De sueños no puedes vivir; ya que mientras más vives en sueños,
más duele la realidad.
(...)
—¿Melissa acaso deberías esta aquí dormida? —Preguntó una voz familiar que reconocía de aquel pasado que solo aparecía en álbumes y recuerdos borrosos de mi memoria.
Com el cuerpo entumecido por dormir hasta tarde; escuchaba de nuevo esa voz llamarme y aún no lo creía.
Me desperté sobresaltada del sofá observando dónde había pasado la noche, aquél sofá rosado y apenas si tenía un cojín en mi cuello. ¿Había escuchado mal? ¿ esa voz era de mi mamá?
Aquella voz era la de ella... No tenía duda de esto, ese timbre jamás iba a ser olvidado, escuchar nuevamente su voz melodiosa qué sólo la podía escuchar en mi mente o al momento de llamar a su viejo número y ser atendida por el tipico mensaje de: —"se comunicó con Blanca Ortiz, deje su mensaje despues del tono"—. Miré a mi alrededor y arrastrando los pies me dirigí hacía el lugar donde hacían aquél extraño eco.
Sorprendida observé la antigua cocina y caminé cómo si mi cuerpo me pesará más de lo normal.
— ¿Mami?—- Me pregunte en mi mente, esas palabras no eran pronunciadas por el miedo que sentía, la luz del ventanal me enceguecía, todo brillaba cómo antes...
Sí, "Cómo antes..."
Mientras mis pies se esforzaban en continuar caminando, quería extender mi mano y lograr acariciar ese recuerdo. Los pasos pesados y con dolor en cada parte de mi cuerpo, todo empezó a ponerse negro otra vez cómo si hubiera ocurrido un apagón en plena noche de luna nueva y sin estrellas en el cielo.
....
Saltando de la cama con el corazón acelerado y abrí los ojos mas grandes y me estire escuchando mi aliento que acelerado que buscaba inhalar todo el aire que podía a grandes bocanadas.
— ¿Por qué me sentía tan sobresaltada? "Esto no era normal en mi"... —aquella frase la pronuncie llena de sarcasmo, jamás mi vida fue un sueño placentero, apartando mi cabello a un lado busqué conocer la hora en el reloj despertador de mi lado.
—¿3.00 am? ¡Demonios! Solo fue un sueño.
Suspire y mire a mi lado tratando de tranquilizarme, tanteando mi cama el alivió y una sonrisa debil se dibujo en mi rostro.
Al menos está vez, estaba sola.
Sola está vez y era algo bueno, arrastrandome a buscar una bata de dormir y mis las pantuflas para salir de la cama. Bajando las escaleras con pasos pesados y lentos, tenía la garganta seca que incluso dolía al tragar, odiaba esa sensación molesta. Para mi; buscar un vaso de agua en este lugar era una sentencia de muerte, pero no podía conciliar el sueño por la resequedad de mi garganta,lo necesitaba para volver a dormir y al menos no sufrir de agotamiento todo el día.
Miré el paisaje de hogar desde la escalera, la madera gastada y con manchas de humedad, había rastros de polvillo y de suciedad en cada rincón del lugar, mi mismo basurero y sólo había sido otro maldito sueño qué me ilusionaba para qué me doliera mas mi realidad al despertar...
Una realidad que sólo me lastimaba y no me hacía gracia.
La ilusión era un lujo en mi vida, un lujo que no podía costearme.
Una simple Realidad.
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Sweet Dreams
ParanormalYa habían pasado 10 años desde la muerte de los padres de Melissa. Ella, una joven de veintisiete años qué vivía sumergida en la depresión y buscaba refugio en sus fantasías mientras que sus mejores amigos eran los pensamientos de muerte y...