The Shinigami Creator (Death Note Fanfic) (Historia de Kureiji_otaku)

Capítulo 13: Muertes

"¡Ryoko, ven a ver esto!" Tía Chie llamó desde la sala de estar. "¿Qué pasa, tía Chie?" Pregunté mientras entraba a la sala. "¿Puedes creer esto? Todos los criminales están muriendo de izquierda a derecha. Es como si tuvieran mal karma o algo así ", dijo la tía Chie.

"Sí ... mal karma." Estuve de acuerdo. 'Quien esté usando el Death Note debe estar tratando de librar a la ciudad de criminales'. Pensé. Bien, hace como una semana durante el almuerzo, tiré el Death Note de Ryuk por la ventana y aterrizó en algún lugar de la escuela.

Alguien lo encontró y ahora están ocurriendo todas estas muertes. Probablemente en este momento, Ryuk esté con quien tenga el Death Note. "Tía Chie, voy a subir un poco las escaleras". Dije antes de disculparme.

Fui a mi habitación y comencé a escribir en mi diario. 

Día 3 de las acciones del usuario de Death Note

Al menos ocho criminales más murieron hoy. Creo que he descubierto el plan del usuario. Está intentando librar a la ciudad de criminales. Hace dos días, un tipo que iba en motocicleta fue atropellado por un camión justo afuera de un mercado en el que estaba comprando bocadillos. No estoy segura de cuál será el próximo movimiento del usuario. Hasta ahora, se ha deshecho de todos los criminales conocidos que han cumplido sus condenas. ¿Qué hará a continuación?

Cerré el diario y lo escondí en el cajón de mi escritorio antes de reclinarme en mi silla. "¿Me pregunto quién es el usuario?" Murmuré. Me levanté y me dejé caer en la cama, hundiendo la cara en las almohadas. Después de unos minutos, me quedé dormida, tomando una siesta.

(Time skip)

Jadeé y me levanté de la cama mientras tenía una pesadilla inquietante. Mi sueño involucraba a mi madre suicidándose y su cadáver me decía que era mi culpa que ella muriera. Fue solo un sueño, así que debería superarlo.

Miré la hora que marcaba las 3 de la mañana. "Tal vez una pequeña caminata debería calmar mis nervios. Me vendría bien un poco de aire fresco". Me dije a mi mismo. Me levanté de la cama y me puse la chaqueta sobre la camisa del pijama. Salí y di un paseo por el barrio.

Mis manos estaban en mis bolsillos mientras caminaba. No sé cuánto tiempo caminé, pero lo que sí sé es que debí caminar más de lo que pensaba porque no reconocí la calle en la que estaba. "Maldita sea. ¿A dónde diablos me fui?" Murmuré para mí misma.

Oh si. También me olvidé de mencionarles una cosa más. Desde que empezaron a ocurrir las muertes, la policía ha estado tratando de trabajar junto con alguien llamado L para poder averiguar por qué ocurren las muertes.

Me pregunto quién es este tipo L y cuándo se revelará a la policía. "¡Oye!" Me di la vuelta y jadeé cuando me empujaron contra la pared mientras un cuchillo presionaba ligeramente mi garganta. "No grites o ayúdame, te degollaré". Mi atacante dijo mientras cubría mi boca con su mano libre.

Lo miré sin comprender. "Dame todo lo que tienes". Él ordenó. Quité su mano de mi boca para poder hablar. "No tengo nada sobre mí, idiota. Acabo de salir a dar un paseo". Dije sin rodeos. "¡Eso es una mierda! ¡Ahora dame todo lo que tienes!" Él gritó.

"¿Estás sordo? Solo dije, no tengo nada". Lo repeti. "No ... No, tienes algo. Algo que podría gustarme." Él dijo. Su mano fue a mi chaqueta y lentamente abrió la cremallera. "Esto no está pasando" Yo dije.

Agarré firmemente sus brazos y clavé mi rodilla en su entrepierna. "¡Vete a la mierda, gilipollas!" Dije antes de salir corriendo. "¡Detente!" Me estremecí cuando escuché el sonido de un disparo. "¡No te muevas!" Dijo mi atacante.

Me di la vuelta lentamente con las manos en el aire. "Ahora, así es como va a pasar, Pequeña Dama. Vas a ser una buena niña y me dejarás hacer lo que quiera contigo. Si rechazas cualquier cosa que diga, te dispararé". Él amenazó.

"No, no lo harás." Mi agresor cayó con un grito de agonía mientras mi tía estaba detrás de él con una pipa en la mano. "¡Tía Chie!" Yo aplaudí. Corrió hacia mí y me abrazó. "¡Oh, gracias a Dios que estás bien!" Dijo mientras la abrazaba con fuerza.

"¿Cómo me encontraste?" Yo pregunté. "Me levanté a buscar agua y fui a ver cómo estabas. Cuando vi que no estabas en tu habitación, me preocupé tanto que fui a buscarte". Ella explicó. "Me alegro que lo hayas hecho." Dije, mi cara enterrada en su hombro.

"Vamos, vamos a casa". Dijo la tía Chie. Asentí con la cabeza y caminé con ella. Después de dar unos pasos hacia adelante, mi tía jadeó y rápidamente se metió en el bolsillo de la chaqueta y sacó una pistola. Reconozco esa arma.

Mi tía siempre guarda una pistola en el escritorio de su cajón en caso de robo. Me arrastró detrás de ella y apuntó con su arma al atacante que estaba de pie, sosteniendo una pistola en la mano. Antes de que la tía Chie pudiera apretar el gatillo, el atacante disparó primero.

Jadeé en estado de shock cuando la tía Chie recibió un disparo en el pecho. Cayó de costado cuando la pistola fue arrojada a un lado. "¡Bastardo!" Grité, enojado. Agarré el arma y le disparé al atacante tres veces. Las balas le atravesaron el pecho y cayó al suelo.

Jadeé ligeramente mientras mis manos temblaban levemente mientras todavía sostenía el arma. Dejé caer el arma y ayudé a mi tía. "¡No, no, no! ¡Tía Chie!" Agarré su mano porque tenía dificultad para respirar. "¡Ayuda! ¡Alguien, por favor ayúdeme! ¡A mi tía le han disparado! ¡Por favor! ¡Cualquiera!" Llamé por ayuda.

"¡Tía Chie, quédate conmigo! ¡Solo espera!" Supliqué. "Por favor ... no puedo perderte también ... no puedo ..." susurré. "Ryoko ..." Mi tía levantó su mano ensangrentada a mi cara, su mano colocó suavemente en mi mejilla. "Te.....quiero..."

Sus ojos rodaron hacia la parte de atrás de su cabeza mientras su mano se deslizaba de mi cara. "¡No! ¡Tía Chie, quédate conmigo! ¡Por favor! ¡Por favor, quédate conmigo!" Yo rogué. "¡No te vayas ... Por favor ...! ¡Ayuda! ¡Por favor, alguien puede oírme ?! ¡Ayúdame! ¡Necesito ayuda! ¡No! ¡No! ¡Por favor!" Grité.

"¡¡¡AYÚDENME!!!"