Capitulo 5

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Muy molesta en su habitación Mina iba de un lugar a otro, maldiciéndose a si misma por lo estupida que fue al aceptar ir a ese crucero.

"Debiste quitarle esos papeles de otra manera." Su voz interna recriminó "Por idiota tendrás que pasar 6 putos días más en este barco. Sola." Le recordó.

Si que había sido una idiota al haber ido sabiendo que sus cuñadas la odiaban.

Bueno, ahora tendrá que evitar a toda costa verles la cara a esas dos.

Su teléfono tomó y la imagen de su novia apareció. Mina sonrió levemente al recordar cómo Nayeon haciendo pucheros la obligó a poner su foto ahí para que Chaeyoung supiera que ahora estaba con ella.

Aún con esa sonrisa en el rostro el contacto de su novia marcó olvidándose por un momento la discusión que tuvo minutos atrás.

Un tono,

dos,

tres,

cuatro y la mayor no respondía provocando que el enfado de Mina volviera a asomar sus narices.

De nuevo marcó y de nuevo la llamada no fue respondida.

—¿Donde carajos te metiste ahora que te necesito Nayeon?—Al colchón de lanzó y al techo miró.

6 días.

6 días para que irse de allí...

De pronto escuchó como sus cuñadas y Chaeyoung reían por el pasillo. Las chicas pasaron frente a su puerta hacia sus respectivas habitaciones.

—Idiotas.—Gruñó mirando la puerta.

Meses atrás, las seis chicas eran un grupo muy unido, todas se cuidaban y apoyaban entre sí como 6 hermanas. Eran una gran familia feliz hasta que todo se vino abajo con el distanciamiento de Mina y Chaeyoung. En las reuniones de los fines de semana comenzaron a faltar ambas, o a veces solo una de ellas. La razón de Chaeyoung era porque comenzó a trabajar largas horas, intentado construir su propia empresa, el de Mina era porque conoció a nuevas personas con las cuales comenzó a relacionarse, entre esas personas estaba Nayeon.

La noticia de que Mina se fue de casa con otra mujer, pronto llegó al grupo.

Todas se negaban a creerlo, hasta que una semana después de que Mina se fuera de casa, la demanda de divorcio llegó.

Tzuyu, la odió con el alma de inmediato. Dahyun la despreció. Momo y Sana nunca se pusieron de parte de nadie. Ellas adoraban a la pareja por igual por lo que no podrían despreciar a nadie.

—Ring-Ring.—( a ling)

Sonó el teléfono en las manos de Mina unos minutos.

—Diga.—Molesta Contestó el aparato.

—Amor ¿Estás bien?—Era Nayeon.—No me digas que la idiota de tu ex te hizo algo por que le parto la cara.—dijo al otro lado de la línea hablando de manera rápida.

—No—Giró los ojos—no me ha hecho nada, y ¿por que no respondías?—preguntó aún molesta.

—Lo lamento cariño, aun sigo en la oficina arreglando unos papeles ya que mi querida socia se fue a un crucero con su ex y me ha dejado con mucho trabajo.—fue la repuesta de la mayor.

—Lo siento, pero sabes que saldrá algo muy bueno de todo esto. Te prometo que en cuanto llegue te ayudo a poner todo en orden, ¿Si?—Sonrió ya animada al saber que pronto estaría libre para estar con ella.

—Esta bien. ¿Y que tal el crucero ese?—

—Aburrido, te causa náuseas todo el tiempo, mucha gente por donde sea, horrible.—de nuevo estaba molesta.— Ah, y hoy discutí con la idiota de Tzuyu y Dahyun. Las dos se atrevieron a insultarme.—Se quejó

7 Días (MICHAENG) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora