Desde la ventana que daba a la sala se podía apreciar a un hombre y una mujer, el, de aproximadamente 33 años y ella de unos 20. Cualquiera podía reconocer al hombre solo con ver su apariencia, ojos negros, tez morena clara, cabello castaño oscuro y complexión robusta. Pero la gran duda es: Que hace aquí Armando Grúas? Y quien es la chica tan linda que lo acompaña?
Ella es Marie Trucazo, hermana del mejor amigo de el antes mencionado y desde hace exactamente 3 meses y medio salía con el jefe de The Union. El día en el que se habían conocido ella lo recordaba con cariño, Freddy la había llevado al taller para poder pintar su moto y entre todo ese desastre lo vio. El guapo y sexy jefe del taller hablaba por teléfono mientras tomaba un café ¿Acaso era el un ángel caído del cielo?
Su hermano era su colega así que pronto se pudo acercar a el y con el tiempo ser algo mas que amigos, lo que ella no sabia era que en el momento en el que se beso con Armando el imaginaba en su cabeza a nuestro adorado pelirrojo. Con el pasar de los días Marie noto un considerable cambio en su pareja y no solo por el echo de que a veces era insoportable, si no porque parecía estar en otro mundo. Así como ahora.
-Bebé, estas bien? -dijo abrazando por la espalda al alfa, llevaba veinte minutos viendo una pared. Este solo se tenso y sonrió algo incomodo.
-Si, todo bien...El tema es debemos hablar de algo -hablo el moreno
-Que pasa?
-Necesito tiempo Marie, debo ir a un viaje durante varias semanas. Y preferiría...no hablar con nadie en ese tiempo. -dijo nervioso esperando la respuesta de la chica. Tal vez estar alejado de ella le serviría para aclarar su mente, necesitaba decidirse antes que su hijo naciera.
-Bien, pero cuando vuelvas me avisas y nos vemos en algún lugar. Te extrañare demasiado -murmuro acercándose lentamente al mayor y besándolo con pasión, subiendo a su regazo y desabrochando con rapidez su camisa. Pero las manos del mayor la detuvieron y también el sonido del celular de este, suspiro molesta ¿Hace cuanto no follaban por que Armando siempre ponía un pretexto?
-Me tengo que ir -agarro sus cosas y dando un beso en la mejilla de la chica salió a la velocidad de la luz rumbo a su acogedora mansión.
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Los integrantes de la mafia de The Union reían divertidos en la piscina, mientras un entristecido omega los miraba desde la ventana de su habitación. La verdad era que no extrañaba estar en la piscina ya que odiaba el agua pero si el poder jugar y corretear con sus "hermanos", cerro su ventana al igual que la cortina y se sentó en la cama. Inconscientemente acaricio su pancita, podría dejar el mundo entero con tal de estar con el pequeño niño que tenia en su interior.
Se paro dispuesto a bañarse pero al buscar su ropa en el armario se entretuvo mirando viejas fotos que había olvidado ahí, muchas por no decir todas eran con Armando. Pescando, paseando en la montaña, nadando, montando en bici, bares, cumpleaños, tantos recuerdos bellos que había compartido con el amor de su vida. El sonido de un golpe en su puerta lo hizo pararse y volver al mundo actual, Tonet estaba parado frente a la puerta con cara de felicidad.
-Chinoooo -dijo feliz o tal vez un poco borracho, quien sabe- Quisiera ser photoshop para retocarte, retocarte y retocarte
Definitivamente borracho.
Yun rodo los ojos pero no pudo evitar que sus mejillas se tornaran de un pálido rojo, a quien no le gustaban los piropos?
-Me gustaría que fueras cereal para cucharearte un sábado por la mañana -grito carcajeándose al instante
-Falet! Ciela la boca malicon, venga que te llevo a tu cualto! -replico pasando un brazo por la cintura del alfa y arrastrándolo hasta su habitación, lo bueno era de que era a un lado. Cuando entraron el aroma a tierra se intensifico, que se podía esperar de un alfa que siempre estaba feliz. Cuando lo dejo sobre la cama Tonet lo agarro del brazo obligándolo a permanecer a su lado, sus bocas estaban peligrosamente cerca.
-Sabes que desde hace mucho tiempo muero por hacerte mío? -murmuro el mayor haciendo temblar al menor.
-Esta' bolacho Tonet no 'abe ni que dice
Terminaron por cortar el espacio que había entre sus bocas y disfrutaron del momento, ya después se arrepentirían. La mano del asiático estaba en la cara del moreno acariciando su mejilla con cariño, mientras que la mano del alfa estaba posada en la cintura del menor. Movió de forma lenta su mano hasta llegar a su barriguita y gruño cuando la sintió, Yun se aparto algo asustado cuando lo vio enseñar los dientes. No era su cachorro y su lobo interior lo reconocía.
-Peldon malicon -susurro el menor antes de descargar un golpe en la cara del mayor y durmiéndolo al instante. Suspiro frustrado y salió del cuarto, ahora si se iría a bañar.
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Juanjo subía las escaleras hacia el cuarto de su mejor amigo pelirrojo, tenia muchísimas ganas de hablar con el después de varias semanas de ausencia. Cuando entro oyó la regadera así que se acostó en la cama esperando a Yun pero algo llamo su atención, había una extraña imagen en la mesita de noche a su lado. Para su mente inocente era una imagen super distorsionada de color azul y negro pero de repente vio una pequeña forma en ella, era como un niño. Muy pequeñito pero tenia complexión de niño ¿Qué carajos era eso? (Esto vio 👇🏽)
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No oyó la puerta abrirse del baño hasta que un gritito se escucho, volteo aun con el ultrasonido entre manos y vio al chino temblando en la puerta del baño. Su mirada paso desde su cara de susto hasta su estomago que se marcaba con la playera que traía, ambos se miraron hasta que Yun corrió a la puerta de su cuarto y la cerro.
-P-pero...-balbuceo todo confundido Juanjo
-Mila yo... -empezó a decir el asiático
-Tendré un hermanito -murmuro el niño (xd)
-Que?
-TENDRE UN HERMANITO AAA -chillo emocionado el omega con olor a lavanda, camino hasta el pelirrojo y lo abrazo con cariño
-Como que helmano gilipolla? -gruño Yun separando al joven de él, aunque estaba feliz. De los dos que lo sabían Juanjo parecía mas contento con la noticia, se sentó en la cama y se dedico a reír con cada tontería que decía el pequeño.
Estaba discutiendo con el pelinegro nombres para su cachorro cuando su celular sonó, lo agarro con una sonrisa en la boca pero se le borro apenas vio el mensaje. Era una foto de Armando con una chica, parecía ser joven posiblemente mas que el asiático. Pero el problema era que se estaban besando, no reconocía el lugar pero estaba seguro que era la morra que había visto en el taller.
Su tez se volvió mas pálida de lo que era, su respiración se empezó a cortar y un dolor en el costado remato su estado. Soltó el celular provocando que este cayera al suelo y Juanjo se le acerco preocupado.
-Yun? Que tienes? -el mayor negaba pero su cara seguía tornándose pálida- Llamare al boss, no te muevas ya vuelvo
Salió del cuarto corriendo dejando al asiático jadeando y pensando en mil cosas a la vez, el sonido de pasos y la entrada de el alfa de ojos negros en su cuarto le produjeron el doble de horror. Armando puso su mano en la mejilla del chico y la acaricio, que asco le daba ser tocado por el moreno en ese momento.
