. S P E C I A L C A R E S .
⏝꒷꒦꒷⏝꒷꒦꒷⏝꒷꒦꒷⏝FINAL
Entre palabras bonitas y mimos, Argentina y México cocinaban juntos. Este último estaba muy felíz de ya poder ayudar y hacerle compañía a su solecito, era su parte favorita de todos los días, estar con el amor de su vida.
México sonrió felíz y abrazandolo desde atrás prosiguió a acariciarle el vientre.﹘Te amo﹘le dijo luego de darle un besito en los labios.
Argentina sonrió y le contestó con múltiples besos tiernos.
Todo iba a bien hasta que Argentina borró su sonrisa.﹘A-ah﹘se quejó sorprendido.
México se asustó y lo miró preocupado.﹘¿Q-qué pasó, solecito? ¿te lastimé? ¿te golpeaste?﹘le cuestionó bastante preocupado y asustado.
Argentina soltó una risita pero la calló con un grito seguido de su respiración agitada.﹘S-se... ¡SE ME ROMPIÓ LA FUENTE!﹘le avisó sintiendo unas contracciones horribles.
El Mexicano al oírlo sintió su cabeza dar vuelta por unos segundos, atónito y emocionado, sus emociones se revolvían en su estómago. Pero reaccionó cuando Argentina le dió un golpe en la pierna.﹘¡NO MAMES! ¡MI HIJO ESTÁ POR VENIR!﹘gritó felíz, pero cambió su expresión a lo segundos.﹘Chinga﹘expresó y se agachó para tomar a su esposo y ayudarlo a ponerse de pie.
En el trayecto Argentina no paraba de quejarse y maldecirlo por haberlo embarazado. Claro que no se arrepentía, solo eran los dolores del momento que lo hacían hablar.
Con apuro y cuidado, el tricolor lo llevó hasta afuera donde lo subió a su auto y lo acostó el los asientos traseros.﹘Tranquilo, mi amor, te llevaré al hospital, aguanta﹘le dió ánimos y le dió un besito antes de dar la vuelta y subirse al lugar del conductor.
Lo encendió con rapidez y comenzó su camino al hospital.
En el camino llamó de urgencia a uno de sus amigos y le pidió que le cuidara la casa mientras estaba ausente.
Ah e iba con el corazón en la boca, oír los gritos y quejidos de Arge no le causaban algo bonito.
No tardaron en acercarse algunos enfermeros cuando entró al hospital con Argentina en brazos. Ellos de inmediato supieron lo que pasaba cuando vieron su vientre y toda su ropa inferior mojada. Le dieron atención inmediata.
Él no hizo más que seguirlos hasta la sala de parto, que gracias a la petición de Arge pudo ingresar sin problema.
Jamás pensó que ahí dentro viviría el infierno donde tuvo que aguantar los gritos, apretones en sus manos, ganas de vomitar y casi un desmayo.
Pero luego se sintió en el paraíso cuando escuchó silencio por un segundo seguido del llanto de su legítimo hijo.
Todo pasó en cámara lenta para él; ver como su hijo era sostenido por un doctor era casi glorioso.
Apretó suavemente la mano de su esposo y sonrió muy felíz cuando, después de envolverlo en una manta, los doctores lo acercaron a sus brazos.
Lo tomó entre sus brazos con las lágrimas al borde de salirse y rió conmocionado. Aunque el bebé lloraba desesperado, traía paz y mucha alegría a su corazón.
Le dió un besito en la frente y aquella lágrima no pudo evitar caer por su mejilla lentamente.
Se giró un poco y pudo divisar a su esposo llorando a mares. Rió felíz y lo acercó a él para que lo tomara entre sus brazos. Sorprendentemente su hijo dejó de llorar.
Se secó las lágrimas y se agachó un poco para abrzarlos a ambos y darles un besito cargado de amor.
﹘Los amo﹘les dijo y los abrazó dejando escapar todas sus lágrimas de felicidad.
Aah no soy buena para esto 🤧
ESTÁS LEYENDO
SPECIAL CARES [AU] TERMINADA
Diversos⠀⠀› 🫐﹗ México 𖦹 Argentina 𓏲 ──────── Si uno se enferma, toca cuidarlo de manera especial.