—no sabia que por estos bosques se escondían prófugos— dije mientras me sentaba intentando tapar mi desnudo cuerpo
Él salio de los matorrales ya transformado y me extendía una levita que se veía desgastada
—como supiste que era yo?— me pregunto después de que yo me pusiera la chaqueta
—tu amigo, el me conto maravillosas historias de los merodeadores— explique con una sonrisa al recordar lo que hablamos— de que tres de ustedes lo ayudaban a él en sus lunas llenas— una pequeña sonrisa surco sus labios
—no me tienes miedo?— me pregunto a lo que simplemente negué con la cabeza— por favor creeme al decirte que yo no entregue a mis amigos, jamás haría eso— me miro con esperanza brillar en sus ojos
—tu podrás ser un prostituto y un incorregible pero se que no eres un soplón o asesino— lo que decía es verdad por lo que remus me contó el jamas traicionaría a sus amigos nisiquiera por el riesgo a morir
—eres la primera en creerme de verdad gracias— se sentó a mi lado— y que haces aquí?— me pregunto
—estaba en una clase con un boggart, salio mi mayor miedo y escape— el asintió como si entendiera a la perfección lo que dije
—a mi me paso una vez, todos a los que amaba estaban esparcidos por el piso— apunto con su mano al suelo como si lo estuviera viviendo— pero lo que me destrozo al grado de hacerme escapar fue ver a mi amada Marlene sin vida en el suelo, sin ese brillo en sus hermosos ojos— un par de lágrimas cayeron de sus ojos
—vi exactamente lo mismo, severus estaba tendido en el suelo pálido como si de un maniquí se tratara— hable con mis ojos cristalinos
Luego de un rato de silencio vi la mirada que me lanzo sirius
>>que pasa?— pregunte pasando mi mano por mi mejilla
— quejicus? En serio?— pregunto, de todo lo que conté solo escucho eso? Reí
—que malo eres para las charlas emotivas— ambos estallamos en carcajadas
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Había pasado casi toda la tarde con sirius y ahora estaba transformada y caminando de vuelta al castillo
Cuando salí del bosque vi a hagrid, dumbledore y severus hablando, bueno dos de ellos hablando y severus dando vueltas de aquí para allá, me escondí detrás de dos calabazas apiladas y volví a ser yo
—emmm alguien me podría prestar algo para taparme?— les pregunte haciendo que los tres voltearan hacia mi sorprendidos, hagrid prácticamente corrió a su casa y luego de unos segundos volvió con una manta gigante
—tenga— dijo extendiéndola hacia severus, este la tomo y camino a mi, no se volteo o cerro los ojos ni nada
—le gusto la vista— dije burlona haciendo que una pequeña sonrisa se formo en la comisura de sus labios, me acerque a el y lo bese
Tomo mi cintura y me apego mas a el haciendo el beso profundo
—si— dijo para después caminar escaleras arriba, mire a albus y di una especie de chillido de felicidad
—ire a cambiarme para después hablar con usted— albus simplemente asintió con una bien disimulada sonrisa— hagrid gracias— el asintió y me invito otro día a tomar el té
•••
Toque la vieja puerta frente a mi, ya me había cambiado y ahora estaba fuera de la oficina de albus. Escuche un "adelante"
— Neferet ya me preguntaba porque no llegabas— dijo mirándome por sobre sus a lunadas gafas
—me bañé y cambie— el extendió su mano apuntando a un sofá, me senté y el imitó mi gesto
— y dime que viste que te llevo al extremo de ir al bosque prohibido— pregunto levantando una tasa de te
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Pasamos como dos horas hablando de cosas triviales hasta que alguien tocó
—a severus justo a la persona que quería mandar a buscar— dijo por lo que lo mire— la señorita aquí presente quería invitarte para navidad a su casa— sonrei y mire a severus
—la señorita aquí presente no tiene voz para invitarme ella misma?— me miro
— sev quería invitarte a mi casa para esta navidad ¿quieres venir?— pregunte mientras aun sentada tomaba su mano
—de acuerdo— salio como alma que lleva el diablo
—de nada— me susurro albus haciéndome reír
Tendré que llamar para que se apresuren en la construcción de mi casa