Koi No Yokan || Shin Soukoku

Capítulo 1. Chica

Capítulo 1. Chica

Era una cálida tarde de jueves, el sol estaba poniéndose creando un cielo naranjo y suave. Atsushi salía del rio empapado, Dazai le miro mientras sostenía su mano formada en un delicado puño para evitar que su risa saliera en ruidosas carcajadas. El joven agente saco su camisa de botones de su pantalón simplemente para exprimirla sobre sus manos. Una constante pero baja tos estaba simplemente como un recordatorio de su fabulosa jugarreta. – Muy bien niños, paren de jugar – pidió Dazai.

― ¡DAZAI-SAN ESTO NO ES UN JUEGO! – grito Atsushi - ¡ÉL ME ODIA!

― Atsushi-kun ¿Cómo puedes asegurar que alguien te odia? ¿acaso lees corazones?

― Dazai-san, eso es muy sabio de su parte – contesto el azabache.

― Akutagawa-kun, Atsushi-kun. Hoy, los invitaré a cenar

Los ojos de Akutagawa brillaron ― No. ― Pronuncio Atsushi. ― Usted solo dice eso pero terminaremos pagando nosotros

― A mí no me molesta Dazai-san, será un honor

― ¡Akutagawa no caigas en su juego! ― Le regaño Atsushi.

― Jinko, mejor tu mantente en silencio o te vuelto a tirar al rio

― ¡HAZLO!

― ¡RASHŌMON!

Dazai paro a ambos chicos, y tomo sus hombros ― Ya, ya, ― alego sonriente ― continuemos esto con una copita en la mano.

― Dazai-san, yo no quiero ir

― Vamos Atsushi-kun, no puedes dejarme solo en esto.

― Si puedo

― Jinko deja de renegar ―Se quejó Akutagawa.

Así fue como aquel peculiar trio llego a un bar poco peculiar. Tomaron una mesa, Dazai pidió las bebidas. El ambiente entre ambos chicos era pésimo.

Por un lado, Atsushi estaba derivado en la nada, su cuerpo se aplastaba en el cosmos así como su trasero en el asiento, y su mejilla en su mano.

Mientras Akutagawa a pesar de estar bien sentado se veía incomodo e irritado. ― Muy bien, hoy los traje aquí para celebrar ― menciono esperando que los chicos por fin levantaran la mirada, y lo logró. Tenía la atención de ambos. Gracias a que el mesero trajo rápido los tragos. El castaño tomo su copa con sus dedos finos y elegantes. ― Por ustedes

― ¿nosotros? ― Dudo Atsushi

― Así es, porque mi creación salve Yokohama, hoy, mañana y siempre. ― Aclaro Dazai.

El mafioso y el agente se miraron. Tomaron sus vasos, se miraron chocando el cristal junto con la copa de Dazai. Acercaron el cristalino a sus labios, Atsushi cerró sus ojos para beberlo, aunque solo dio dos tragos, bajo el vaso con un rostro parecido a una extraña aflicción. Sus ojos cerrados con fuerza y sus labios quejumbrosos. Miro al azabache, quien se encontraba con medio cuerpo tirado en la mesa ― ¿Qu-Qué paso? ― preguntó el albino.

― Akutagawa es malo con el alcohol. ― sonrió Dazai. ―Atsushi-kun, eres el encargado de Akutagawa

― ¿Qué? Disculpe, repito. ¿QUÉ?

― Mi compañero de bebida no tarda en llegar y Akutagawa no puede ir solo a casa, acompáñalo

― ¡¿Por qué?! ―Grito desconcertado