Renjun miró a Jaemin como si tuviera monos en la cara y habló.
-Como si esto fuera una jodida comedia romántica, Na Jaemin.
-Bueno, técnicamente lo es.
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Donde Huang Renjun y Na Jaemin, quienes luchan por ser el mejor promedio de su...
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Jaemin siempre vivió entre lujos y consentimientos por parte de todos. Nunca le faltó nada y estaba muy feliz de aquello.
Su vida parecía perfecta, una buena familia con una excelente posición social, asistía a una buena universidad y seguía la carrera que quería, además de ser un muy buen alumno, tiene dos amigos fantásticos y una larga fila de chicas que esperaban a que se les diera una oportunidad de salir con él.
Pero aún así sentía que faltaba algo.
No sabía qué era, simplemente sentía que todo era demasiado aburrido, seguir la misma rutina día tras día, hacer más de lo mismo siempre, lo hacía sentirse vacío.
Ese era el sentimiento, vacío.
Cree que por eso se encontraba en medio de su sala rodeado de gente mientras bailaba con una chica rubia que le venía sonriendo desde hacía un buen rato.
Lo admitía, no le iban mucho las fiestas, era más de quedarse en casa tranquilo o hacer una pequeña reunión con sus amigos, pero Mark y Jeno le habían insistido en hacer esta fiesta para celebrar sus veinte años.
No sabe por qué cedió ante los pedidos de ambos, en ese momento Mark estaba hablando con una chica castaña al otro lado del salón y hacía una hora había perdido a Jeno de vista, así que si no quería aburrirse tenía que hacer algo.
Bailó un rato más hasta que le dijo a la chica que iba a buscar algo de beber, ya estaba comenzando a asfixiarse dentro del tumulto de gente.
Se acercó a una de las mesas donde había bebidas y comenzó a servir lentamente.
Pudo divisar cerca de allí a aquellos dos amigos de Huang Renjun, lo que significaba que el chico probablemente esté por ahí.
Soltó un bufido de tan solo pensarlo. En serio que no le agradaba Huang.
Seguro, al principio no le dio importancia al chico, no se conocían y no podía tener una opinión acerca de él, pero cuando dieron las notas de su primer proyecto y vio que no había quedado primero incluso con todo el esfuerzo que le había puesto, mientras que Huang dijo que podría haberlo hecho mejor, aún habiendo obtenido el primer puesto.
Se le hizo alguien demasiado egocéntrico y que no podía ver más allá de su propia nariz, así que inmediatamente comenzó su aversión por él.
Y parece que sus sentimientos eran correspondidos, a Huang tampoco parecía agradarle demasiado, por lo que era ya una rutina verlos discutir.
Suspiró pesado una vez volvió en sí y tomó ambos vasos en sus manos, volviendo a la pista de baile donde se supone aquella rubia lo estaba esperando.
Pasó el resto de la noche así, el alcohol lentamente tomando control de su sistema y cuando la fiesta terminó y toda la gente había abandonado la casa casi siete de la mañana, cayó rendido en su cama.
