SakuAtsu Fluff Week 2021

• Día 5 •

Tier 1: Confessions

Tier 2: Band AU

Tier 3: "Can you sing to me?"

·•·•·•·•·

—Anda, Omi. ¿Cantarías para mí?—

—No.—

"Es preferible no arriesgar..."

Era la quinta vez en el día que se lo preguntaba y la respuesta era la misma. Desde que Atsumu se enteró que estaba en una banda, se había puesto como fanático adolescente; le insistía durante las prácticas para escucharlo cantar, para ir a verlo en sus ensayos o cuando tocaran.

"... porque tú eres mi gran anhelo..."

Kiyoomi se había unido a la banda de Semi Eita por casualidad pero tuvo tanta afinidad con ellos que lo aceptaron de inmediato e, incluso, lo dejaban escribir las canciones. Era justamente por eso que Atsumu no debía, bajo ninguna circunstancia, pisar el mismo cuadrado de paredes que ellos; podía llegar a morir si se enteraba que sus letras estaban dedicadas a él. Venía sosteniendo su enamoramiento en secreto como un campeón, no podía estropear la amistad ahora.

"... y si te pierdo, estaré acabado."

Su voz grave y afinada retumbaba en conjunto con el resto de los instrumentos, dentro de la sala insonorizada. Estar en la banda le ayudaba a sacar todo eso que no podía decir con palabras, de adentro suyo.

—¡Wow, Sakusa-san! ¡Te luciste! ¿Cómo haces para escribir esas letras?—

Kiyoomi se encogió de hombros, jamás lo admitiría pero su fuente de inspiración era el colocador de su equipo de voley y mejor amigo, quien podía arrancarle suspiros y, a su vez, sacarlo de quicio.

"Si sonríes, soy feliz..."

Atsumu, por su parte, había comenzado su trabajo de campo. La curiosidad lo estaba matando. ¿Por qué Omi no dejaría que él vea sus ensayos? ¿Tan mal músico era? No, no cabía esa posibilidad. Él era bueno y dedicado en todo lo que hacía, era así que lo hizo dejar de admirarse tanto a sí mismo para admirarlo a él.

"... aunque estés con alguien más..."

El primer concierto estaba a horas de comenzar. Habían encontrado un lugar con buena ventilación a pedido de Kiyoomi, pues si bien su fobia había pasado a segundo plano, no quería estar en un lugar lleno de transpiración humana, humo de cigarro y quién sabe qué más. No invitó a sus compañeros de equipo a pesar de que podía regalarles entradas pero, así y todo, Atsumu se las ingenió para hablar con Semi, pedirle entradas y finalmente ir a verlos. Pensó en llevar a Bokuto y Hinata, pero prefirió ir de incógnito. Después de todo, esos dos no sabían estar con la boca cerrada y, si algo salía mal, Omi no soportaría el fracaso público frente a sus amigos.

"... yo estaré a tu lado sin importar qué."

Su corazón latía muy deprisa, temía equivocarse en las notas pero su guitarra estaba afinada y le había hecho un cambio de cuerdas tres días antes, para darles uso y evitar que alguna se corte durante el show. Las luces se apagaron y se encendieron los reflectores, dejando toda la banda a la vista. Kiyoomi había pedido no ser el centro de atención, por lo que lo habían posicionado detrás de Semi y a la derecha de la batería.

La banda comenzó a tocar y, en cuanto Atsumu escuchó la voz grave y melodiosa, se le encogió el estómago. No podía ser posible que cantara de esa forma; los altibajos, la coordinación de sus dedos, todo era sublime.

"Porque cuando amas tanto, se te desgarra el corazón.
Porque cada parte de ti es perfecta.
Entonces no te atrevas a hacerme a un lado
Porque si te pierdo...
Si te pierdo, entonces estaré acabado."

La canción terminó y los gritos y aplausos inundaron el lugar. La adrenalina corría por las venas de Kiyoomi y hasta se le escapó una sonrisa que se desvaneció en cuanto su mirada se cruzó los ojos color miel que reconocía a millones de kilómetros de distancia. Atsumu era hombre muerto, lo sabía con certeza.

Salió prácticamente corriendo del escenario con el corazón a mil por hora, no podía ser posible que hubiera escuchado todo ¿O si?

—¡Omi, espera!—

—¿Qué mierda haces aquí, Miya? ¡Te lo advertí, te dije que no vengas!—

—¿Por qué? ¡Eso estuvo asombroso! ¿Quién escribió esa letra? Me puso la piel de gallina.—

—Nadie, ahora vete.—

—¿Fuiste tú, Omi?—

—¡No!—

—¿De verdad escribiste eso?—

Realmente estaba colmando su paciencia a pesar de que no se estaba burlando. Atsumu se veía como un niño emocionado y el corazón de Kiyoomi latía cada vez más deprisa. ¿De verdad le iba a confesar sus sentimientos justo ahora?

—Omi...—

—Las escribí para tí, Atsumu.— Dijo de repente. —Tengo que volver, lo siento.—

¿Se le estaba declarando? ¿Así nada más?

Kiyoomi volvió con sus compañeros de banda dejando la cabeza de Atsumu hecha un lío, pero hay algo que tenía bien en claro y eran sus sentimientos...

En sincronía con los de Omi, como las cuerdas de una guitarra perfectamente afinada, listas para formar los acordes de su primer melodía juntos.

·•·•·•·•·

Uff, hasta que aparezco. Terminé de escribir esto en el viaje hacia el trabajo así que no se qué tan bien quedó pero en fin. Día 5 terminado y arranco TARDE COMO SIEMPRE a escribir el día 6 uwu

Espero les guste, lxs amo❤️