Blue Bird [Narusasu] [Menchara]

007

                   ~BLUE BIRD~

  Se quedó congelado en ese lugar, escuchando tan angelical y melodiosa voz, no era grave, tampoco aguda... Era ese intermedio perfecto, que te haría dudar si estas escuchando a un hombre o a un ángel que buscaba embriagarte. Ese intermedio único, donde todo tipo de notas y el quiebre de voz eran perfectos. Donde la melodía te envolvía y no te dejaba volver, hasta que terminaras de escucharle. Su corazón latió con fuerza, era la primera vez que una voz así, lo hacía sentir de ese modo. Ese momento era como los sueños, donde te sientes en las nubes, pero a la vez estás confundido de que camino tomar, esa voz que parecía el canto de una sirena, que estaba cazando para llevarte y ahogarte en tu propio enamoramiento mientras devora tu carne. Pero lo único que sientes es satisfacción.

Así lo sentía, su pecho se estrujó al escuchar esa voz, no sabía si era la emoción de su corazón o el simple hecho de que esa canción, tenía una letra que te hacía reflexionar por lo profunda y compleja que era.

La brisa sacudió sus cabellos y erizó su piel, miró aún con la emoción latente dentro de su pecho, la entrada que lo llevaría a conocer, a aquel bello ser que le estaba encantando más de todos sus sentidos.

Caminó lento mientras la voz pronto comenzaba la estrofa final. Cuando dio un paso adentro, agachó la cabeza, aún indeciso de querer saber quién era. Algo en sí se le hacía conocido, pero no estaba del todo seguro. ¿Que pasaría con Sasuke? Ahora estaba terriblemente confundido. Esa voz y ese chico lo tenían en total dilema. No pudo siquiera elegir porque aquella voz, terminó de cantar y sonoros aplausos se escucharon por el lugar, miró abatido la escena. Muchas personas rodeaban el lugar sin permítirle ver quién era el que había cantado. Suspiró resignando, no tenía suerte, jamás la había tenido, de hecho. No creía en eso. Prefería creer en la fe, algo de lo que si estaba seguro que ocurría.

__oh, Naruto Uzumaki está aquí.

Dió un saltito cuando pronto la atención se dirigió en él, otra vez el lugar era llenado de aplausos de personas que veían al rubio llegar. Hizo una mueca nerviosa mientras caminaba con algo de seguridad cada vez más al interior. Las personas abrían paso para dejarlo pasar sin dificultad. Mientras este sonreía como podía a todos los que le saludaban.

Divisó a lo lejos su madre y un montón de personas, su familia y otras que aún no conocía. Caminó esta vez más tranquilo de haber hallado su destino final, tenía que llegar aquella noche. Tan distraído iba que chocó con un chico, tan hermoso como solía verlo, su Sasuke estaba ahí.

Abrió sus ojos sorprendido al ver al causante de su confusión ahí, pero este tan solo con la cabeza gacha se disculpó sin mirarle y se sentó a donde se supone que tenía que llegar.

Cuando estuvo cerca, tenía el semblante entre confundido y dichoso, de saberse que esa noche estaba ahí, su chico azabache. Miró el techo mientras susurraba un pequeño "gracias". Y miró con la más deslumbrante sonrisa a los que se hallaban ahí.

__buenas noches con todos -dijo amable mientras se inclinaba ante las tres familias que lo veían tan atentos- lamento la demora, tuve algunas complicaciones.

Los Uchiha estaban asombrados por tan impecables modales, los Senju estaban felices de ver a su rubio querido, los Uzumakis disfrutaban la alegría imprevista de su rubio cabeza hueca y estaba ahí un Sasuke con el corazón en la boca, por la pena que tuvo en el esenario y también...

Ya había escuchado que el rubio acosador estaba ahí, pero no creyó que realmente fuera él, tenía el fiel pensamiento de que había un montón de chicos llamados así, vaya que sí se equivocó, no quiso voltear a verle siquiera. Estaba nervioso, lo que para el era, algo sin razón alguna.