Reencarnación

Capitulo 8

-DIALOGOS-

"PENSAMIENTOS"

LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN SIN EMBARGO LA ADAPTACION ES DE MI TOTAL PERTENENCIA Y NO PERMITO SU USO SIN MI PREVI AUTORIZACION

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CAPITULO 8

Su corazón dolió ante la mención de ese nombre mientras su respiración se volvía entrecortada

Observo al hombre arriba de ella

"¿Tomioka?"

Todo alrededor de ella comenzó a dar vueltas. Ajena a todo lo que estaba pasando a su alrededor

-Sakura, ¡Por favor!- el grito de Tanjirou la saco de su ensoñación mientras sus jades se posaban en los rojizos de el -¡llévate a Nezuko y protégela!-

-¿Eh?- cuestiono mientras ladeaba ligeramente su rostro para ver al pelirrojo aun aturdida "¿proteger? ¿de quien?"

-Rápido- murmuro Tomioka mientras Shinobu nuevamente intentaba blandir su espada contra ella

Sakura apenas si reacciono mientras tomaba a Tanjirou y Nezuko entre sus brazos y comenzaba a llevarlos con ella

Comenzó a correr mientras todo a su alrededor parecía nublarse

No estaba entendiendo nada de lo que estaba pasando

Pero aun así... lo único que tenía claro era que no debía de parar

Tomioka solo observo por sobre su hombro como esa mujer comenzaba a alejarse nuevamente de el

"maldición"

-¿Sabes que de nada servirá retenerme aquí verdad Tomioka-san?- murmuro Shinobu con una sonrisa -recuerda que no soy la única en estar en este lugar

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-A-alguien n-nos sigue- menciono Tanjirou mientras tomaba fuertes bocanadas de aire

Sakura frunció el ceño. Ya hace poco que se había dado cuenta, pero la gravedad de las lesiones de Tanjirou no lo permitían apresurar el paso, si lo hacía terminaría lastimándolo mas de lo que ya estaba

"mierda" pensó molesta, no tenía más opción -peleare- agrego firmemente la de hebras rosadas mientras detenía su andar y colocaba a Tanjirou y Nezuko sobre el respaldo de un tronco

-Espera Sakura- jadeo el pelirrojo -no... no deberíamos de llegar a esos extremos-

La pelirosa lo ignoro completamente mientras giraba sobre su tobillo. Sus ojos verdes se abrieron ligeramente con sorpresa al notar que la persona que los había estado siguiendo era una chica que probablemente tenia su misma edad o era menor por un par de años. Llevaba su cabello azabache peinado en una coleta de lado y sus ojos eran violetas como las mismas glicinas

Sakura apretó sus puños, no quería lastimarla, pertenecían a la misma organización. Pero tampoco podía permitir que lastimara a Tanjirou o Nezuko

Haría lo que fuera necesario para protegerlos

Los ojos violetas de Kanao ni siquiera repararon en la chica de cabellos rosados frente a ella, lo único que tenía claro es que debía de acabar con cualquier demonio que se encontrara en la zona y solo a un par de metros se encontraba uno de ellos