MARATÓN 3/3

910 63 9
                                    

El reloj marcaba las 6 de la mañana, me encontraba desayunado algo ligero ya que no quería llegar tarde.

Mi jefe había enviado una dirección en el chat, era extraño, había propuesto que nos reuniríamos en su oficina,pero supuse que después de todo no hablaríamos de temas de trabajo sino personales, por lo cual no necesitábamos estar en la empresa.

Estaba lista para salir, solo tomé los papeles y caminé rumbo a tomar un taxi. Estaba nevando, mi abrigo no era lo suficiente grueso pero no me importaba, solo esperaba llegar a aquel lugar y abrigarme.

Le dí la dirección al conductor, me miró por el retrovisor unos segundos pero al final partió. Iba con nervios a ver al que sería mi padre, no sabía cómo o qué decirle, solo quería saber si me había buscado, si me había pensado o incluso extrañado.

Metí mis manos dentro del abrigo mientras el auto paró en un semáforo, miré a mi izquierda por el ventanal. En un callejón observé caminar a Hyunjin, iba cabizbajo, pateó una piedra mientras murmuraba algo. Inconscientemente puse mi mano en la vidrio, hasta que lo ví perder por el callejón al fondo.

El auto arrancó y empezó a dirigirse hacia un muelle fuera de la ciudad.

-Disculpe señor, ¿Es esta la dirección que le dí?- pregunté cunado estacionó en una casa pequeña junto al mar.

-Si señorita, es aquí- me miró por el retrovisor.

-Ah, ok, gracias- le sonreí y me bajé el auto.

Caminé hacia la casa que su entrada estaba hecha de madera, algo no cuadraba, ¿Por qué aquí? Alguien que maneja una empresa de seguro tenía bastante presupuesto como para vivir en una casa tan pequeña y hecha de madera.

Miré a mi alrededor, estaba sola, no había si quiera un auto parqueado en la carretera. Me aferré más a mi abrigo y caminé hacia la casa, de repente se abrió la puerta cuando estaba a punto de tocarla.

-Buenos días, pasa.

Era mi jefe, no respondí simplemente seguí insegura, algo pasaba dentro de la casa al escuchar ruidos en ella.

-¿Esta es la mujer que dijiste?- dijo una voz a mis espaldas.

Un hombre joven vestido de traje totalmente negro, solo resaltaba su corbata roja entre su abrigo, estaba sentado elegantemente en una de las mesas, parecía atento a cualquier cosa. De trás suyo había un hombre cruzado de brazos también con traje negro.

-Si señor, es ella- respondió mi jefe.

Lo miré sin entender aún, ese no podía ser mi padre, el hombre que estaba en la silla era muy joven aún, de seguro tenía casi mi edad. Me iba a acercar al hombre frente a mí pero sentí dos manos agarrarme de cada brazo, me tiraron con fuerza al suelo, solté un grito por la impresión y por el impacto de mi mejilla en el suelo.

-Así es señor JK, está es- una voz fría y profunda, muy reconocible para mis oídos logré escuchar.

Giré mi rostro para lograr ver a la persona, unos zapatos finos muy lustrados, un pantalón azúl oscuro, una gabardina a juego. Era mi padre, me miraba como una miseria desde allá arriba, me sentía como un gusano siendo aplastado.

-Si la maltrata dañará ese lindo rostro- escuché una voz suave interrumpir.

-Sueltenla, después de todo siempre fué una inútil, es imposible que logre escapar- ordenó el que era mi supuesto padre.

Empecé a derramar lágrimas, había sido engañada por mi jefe, no sé quién es el hombre frente a mí, pero hablaban de mí como mercancía. Mi "padre" había ayudado para esto al parecer.

POR UN ACCIDENTE - FIC HyunjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora