A la mañana siguiente la luz que se colaba por la ventana del pequeño cuarto despertó a un chico pelirrojo haciéndolo ronronear en los brazos de su alfa, abriendo lentamente sus ojos para conectar su mirada con la del mayor quien estaba despierto desde rato antes admirando a su chico. Se sonrieron y pegando sus labios se dieron los buenos días, saliendo de la cama el mayor se dirigió a la cocina y preparo el desayuno de los dos sin importarle que ya eran las doce de la mañana. Yun se paro al baño para hacer sus necesidades y después dirigirse a la cocina donde el rico olor de unos waffles le llego a la nariz, sentándose en el sillón espero pacientemente la comida aunque su estomago rugía de hambre. Ambos se acomodaron y desayunaron en silencio, simplemente disfrutaban la compaña del otro y el hecho de estar juntos. Al terminar Armando se dirigió a la ducha mientras el pelirrojo se acomodaba a ver televisión, no quería ir a trabajar le daba flojera tener que estar todo el día peleando y gritando cosa que le afectaba estando como estaba (ustedes me entienden xd)
El moreno salió de la ducha encontrándose a su omega viendo una película y comiendo aunque hace nada habían desayunado, se cambio y tomándose unas pastillas para mantenerse despierto se dirigió a la puerta para irse al taller pero unos brazos lo detuvieron.
-Te ilas sin despedilte? -dijo el menor ocultando su sonrojo en la camisa de Armando
Este se volteo y cargando a su pequeño niño lo beso, era un beso un tanto frio pero Yun no se dio cuenta. Ocultando la cara en el cuello del alfa le dejo un caminito de besos mientras lo sentía temblar, Armando lo cogió por la cintura separándolo de el y saliendo por la puerta dejando triste a Yun. Pero lo que este no sabia era que el moreno estaba nervioso, no creía que iba a ser padre, que había dejado preñado al amor de su vida. Sabia que era su responsabilidad encargarse del cachorro y de la salud del pelirrojo pero no podía evitar estar nervioso, quien no lo estaría aun teniendo 33 años le daba miedo no poder cuidarlos. Y también el echo de que Yun tenia 20 años lo complicaba pero el no sabia la edad del omega, ni mucho menos el problema que tenia este, el secreto que guardaba desde la visita al doctor.
No supo muy bien en que momento llego al taller pero Yun se esfumo de su mente cuando vio el desastre que estaba haciendo Juanjo, poco a poco se iba pareciendo al pelirrojo cosa que alarmaba a todos, con un alborotador les bastaba. Pero la cosa tampoco mejoro cuando llego el comisario ruso a tocar los cojones, según no habían arreglado bien su patrulla y por eso se había estrellado en un atraco. Los dos alfas (Emilio y Armando) estaban ya hartos de todo, ambos tenían la misma preocupación rondando en su cabeza, claro esta cada uno con su respectiva pareja. Cuando llego la hora de la comida, el moreno corrió a esconderse a su despacho, quería alejarse de todo y todos. Acostándose en el sofá se estaba quedando dormido cuando el timbre de su celular lo hizo pararse mas que cabreado, era Yun, poniendo su mejor cara (aunque no lo pudiera ver el otro) contesto.
-Almandoo -sonó la chillona voz del chino
-Como estas Yun? Necesitas algo?
-Y-yo bueno...quelia...vel como etaba -claramente era una mentira pero le daba vergüenza decir el verdadero motivo de su llamada
-Sabes que eso es mentira, que necesitas chaval? -dijo masajeándose la sien
-Y-yo bueno...ya no hay comida y....tengo hamble -aunque no lo podía ver, Armando sabia que estaba sonrojado
-mgh... -jadeo intentando contener una carcajada, pero fue imposible, su sonora y hermosa risa inundo el lugar
-Que te follen! -grito el pelirrojo- yo mimo bucale mi comida, que te palta el culo un puto camión!
-Anda...A-anda...te consigo comida y voy para la casa, vale?
-No! Ahola te jodes, no vuelva nunca
-Chaval no te enojes, que era broma. Anda dime que me quieres -dijo saliendo de la oficina y cogiendo su coche
*FIN DE LA LLAMADA*
Sin cambiarse la ropa del trabajo salió con dirección a la tienda mas cercana, compro varios "aperitivos" y se dirigió al departamento de su omega. Apenas se paro frente a la puerta el olor a frambuesas amargas le hizo saber que el pelirrojo estaba enojado pero armándose de valor entro. El lugar era un desastre, cosas tiradas por doquier y su ropa en el suelo le dieron a entender que el menor había echo una rabieta. Suspirando se abrió camino entre todo el tiradero y entro a la habitación Yun, este estaba echo bolita en una esquina llorando, dejando las cosas que había traído en la cama se acerco hasta el y lo cargo.
Mientras acariciaba su espalda soltó su aroma a romero para calmar a su niño, cuando los temblores disminuyeron agarro la bolsa de comida y se acomodo en el sofá. Poniendo al menor entre sus piernas quito sus manitas de su cara, y le dio un beso sonriendo ante la ternura que le causaba esa imagen. Abrió el paquete de donas que había traído y le ofreció una al pequeño omega, que la cogió con un brillo en sus ojos y la comió de forma lenta intentando huir de la mirada del mayor. Ver a su omega comer le fascinaba al mayor, le parecía un ratoncito, dando mordidas cortas y tirando migajas.
Mientras el pelirrojo comía el alfa le daba mimos haciéndolo reír y sonrojarse, el preciado taller de Armando quedo en el olvido ese día. Al caer la tarde se podía presenciar una hermosa escena en la sala del nido de amor ocupado por esta pareja. La cabeza del pelirrojo estaba apoyada en el pechó del mayor y este lo había enredado con sus brazos en forma protectora, las respiraciones de ambos estaban calmadas y una sonrisa se pintaba en el rostro de ambos. Por que no se podían quedar así para la eternidad?...
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Hola Buenas!
Como andan? Yo muerta de miedo...me uní al server de axozer y raptor e intente socializar y no puedo!!!!! Mi mente colapsa cuando alguien me contesta AAA
Pero bueno....les traigo su dosis semanal de Yunando!!!!!
Espero lo disfruten!!!
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