Avengers de Acero

Capítulo 36 - Cielo Negro

Descargo de responsabilidad: todos los derechos pertenecen a Marvel y DC. No tengo nada.

Capítulo 36 - Cielo Negro

"¡Santa mierda!" Jessica exclamó cuando Clark fue arrojado como una muñeca de trapo y la inmensa grúa comenzó a caer.

Matt podría estar de acuerdo con esa evaluación.

El ruido, por sí solo, fue desgarrador. El acero que sostenía la grúa se dobló sobre sí mismo y prácticamente gritó cuando todo comenzó a derrumbarse. Los hombres de la Mano gritaban de pánico, intentaban correr, y fuera lo que fuera esa cosa que salió del ataúd, no dejaba de rugir.

Entonces, todo se vino abajo.

La tierra tembló, los contenedores de transporte se doblaron como latas de refresco, el suelo se rompió. Varios autos estacionados allí quedaron completamente destruidos y al menos cinco hombres murieron aplastados de inmediato. Los dragones también quedaron atrapados bajo el acero, algunos se atascaron, otros explotaron como vehículos volcados, agregando fuego a una escena ya horrible.

Y el monstruo que causó todo eso fue enterrado bajo toneladas de metal, desapareciendo.

Los tres, a salvo del camino de destrucción de la grúa, miraron desde detrás de su cobertura, sorprendidos por lo que acababa de suceder. Impresionado por lo rápido que sucedió todo eso. Un segundo Superman avanzó hacia una operación de mafia cuidadosamente administrada y el otro acero estaba lloviendo del cielo, aplastando todo a su paso.

Excepto por ellos, algunos mafiosos, dragones de metal y vehículos, el mismo Nobu ... Y el contenedor de envío que probablemente contenía Black Sky, cargado en la parte trasera de un camión.

"¡Ataca ahora! ¡Ve tras Nobu!" Sin embargo, antes de que Matt pudiera siquiera pensar en avanzar, Stick lo agarró del brazo. "No te acerques a esa cosa. Se necesitó medio ejército de los mejores guerreros Castos y una espada encantada para matarlo la última vez, y si podía lanzar a Superman así ahora, significa que su última encarnación no fue ni la mitad de fuerte como éste. Déjelo en manos del extraterrestre ".

Matt ni siquiera pretendió entender lo que dijo Stick, pero la idea principal era lo suficientemente clara: no antagonizar al monstruo que podría luchar contra Superman.

Ese fue un buen consejo, en realidad, aunque un poco innecesario, especialmente dado que el monstruo estaba atrapado bajo toneladas de acero.

Matt dejó la cubierta del contenedor de envío frente a ellos y corrió hacia el caos, saltando sobre los pedazos de la grúa caída y las llamas. Uno de los afortunados mafiosos que escapó de la muerte estaba tratando de levantarse y sin siquiera volverse en su dirección, Matt arrojó uno de sus garrotes contra él. El bastón de metal golpeó al mafioso en la cara, derribándolo de nuevo y rebotó en la mano de Matt.

A su lado, Jessica también se abría paso por el campo de batalla ardiente, gritando cuando golpeó a un dragón de metal con su maza; Puede ser molesta, pero esa mujer era fuerte , se dio cuenta Matt, cuando su arma contundente arrancó la cabeza del dragón de un solo golpe.

Stick, como él y diferente a Jessica, era mucho más elegante y ágil, tomando la distracción para noquear a los pocos mafiosos que aún estaban en pie con la parte roma de su katana; al menos estaba cumpliendo su promesa de no matar a nadie, incluso si los hombres a los que golpeó tenían varios huesos rotos ahora.