~•Capítulo IX: ¡¡A POR LA BESTIA!! •~

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Taishiro Toyomitsu, había sido tratado de ser llevado a la fuerza al carrito con única parada al manicomio; podía más que los encargados de arrastrarlo adentro del carro

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Taishiro Toyomitsu, había sido tratado de ser llevado a la fuerza al carrito con única parada al manicomio; podía más que los encargados de arrastrarlo adentro del carro.

– ¡sir necesita un hospital, no un manicomio! – reclamo molesto Mirio saliendo de la casa tratando de detenerlos en compañía de Tokoyami

– ¡Se que la mayoría no agrada por el simple hecho de que los hijos donceles sean educados; pero es ni tienes ni un solo justificante para encerrarlo en ese funesto lugar! – decía Tokoyami para antes de ser empujado por los guardias

– Ahh si, ¿y qué me dices del rumor de que una bestia capturo a Eijirou en un castillo encantado? – interrumpió Seiji como remate a la mala situación – además de que también educo sin motivo alguno a los niños Shimano haciéndolos unos niños inapropiados y ya no casaderos como sus a propios hijos – decía apuntando a los dos menores que tenían un fuerte golpe en la mejilla cada uno mirando entristecidos la situación – solo le hice un favor llamándolo a alguien que lo tendrá en buenas manos...

– no es justo que el papá de pelirrojo se lo lleven... *sniff* quería que me enseñara a leer un poco más... – lloriqueo Katsuma aferrándose al brazo de su hermana

*sniff* no seas tonto Katsuma, esto nos metió en problemas... – decía Mahoro tratando de mantenerse fuerte – pero, también quisiera que me enseñara un poco más...

– ¡¡no me arrepiento de nada y lo de la bestia es verdad!! – decía Toyomitsu para ser empujado al carro y esté cerrado

– ¡mi padre no está loco! – se puso enfrente de Seiji – ¡déjalo ir, ahora!

– excuse mua Ei, pero no puedo hacer nada al respecto; a menos que... accedas a ser mi esposo~ – le susurro esto último para intentar tomar su rostro, pero el pelirrojo alejo de un golpe su mano

– primero muerto a hacerlo; pero puedo probar que existe – entro un momento y de la bolsa en donde estaba escondida Eri, estaba el espejo que le había entregado a Bakugou, y volvió a salir colocando el espejo en las narices del peli morado – ¡muéstrame a Bakugou! – la imagen de la bestia se puso en el reflejo en donde estaba Seiji hace un momento; y todos los cercanos a Seiji vieron la imagen que daba el espejo, muy en pánico al verlo tsmbien.

Los pequeños Shimano se acercaron a el – ¿la bestia es mala? – pregunto Katsuma algo asustado por la imagen en el espejo

– non non, solo tiene un pésimo carácter; incluso... puede ser amable y tierno, a su manera... "Dieu, está triste..." – dijo eso ultimo de manera soñadora sin darse cuenta y preocupado por dentro al ver el reflejo, algo que claramente notó y molestó a Seiji

– ¡¿Es que no le has visto?!¡¿Crees que un ser tan grotesco tenga un ápice de amabilidad?! – interrumpió con el fin de alterar a todos Seiji arrebatándole el espejo al Pelirrojo – ¡Si sabe de la existencia de este lugar; ¡nos atacará y devorará, y no vamos a estar a salvo hasta que la maldita cabeza de ese monstruo este como trofeo en mi cabaña!

The dreamer and the beast { a BNHA fairy tale #1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora