Fall asleep (fall for you) | KookV

Capítulo 16

Jimin recuerda claramente el día en que conoció a Min Yoongi. Hoy, mañana o dentro de unos años, si alguien le pidiera que recitara el suceso, sería capaz de hacerlo con todo lujo de detalles. No solo porque fue el día en que conoció al 'amor de su vida', como podría llamarse, sino porque fue el día en que comenzó su nueva travesía y lo marcó para el resto de su vida.

Fue su primer día de universidad.

El cambio de su unida comunidad de Busan a las bulliciosas calles de Seúl fue duro, y Jimin podía recordar cómo sus nervios chispeaban de miedo y a la vez de emoción cuando estaba en medio de la multitud, sintiéndose insignificante y poco preparado en comparación con los otros estudiantes que parecían hechos para lugares como ese.

Había una orientación, y era una oportunidad para recorrer el campus y conocer nuevos amigos. Jimin recordaba lo conflictuado que estaba sobre si debía ir o no.

A menudo, se preguntaba cómo de diferente sería su vida universitaria si hubiera cedido a la tentación de quedarse en casa y jugar a los videojuegos hasta que saliera el sol en lugar de ir a la orientación como hizo. Por un lado, podría no haber conocido a Jeon Jungkook.

Hace mucho tiempo, cuando Jimin estaba empezando a dar ese atrevido paso de la danza como hobby a una profesión de ensueño, mientras hacía malabares con la lucha por equilibrarla con la escuela secundaria, Jungkook había sido una pequeña parte de esa imagen. No grande, pero lo suficiente como para que Jimin no pudiera olvidarlo si lo intentara.

Fueron compañeros de escuela una vez en Busan. En la escuela, nunca hablaron o se juntaron ya que Jimin estaba un año por encima de Jungkook y las interacciones que tenían eran a lo sumo encontrarse con la mirada del otro mientras pasaban por los pasillos. Sin embargo, Jimin aún se acordaba de él.

Jungkook estaba en su clase de baile. Era joven y enérgico, aunque un poco antisocial y su pasión era abrumadora.

A pesar de ser callado y tímido, brillaba en la pista de baile y provocaba la envidia de los demás. Jimin siempre lo había admirado a él y su dedicación en secreto, y lo usaba como estímulo para trabajar más duro.

Y entonces un día simplemente desapareció.

Jimin no lo vio en los pasillos ni en los entrenamientos. No pensó mucho en ello al principio, ya que no tenían una relación lo suficientemente cercana como para preocuparse, pero de vez en cuando, en el fondo de su mente, se preguntaba qué le había pasado a Jungkook.

Por eso se puso totalmente extasiado cuando vio a Jungkook entre la multitud, pelinegro y alto con la misma cara familiar, pero más maduro y extrañamente más cansado, sus ojos notablemente oscuros pero grandes con bolsas debajo de ellos y había perdido sus mejillas regordetas, siendo reemplazadas por rasgos afilados.

Cuando Jimin se abalanzó sobre él y empezó a hablarle como si siempre hubieran sido los mejores amigos, preguntándole a dónde iba y exclamando lo pequeño que era el mundo, Jungkook no tardó en cerrarle la boca, alegando que no sabía quién era.

Fue entonces cuando Min Yoongi entró en escena.

"No le hagas caso. Es un maldito dolor de culo, pero ya sabes lo que dicen: eres lo que comes"

Esas fueron las primeras palabras que Jimin recibió de Yoongi. Y seguro que dejó una primera impresión muy fuerte. Jimin recordaba estar completamente aturdido y asombrado, no solo por el inusual inicio de la conversación, sino también porque Jimin nunca había visto a un chico como Min Yoongi.

Tenía el cabello azul que brillaba con la luz y contrastaba con su piel pálida. Sus ojos eran afilados, y Jimin sintió escalofríos con solo mirarlos. Tenía labios en forma de corazón que solo se separaban ligeramente cuando hablaba, y sus palabras eran lentas y arrastradas, su voz era profunda. Y parecía saber de Jungkook mucho más que Jimin.