SIEMPRE ESTARÉ CONTIGO

CAPÍTULO 30

- ¿Declan?.... ¿Hope?.

Aquello fué un pequeño murmullo que salió de boca de Octavia pero todos escucharon claramente, en especial Hope que no dudó y salió corriendo hasta estrellar su cuerpo con el de Octavia mientras la abrazaba fuertemente y comenzaba a llorar en su cuello.

Declan las vió de lejos y una sonrisa enorme se pintó en su rostro mientras unas cuantas lágrimas bajaban de sus ojos, se fué acercando poco a poco, no tenía prisas, ver a dos de las tres mujeres que más amaba en el mundo abrazadas de aquella manera lo llenaba de paz.

- Hola mamá - Fueron las palabras que encogieron y llenaron al mismo tiempo el corazón de Octavia, Declan la abrazó también haciendo un sandwich dejando a Hope en medio.

Octavia en lo más profundo de su corazón lo sabía, sentía una atracción muy fuerte hacía Declan cada vez que sus ojos se cruzaban, una atracción que nada tenía que ver con algo físico sino más bien era como un instinto de protección, al igual que con Hope y con la chica supo que era así cuando vió a Clarke tomándola de aquella manera del brazo, no lo pensó, actuó por instinto para protegerla y ahora entendía el porqué, aquellos dos chicos eran sus hijos, lo serían.

- No puedo creer que... - Octavia no pudo terminar lo dicho, separó a ambos chicos de ella de manera gentil y puso una mano en la mejilla de Hope y la otra en la mejilla de Declan mientras una sonrisa se pintaba en el rostro de los tres.

- Si ellos están aquí, eso quiere decir que.... - Clarke ni siquiera terminó de realizar la pregunta, puso una de sus manos en su vientre y levantó la mirada para pasearla por los chicos junto a Alex - ¿Está aquí no es así?.

Todos dentro de aquel laboratorio voltearon su mirada a los chicos esperando una respuesta, la más ansiosa por supuesto era Clarke, que no apartaba sus ojos de los de Alex y al notar el nerviosismo en ella que normalmente era una roca y nada demostraba, algo en ella se activó, lo supo, de inmediato lo supo.

Clarke se bajó de la camilla, quitando amablemente a su madre de su camino ya que Abby no quería que se levantara pero lo hizo, dirigió sus pasos a donde se encontraban Alex y Madi paradas, si sus sospechas eran ciertas y ese bebé en su vientre era Alexa, eso quería decir que Madi también era su hija ya que ayer había descubierto que eran hermanas.

Todos los chicos estaban pendientes de lo que pasaba, Octavia mantenía a Declan y Hope agarrados de la mano como si de niños pequeños se trataran, River se movió nuevamente hasta donde estaba Raven, Luna al verlo caminó hasta ellos también, Abby estaba junto a la camilla, con la mano en su boca tratando de calmar la emoción que sentía en ese momento mientras nuevas lágrimas bajaban por su rostro.

Madi corrió a los brazos de Clarke cuando ésta estaba a mitad de camino, no se pudo aguantar más, lo estaba haciendo desde que habían llegado al igual que Declan, River y Hope, la última vez que había visto a su madre estaba muerta, convertida en una de esas horribles estatuas de cristal.

- ¡Oohh Dios!... - Las lágrimas rodaron por el rostro de Clarke cuando sintió a Madi abrazada a ella, lloraba como una niña y realmente lo era, tenía 15 años aún.

Clarke la abrazó fuertemente, tenía una mano en su espalda y la otra en la parte posterior de su cabeza, enterró su rostro en el cabello de Madi sintiendo su olor y luego levantó la mirada hacía Alex que seguí estoica sin moverse de donde estaba pero con una sonrisa sincera en el rostro al verlas abrazadas.

- Te he echado mucho de menos - Fué lo único que pudo decir Madi aún sin soltarla, Clarke dejó un nuevo beso en la parte superior de su cabeza antes de mirar nuevamente al frente.

- ¿Alexa?.

Clarke la llamó y sus ojos conectaron nuevamente, Alex le regaló una sonrisa y cuando por fin estaba decidida a moverse y acercarse una sirena se comenzó a escuchar por todo el laboratorio alertando a todos los chicos que rápidamente borraron las sonrisas de sus rostros.