzados sobre su pecho mientras los miraba detenidamente. Los ojos de _____ iluminaron al instante de verlo.
- ¡Tom!- exclamó ella, sonriente y sin dudarlo se lanzó a sus brazos.
Pero _____ se alejó de él al sentir que no le correspondía el abrazo. La cara de Tom se mantenía inexpresiva mientras la apartaba de él, rechazándola. La sonrisa en la cara de _____ se borró, y el brillo en sus ojos desapareció.
- ¿Pasa algo?- preguntó ella.
Tlm la ignoró. En vez de responderle, se dirigió hacia Rupert.
- Rupert, sígueme. Necesito hablar contigo.
Rupert miró por última vez a _____ y encogiéndose de hombros, siguió a Tom por las escaleras.
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Acosada (Tom felton y tu)
Novela Juvenil«Te estaré vigilando...» _____ Pearce no puede olvidar las últimas palabras de Tom Felton, el hombre al que una vez consideró tímido y conservador, y ahora lo describe como impulsivo y agresivo. Hacia meses que recibe cartas y llamadas anónimas de a...