Descontrol

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Antes que nada, gracias por l@s que han venido hasta aquí, no soy escritora, nunca he escrito nada, pero tenía una idea hace muchos meses en mi cabeza y he descubierto que me desconecto escribiendo estas pequeñas líneas. Un abrazo y disculpen mi tardanza.

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La reunión transcurría en tranquilidad, todos comentaban sobre lo felices que estaban con esos primeros capítulos, Sergio por su parte reía con Andrés uno de sus mejores amigos del set, intercambiaban frases y bromas, en general era un ambiente muy agradable para todos, pero había una persona que no se sentía parte de allí, quería salir corriendo sin mirar atrás, quería tirarlo todo por la borda, su carrera, los premios que estaban en juego, su sueño de actuar fuera del país, todo se iría a la porra si tomaba la decisión que en este momento se le pasaba por su cabeza.

Las cosas no habían ido bien desde el primer minuto, Sergio se encargó de solo saludar a los más cercanos a su asiento ya previamente separado por la producción y solamente lanzar miradas y gestos a los demás, pero a ella a ella ni un sólo contacto, en tanto alboroto nadie se percató de ese pequeño detalle, él no quería tener ningún contacto con Raquel, pero entonces cómo serán las próximas escenas juntos, los ensayos, los besos o las las secuencias de cama que muy seguramente vendrían, ya que, en la temporada anterior se habían dado cuenta que había un numeroso grupo de fans que pedían a gritos estos momentos y no solo por el sexo, era su complicidad, sus miradas, su química estaba enganchando al público, así lo habían dejado claro los encargados de redes y publicidad. Raquel no tenía ni la más mínima idea y no quería pensarlo más, solo quería salir fuera de ese lugar.

Luego de una hora desde la llegada de Sergio, todos se tomaron un descanso para un café, Raquel aprovechó la oportunidad para irse lo más lejos que pudo de allí. No quería que la vieran llorar.

Silene lo vio todo, la siguió para apoyarla, al fin y al cabo conocía muy bien a Sergio y sentía una gran necesidad de acompañar a Raquel en este momento, Silene era la única que conocía casi al 100% la historia que corría por debajo.

Silene: Raquel no puedes estar todo el tiempo huyendo de todos, se está notando demasiado la tensión entre ustedes. No quieres que se haga un rumor mayor no? Vamos bonita debes poner a resplandecer esa actriz fantástica que llevas dentro, esto no lo puede saber nadie más.

Raquel: Pero qué van a saber Sil, qué? Si aquí no hay nada. Parece que me odiara, que no quisiera verme aquí, por eso quiero irme, hablaré con Alejandro y Jaime, de verdad no aguanto trabajar así. Les pediré que vuelquen el guión y que mi personaje muera, Amaia ya no será problema dentro de esta producción.

Silene: Raquel por favor, Amaia y Lucas son el centro de esta historia, crees tu que de repente todo se va a ir a la mierda, los fans acabarían con todo. Tienen que parar esto Sergio y tú, tienen que poder trabajar juntos a pesar de todo lo que pasó.

Raquel: No es un buen día Sil, me iré a mi piso voy a inventar cualquier molestia, no aguanto un minuto más aquí.

Silene: Raquel por Dios nos falta la mitad de la sesión, no puedes hacer eso, te necesitamos. Sería muy extraño que la protagonista no esté en la lectura del guión. Aguanta bonita, tienes que aguantar.

Raquel: No sé, voy por un analgésico que en serio me está doliendo ya la cabeza y al baño, pensaré qué hacer Sil, gracias gracias por estar.

Mientras buscaba donde tomar su pastilla, un mensaje de texto hizo vibrar su celular.

El nombre que vio, hizo que el dolor de cabeza que tenía en ese momento se fuera al piso, su estómago empezó a contraerse y los dedos no podían ingresar la clave para desbloquear el móvil.

Sergio Marquina

Tomó fuerzas para abrir la aplicación, sentía que no estaba llegando la respiración a sus pulmones.

Raquel, se que te parecerá muy extraño este mensaje. De verdad espero esté todo bien, ahora a lo profesional: Estamos esperandolas a Silene y a ti para concluir. ¿Podrían no tardar tanto por favor?

¿Cómo interpretar aquella cosa que acababa de leer?

¿Quería verla de nuevo?, ¿La extrañaba? U objetivamente lo único que quería era largarse rápido a su casa y no verla por un buen tiempo dada su ya mencionada licencia.

Raquel no pensó más en ese momento, hiperventilaba y su cabeza era un torbellino de emociones. Buscó rápidamente dentro de sus contactos a Jaime, le llamó, se excusó en un fuerte dolor de cabeza que no le dejaba leer muy bien, por lo tanto no estaba en condiciones óptimas para seguir la reunión. Jaime la comprendió.

Ingresó nuevamente a la aplicación borró el mensaje de Sergio, pidió un coche en otra de las app de su celular y se marchó sin más a su piso alquilado.

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Aquel piso era rentado única y exclusivamente para las temporadas que tenía en Madrid rodando, la verdad no se sentía cómoda en aquella ciudad, le costó mucho aceptar aquel papel, pero lo hizo. Una vez allí escogió un espacio en un barrio céntrico, un piso muy sencillo en el que estaba cerca de algunos conocidos y amigos. Allí se sentía un poco más cerca de casa.

Una vez en la puerta de aquel lugar, no encontraba las llaves, buscaba entre las cientos de cosas de su bolsa, ¿Las habría dejado en su casa en Euskadi?. Si fuese así no tendría como saber, Alberto estaba fuera, su madre no tenía llaves de casa. Estaba con un problema tremendo, adicional al que ya le estaba atormentando su cabeza, pensó por un momento en ir a un hotel, estaba exhausta y no quería esperar al dueño del lugar o a un cerrajero. Quería simplemente cerrar los ojos y escapar del mundo.

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Corrió de prisa a un pequeño hotel cercano, revisó nuevamente su móvil, para su sorpresa había otro mensaje de Sergio. ¿Pero qué quería este hombre? Esta vez no lo abrió, no soportaba más. Se fundió en un sueño profundo.  

Secretos - AU Serquel By AnónimaSerquelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora